Los documentos del Ministerio del Interior dejan constancia de la comparecencia de la denunciante

Los atestados confirman las denuncias por supuestas amenazas de un beneficiario de Cáritas a otra usuaria del comedor

Crónicas ha tenido acceso a los atestados 8221, 8273, 8278 y 8340 del Ministerio del Interior que confirman las denuncias interpuestas por una usuaria del comedor de Cáritas que asegura haber recibido amenazas de otro beneficiario de la ONG. Las denuncias, que están registradas en los juzgados de Arrecife, dan cuenta de supuestos insultos y amenazas de muerte en el comedor, incluso, en una de las denuncias la afectada expone que el agresor la ha perseguido en varias ocasiones hasta su domicilio. La señora también manifiesta que debido al acoso no ha podido volver al comedor porque siente miedo “que las amenazas puedan llevarse a cabo ya que el individuo es muy violento”. En otra de las denuncias la víctima dice que justo antes de entrar al comedor el mismo sujeto le sacó un cuchillo, “que habitualmente porta en su chaqueta”, hasta que fue retenido por otras personas que comían en ese momento. La denunciante vuelve a señalar que teme por su integridad física y vaticina que algún día se van a materializar las amenazas que han sido proferidas en su contra.

Supuestas amenazas reiteradas

Según otro de los atestados, la víctima expone que no es la primera vez que la Policía ha tenido que intervenir en la puerta del comedor debido a que el supuesto agresor “siempre se persona a la hora de comer muy agresivo con todos los presentes”. El mismo atestado relata que el denunciado persiguió a la señora enseñándole un cuchillo y ante este hecho corrió hasta el Ayuntamiento en busca de ayuda. La Policía, según la versión de la denunciante, redujo al individuo pero una vez que los agentes se fueron volvió al comedor con el arma blanca por lo que fue necesaria una nueva intervención de los efectivos policiales.

Otra de las denuncias sitúa una nueva agresión en una cafetería de la calle Triana. En este caso la señora dice estar acompañada por dos personas que se percataron cuando el sujeto al verla empezó a hacerle gestos amenazantes con la mano con los que insinuaba que iba a pegarle. Ante la provocación, la denunciante expone que llamó al 112 y que en ese momento el agresor intentó agredirla pero sin éxito gracias a la intervención de uno de los acompañantes de la víctima. Los documentos oficiales constatan las denuncias y ahora la Justicia se pronunciará sobre la responsabilidad de los actos denunciados.