La dirigente de ApL dice que le ha cargado de moral comprobar la aceptación que ha tenido su trabajo en los sondeos que han ofrecido el fin de semana dos diarios provinciales

La presidenta adelanta que el Cabildo negociará para reducir la lista de pleitos judiciales

La presidenta de la Primera Corporación insular anuncia que la institución va a iniciar una ronda de contactos con los empresarios afectados por la desclasificación para intentar llegar a acuerdos que eviten más problemas en los tribunales

Acabar con el mayor número de conflictos judiciales abiertos en torno a la pelea del territorio. Esa es una de las principales premisas que maneja el Cabildo en estos momentos para abordar el desarrollo inmediato del Plan Territorial Especial, según desveló este lunes en los micrófonos del programa “El Despertador” de Lanzarote Radio su presidenta, Inés Rojas, quien apuntó además la importancia de entablar cuanto antes contacto directo con los empresarios afectados por la iniciativa para evitar que siga engordando la lista de pleitos y para intentar reducirla al máximo.

La presidenta del Cabildo, que estuvo trabajando como lleva haciendo en todos los días de puente desde que asumió el cargo, fue clara a la hora de enjuiciar la sesión plenaria que se celebró el pasado viernes. Respondiendo a la acusación del Partido Popular (PP) sobre el seguidismo que hace de la política del socialista Carlos Espino, dijo que no le importa que se afirme algo así, “porque trabajar para elaborar y mejorar el texto del Plan Territorial de Lanzarote es absolutamente normal”. Para ella, en el pleno se produjeron cosas muy importantes que no tienen nada que ver con las críticas de la oposición, como el esfuerzo que ha hecho no sólo para celebrar el mayor número posible de sesiones sino para recoger las sugerencias de la oposición, sugerencias como la inclusión del debate de las resoluciones. Tras el encuentro que mantuvo con los portavoces, finalmente se determinó que se debatan cinco mociones, las que consideren oportunas. Además, les informó de que se había reunido con todos los implicados en la tramitación del Plan Territorial y se había determinado que “todas las camas que se pudieran desclasificar se desclasificarán”.

Para Inés Rojas lo más importante en estos momentos para abordar un asunto tan importante como es la tramitación del Plan Territorial es que “no haya prisas”. “Sin pausa pero sin prisas”, expuso como lema, apuntando que “lo que no queremos es sacar el documento de cualquier manera, pero también queremos aprobarlo lo antes posible teniendo claro que es lo mejor para Lanzarote”. “Debemos tener en cuenta que esta Isla está inmersa en una cantidad de pleitos judiciales tremenda, y debemos aprovechar la coyuntura de tiempo para cerrar conflictos que pudieran dejarnos las zonas turísticas cerradas con cierta holgura y con cierto relajo. Con respecto a la oferta de ocio complementario, está claro que los alcaldes nos presentarán una propuesta con sus sugerencias para que las analicemos”, expuso. Con respecto al primer asunto, considera que es fundamental entablar contactos y negociaciones con los empresarios que se vean afectados por la medida y con los que se pueda llegar a un acuerdo para retirar los pleitos. “Si estamos con sosiego y nos dejamos de sospechas y cosas rarísimas, la cosa irá mejor. Vamos a seguir trabajando para sacar un documento que sea lo mejor posible para la Isla, porque todos hemos decidido vivir del turismo y debemos cuidar la fábrica, reestructurando las tres zonas más importantes tocando lo menos posible”, reseñó. “No somos locos los responsables de las administraciones públicas, y sólo necesitamos un poco de confianza. Antes de la aprobación inicial la gente sabrá lo que vamos a aprobar”, reiteró.

Negó además que hubiera tensión en la reunión con los empresarios, ya que a su modo de ver lo único que se produjo fue un intercambio de pareceres. Asimismo, tildó de “normal” incluso que organizaciones como la Fundación César Manrique se hayan expresado con la dureza con la que lo han hecho. “Al final la gente está satisfecha con la muestra que hemos hecho del documento, y la gente tiene claro que vamos a bajar todo lo que podamos el techo de las camas, dentro de un clima de cordialidad”, subrayó. “Me habría gustado que la Fundación me hubiera mostrado su inquietud y que me hubiera dado pruebas de sus sospechas”, señaló.

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