Hernández Bento cifra en un 20% las posibilidades de que Repsol encuentre petróleo o gas cerca de las costas de Lanzarote y Fuerteventura
El subsecretario de Estado de Industria, Energía y Turismo, Enrique Hernández Bento, acudió este viernes por la tarde a la cita que el Partido Popular (PP) de Lanzarote le había preparado en Arrecife para dar una conferencia en la que dijo muchas cosas, como que la posibilidad de encontrar petróleo enfrente de las costas orientales de Canarias es casi inexistente, que en estos momentos se está haciendo “el cuento de la lechera”, que no acepta lecciones de ecologismo de políticos como Paulino Rivero, Pedro San Ginés, Román Rodríguez o José Miguel Pérez y para confesar que es socio de Greenpeace desde los 18 años. “No entiendo por qué no ha venido antes a explicar todo esto”, le espetó una señora del público que se dio cita en el interior de uno de los salones del hotel Diamar. “He venido cuando me han invitado, y vendré siempre que me inviten”, contestó Hernández Bento. “Pues no tiene usted que esperar a que le inviten para venir, su obligación es venir aquí más a menudo a explicarnos todas estas cosas”, respondió la señora.
Y es que la visita del número dos del Ministerio que dirige su compañero José Manuel Soria ha llegado un poco tarde incluso para muchos de sus compañeros de partido en Lanzarote, que salieron encantados de la charla, tal y como explicaron a este diario tras la misma.
En contra de lo que pensaban los dirigentes del PP de Lanzarote, ni hubo bronca previa ni se produjo ninguna salida de tono durante la charla que sea digna de mención. Un grupo muy reducido de manifestantes se dio cita enfrente del hotel de Arrecife para dejar clara la postura que en teoría es mayoritaria de rechazo a las prospecciones petrolíferas, término que Hernández Bento dijo que es incorrecto puesto que de lo que se trata es de “búsqueda de hidrocarburos”, no sólo de petróleo. Los manifestantes, algunos de ellos con cinta adhesiva en la boca en señal de protesta por la falta de interés del Gobierno central en escuchar a la población más afectada por un posible vertido, entraron en la sala durante unos minutos y se marcharon casi en silencio con algún comentario de “no queremos escuchar más mentiras”.
Antes, la presidenta insular del PP, Astrid Pérez, se encargó de realizar la presentación de su compañero, al que agradeció lo rápido que le había contestado cuando le propuso venir a la Isla para explicar bien lo que hasta ahora no se había explicado. Durante su intervención fue especialmente dura con todos aquellos que han mostrado estos días su intolerancia y su falta de respeto hacia “ciudadanos canarios” que piensan de forma distinta y que defienden el “proyecto de exploración” de Repsol. “Nada justifica la violencia verbal o física que se está viendo en estos días por este asunto”, comentó, para añadir acto seguido que la realidad que están percibiendo es que algunos dirigentes políticos y algunos representantes de colectivos están “radicalizando el movimiento contra las prospecciones”.
Inmediatamente después atacó al presidente del Cabildo lanzaroteño, Pedro San Ginés, de quien dijo no entender que viera la presencia de Hernández Bento como “una provocación” y no como una buena oportunidad para aclarar a la población de la Isla aspectos que seguramente no se conocen. Dijo de él además que está practicando un “totalitarismo absolutista” en el que no cabe cualquiera que manifieste un pensamiento contrario al suyo. “Todos en el PP de Lanzarote estamos a favor de que se siga avanzando en el camino de la sostenibilidad energética, pero la realidad es que seguimos dependiendo de las energías fósiles en este momento”, detalló.
Pérez cuestionó seriamente el papel que está jugando tanto la institución insular como el Gobierno canario, puesto que a su modo de ver hablan mucho de desarrollo sostenible y energías limpias, gastan mucho dinero en estudios y más estudios y en realidad luego no hacen “nada de nada”. “Sobran análisis y falta aplicación y políticas efectivas”, expuso.
Intervención de Hernández Bento
Las primeras palabras del secretario de Estado durante su conferencia fueron dirigidas también al presidente del Cabildo lanzaroteño. “El señor Pedro San Ginés dice que yo he venido aquí a provocar y que mi presencia es una desfachatez. Yo le digo que sólo he venido para hacer uso de la palabra y para explicar qué quiere hacer un Gobierno legítimo que toma decisiones legítimas”, comentó. “Me da la sensación de que otros utilizan la amenaza para argumentar su postura”, remató, dejando claro, refiriéndose ya directamente a Paulino Rivero, que “yo soy canario, quiero a mi tierra y nunca haría nada en contra de ella y de su gente”.
El secretario de Estado, que profundizó mucho más de lo que se había profundizado hasta ahora en este importante asunto, recordó que la búsqueda de hidrocarburos no es un capricho sino una necesidad perentoria para un país energéticamente tan dependiente como es España, y con comunidades donde esta dependencia se acentúa más como es Canarias. Así, recordó que el coste anual de la energía que se adquiere fuera supera los 35.000 millones de euros, una cifra astronómica teniendo en cuenta que el Gobierno invierte en universidades 14.000 millones.
Enlazó inmediatamente el argumento de la dependencia energética con el de la cantidad de países que están realizando en estos momentos distintos proyectos de exploración en busca de hidrocarburos, incluyendo países del Mediterráneo con costa como Italia o Croacia o países del Atlántico como Portugal o Marruecos, de quien dijo, “en contra de lo que ha ido pregonando Paulino Rivero”, que no le queda un palmo de mar donde ponerse a explorar.
El político del PP habló del Partido Socialista (PSOE), formación que entiende que se comportó con normalidad cuando tuvo responsabilidades de Gobierno en todo el Estado, puesto que en ningún momento “rechazó la posibilidad al menos de investigar si hay riqueza energética en su territorio”.
Hernández Bento echó mano de la historia para recordar que en España se realizaron 689 sondeos exploratorios entre los años 60 y 70 sin que sucediera nada, con la diferencia de que en aquella época ni había declaración de impacto ambiental ni la tecnología que existe en estos momentos, en el caso de España a su juicio muy por encima de la que utilizan países como Noruega o Reino Unido.
“El cuento de la lechera”
Tras las explicaciones técnicas, en las que incluyó todo tipo de diapositivas sobre el proyecto que tiene entre manos, el secretario de Estado planteó diferentes cuestiones, como el hecho de que le llamara poderosamente la atención ver en las manifestaciones pancartas que rezaban “petróleo no, renovables sí”. “Me sorprende esa pancarta porque en Canarias no hay petróleo, y lo que se está haciendo ahora es averiguar si a sesenta kilómetros de nuestras costas hay hidrocarburos. ¿Y si finalmente encontramos gas, o nada? No habría servido de nada tanto debate y tanto dinero invertido en desinformar a la población”, aseveró. “No entiendo que se esté diciendo no a conocer, y me sorprende que se dé por hecho que se va a encontrar petróleo y que acto seguido se va a reventar una tubería, cuando se sabe que es muy difícil que se encuentre nada allí y mucho más difícil que si se encuentra se produzca un accidente”, insistió.
El representante del Ejecutivo central dijo que le encantaría vivir en un mundo en el que todo girara en torno a las energías limpias, aunque confesó que “la realidad que vivimos por desgracia no es esa”. “La realidad es que de aquí a 2035 se va a multiplicar por dos la demanda de hidrocarburos, y el 90 por ciento del incremento lo van a acaparar tres países, China, India y Brasil”, adelantó, afirmando que es el modelo que se tendrá que mantener mientras se realizan otros proyectos como el que se presentó recientemente en la isla de El Hierro.
En el caso de los vertidos, recordó que el 36 por ciento de la contaminación que se encuentra en el mar es por las cargas y descargas de los barcos y el 12 por ciento por el transporte de hidrocarburos. “No ha habido hasta el momento que yo conozca contaminación en la investigación”, subrayó.
Hernández Bento insistió en varias ocasiones en la campaña de “desinformación” promovida por el Gobierno canario, con temas básicos como la profundidad en la que se va a perforar, que es mucho menor a la que se ha utilizado en otros países, o con el tema de los no beneficios que se han negado siquiera a conocer. “Lo que yo no voy a hacer es el cuento de la lechera con los beneficios, puesto que las probabilidades de no encontrar petróleo o gas superan el 80 por ciento”, aseveró. Sin embargo, siguiendo la teoría del no cuento de la lechera, cifró en 35 millones de euros el dinero que se va a gastar Repsol en la base logística que insiste en que debe estar en Lanzarote y Fuerteventura. “Antonio Brufau vino aquí y los presidentes de los cabildos de Lanzarote y Fuerteventura rechazaron la inversión, pero nosotros vamos a seguir insistiendo”, comentó, afirmando que posteriormente en los sondeos exploratorios la compañía va a invertir en torno a 300 millones de euros. “Si se encuentran hidrocarburos, estamos hablando de que la inversión puede rondar los 7.000 millones de euros en cinco años y 5.200 millones de euros los costes operativos durante 20. En empleos alrededor de la industria auxiliar se podrían generar en torno a 3.000 o 5.000”, remarcó.
Socio de Greenpeace
El secretario de Estado mostró diapositivas de diferentes organizaciones ecologistas y colectivos sociales protestando contra las prospecciones. Paró para decir que “siento un máximo respeto por el Medio Ambiente y por la gente que se manifiesta para defenderlo, porque son personas coherentes que no cambian de postura”. “Pero yo también lo soy, porque soy socio de Greenpeace desde los 18 años, pago mi cuota anual y a los 25 años me hicieron socio de honor. Creo en ellos, en la labor que realizan, y no creería en mí si hiciera algo que fuera en contra de lo que ellos defienden”, aseguró rotundo para sorpresa de muchos de los presentes.
Acto seguido, usando también las diapositivas, dijo no sentir ningún respeto por gente como Pedro San Ginés o Paulino Rivero, que mienten a la población cuando saben que en su programa electoral se incluía la defensa de las prospecciones petrolíferas. Tampoco siente respeto por el presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, quien en sede parlamentaria dijo que estaba a favor del proyecto, como mucho menos sentía respeto por políticos como el socialista José Miguel Pérez, quien dijo que su partido sacaría adelante las prospecciones “con los ojos cerrados”. “Es decir, que lo harían sin declaración de impacto ambiental y sin nada. Pues yo lo haría y lo haré con los ojos bien abiertos para que todo se haga con las mejores condiciones”, soltó enérgico.