La dirección del Papagayo Arena no denunciará a los manifestantes que se colaron en su establecimiento "siempre que no se repitan los hechos"
El director de Operaciones de la cadena que gestiona el Sandos Papagayo Beach Resort, Javier Seguí, ha confirmado este martes a Crónicas de Lanzarote que no se plantean en estos momentos interponer una denuncia contra los manifestantes que invadieron las instalaciones de su establecimiento este lunes para realizar varias protestas "siempre y cuando no se vuelvan a repetir los hechos acontecidos". Y los hechos, ya calificados de graves por parte de diferentes cargos públicos de Lanzarote, tuvieron como protagonistas a parte de las personas que están detrás de la manifestación que se va a desarrollar el próximo domingo por las calles de Puerto del Carmen y que en teoría busca que se tomen medidas contra el turismo de masas. Ellos, con pancartas en la mano hablando también de la ilegalidad del hotel conocido popularmente en Lanzarote como Papagayo Arena, se colaron en las instalaciones y molestaron a los turistas que estaban en la piscina tranquilamente tomando en sol, en teoría para concienciarles de la situación en la que se encuentra en el lugar en el que residen por unos días en la Isla.
Seguí ha asegurado a este diario que desde el hotel, que tienen claro que no es ilegal como se está tratando una y otra vez de decir, únicamente quieren realizar su actividad tranquilos y que los diferentes procedimientos judiciales pendientes sigan su curso, haciendo uso todo el mundo de las herramientas que ofrece el Derecho a todas las partes en litigio dentro de un país democrático y garantista como es el nuestro. Además, indicó que desde la empresa van a defender sus intereses con los medios a su alcance y los puestos de los diferentes trabajadores que están en las instalaciones, reiterando que serán los diferentes entes los que se pronuncien y dictamen al final de los procedimientos.
El director explicó por último que la invansión del hotel por parte de los manifestantes fue muy rápida y que no tuvieron tiempo de reaccionar y echarlos de las instalaciones al suceder todo en unos escasos dos minutos.