La Cofradía de San Ginés denuncia que Mónica Álvarez y Ezequiel Navío han ejercido una "presión bestial" sobre los pescadores
El vicepatrón mayor de la cofradía de Pescadores de San Ginés, la más importante de la isla de Lanzarote, ha asegurado este martes en Cadena COPE que los marineros de Arrecife recibieron presiones por parte de la ex consejera de Pesca del Cabildo, Mónica Álvarez, y el asesor del Cabildo en el tema de las prospecciones petrolíferas para que se posicionaran en contra de los sondeos.
"La señora Mónica estuvo en la reunión que tuvimos en Arrecife, cuando vino la Comisión europea, luego nos reunió después diciéndonos que no teníamos ni idea de lo que estábamos diciendo y que no éramos nadie para opinar, y posteriormente, una vez que le contestamos y dio un paso atrás, esta presión bestial la continuó el señor Ezequiel Navío", ha revelado Olivero.
Sobre el asesor del Cabildo de Lanzarote, el vicepatrón mayor de la cofradía de Pescadores de San Ginés ha asegurado que "éste nos mandó una carta porque quería que nos fuéramos de la Federación de cofradías de la provincia de Las Palmas, y nos pidió qué dijéramos que opinábamos en la misma línea que en Mogán, con lo que nosotros estábamos en contra".
Olivero ha recordado que Ezequiel Navío les dejó claro lo que debían decir delante de la prensa y ha reconocido que ahora las cosas han cambiado dentro de las cofradías, que hay opiniones diferentes y que prefieren no opinar si no se les da toda la información.
Mónica Álvarez niega la mayor
Por su parte, la propia consejera del Cabildo aludida en estas acusaciones, Mónica Álvarez, ha desmentido en esta misma jornada "absolutamente" las acusaciones de Olivero ha asegurado que lo único que hizo el Cabildo de Lanzarote en su momento fue atender una demanda de información que pedían los propios pescadores.
Según la versión aportada por Álvarez a este diario, ante la falta de posicionamiento y la solicitud de información de varias cofradías como las de Arrecife y La Santa, se cursó invitación a las cofradías para celebrar un encuentro informativo, aprovechando un encuentro con europarlamentarios de la Comisión de Pesca celebrada ese mismo mes, en mayo del año pasado. En ningún caso, según la consejera, se les presionó a los pescadores; simplemente se les facilitó información acerca de las consecuencias que un vertido puede tener para el sector. De acuerdo a su versión, al encuentro incluso acudió un marinero de la isla de El Hierro para relatar a los pescadores de Lanzarote las nefastas consecuencias que el volcán submarino de aquella isla había provocado para la pesca, incluso siendo un hecho ocurrido de forma natural.
Los cabildos niegan las presiones
Por su parte, los cabildos de Fuerteventura y Lanzarote han negado estos días haber presionado a las cofradías de pescadores para que expresen públicamente su rechazo a las prospecciones petrolíferas que proyecta Repsol en las aguas cercanas a Canarias.
El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, afirmó que la denuncia remitida por el presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Las Palmas, Gabriel Jiménez, "deja muy mal a sus propios compañeros", porque "está acusando a los propios pescadores de venderse para defender una postura".
Cabrera tiene claro que las cofradías "siempre se han manifestado libremente", y advirtió de que "no se puede sembrar la duda sobre un colectivo que ha llevado una trayectoria impecable en la defensa independiente de los intereses del sector".
El presidente de la Corporación insular fue más allá, y acusó al propio denunciante, Gabriel Jiménez –que sí se ha mostrado públicamente a favor de los sondeos–, de actuar "bajo los dictados de un partido político [se refiere al PP] muy concreto".
En esta línea, Ezequiel Navío, asesor del Cabildo de Lanzarote, afirmó que la denuncia "carece de las más mínima credibilidad" porque "procede de una persona que ha mentido al asegurar que la Federación de Cofradías de Las Palmas apoyaba las prospecciones, cuando después, 21 de las 26 cofradías del Archipiélago mostraron su rechazo en un escrito público".
A las versiones de los cabildos se unen también las de los patronos mayores de varias islas, que han negado a su vez este mismo lunes haber sido amenazados "por institución pública alguna". De hecho, el patrón mayor de la Cofradía de Gran Tarajal, Juan Ramón Roger, fue uno de los que afirmó que los pescadores "no son marionetas de ningún partido político".