La regulación del transporte de animales y la enfermedad vírica que merma a los conejos desde hace años fueron otros asuntos abordados en el encuentro que mantuvieron con el consejero Antonio Morales

Los cazadores lanzaroteños trasladan su satisfacción al Cabildo por la unificación de la apertura de la veda en Canarias

Los cazadores lanzaroteños expresaron al consejero responsable del área en el Cabildo de Lanzarote, Antonio Morales, su satisfacción por el acuerdo adoptado por el Consejo Regional de Caza de fijar el 6 de agosto como fecha de apertura de la veda en el Archipiélago, atendiendo así a la propuesta trasladada por el Consejo Insular de Caza de Lanzarote.

Desde el Cabildo recuerdan en nota de prensa que el Consejo Regional de Caza acordó que desde la citada fecha se podrá cazar el conejo con podenco y hurón en todo el Archipiélago y desde el 10 de septiembre también con escopeta, "lo que evitará la masificación de cazadores en una determinada isla, que se hubiera producido si la apertura se hubiera hecho de forma escalonada", según expresaron en la reunión mantenida el pasado viernes con el consejero insular de Caza.

En el encuentro, Antonio Morales apeló a la caza "responsable y respetuosa con el resto de personas, el entorno agrícola y ganadero, y el Medio Ambiente, así como con lo establecido en la normativa cinegética respecto a las distancias que se deben guardar de las zonas pobladas, caminos y carreteras".

Por otra parte, el consejero resolvió algunas dudas planteadas por los cazadores acerca de cómo les afecta la normativa sobre bienestar animal en lo que se refiere al transporte de animales. En este sentido, Antonio Morales señaló que "según los servicios jurídicos del Gobierno de Canarias y Cabildo consultados, los cazadores no están obligados a tener autorización para trasladar a los perros en sus vehículos, salvo que lo hagan con fines comerciales".

Por último, los cazadores expresaron su preocupación por la merma de conejos silvestres que se lleva produciendo en la isla desde hace algunos años debido a la enfermedad denominada neumonía hemorrágica vírica, situación que el consejero se comprometió a "analizar con la atención que merece con el fin de tratar de buscarle una solución lo antes posible".