Arrecife propone al propietario del Islote de El Francés crear un gran edificio icono de la ciudad
El dueño del Islote ve con buenos ojos la oferta que el Ayuntamiento, a través del alcalde, Cándido Reguera, el concejal de Urbanismo, Pedro de Armas, y el edil de Obras, Antonio Machín, le han hecho. Ésta consiste en ceder el suelo privado para hacerlo público a cambio de compensaciones, no económicas sino más bien urbanísticas. A través de un convenio, Arrecife propone ceder el 10 por ciento de aprovechamiento municipal incluido en algunos planes parciales como el de los Betancores o el de La Bufona. La idea es que el Islote de El Francés sirva de una vez por todas para el disfrute de los ciudadanos de Arrecife y Lanzarote en general. La empresa propietaria del suelo explotará el innovador edificio que pretende ubicarse en la zona y recibirá también compensaciones urbanísticas mediante la cesión de distintas bolsas de suelo de la capital lanzaroteña.
Según sostuvo el propio Cortezo, este acuerdo, que deberá incluir al Islote de El Francés como sistema general dentro de la ordenación capitalina, podrá entrar en la actual Adaptación Básica del Plan General de Arrecife mediante una modificación puntual, o bien incorporarse al que en unos años previsiblemente será el nuevo y actualizado Plan General. El empresario grancanario recordó que el Islote está catalogado como un sistema general y que sobre los terrenos recayó en su día una sentencia señalando que el suelo era urbano.
El copropietario de La Rocar aseguró al término del encuentro que salió muy satisfecho de la reunión “porque he visto a un equipo que tiene ganas de trabajar y que no me ha pedido nada”.
Cortezo acudía a la reunión con el proyecto que hace diez años diseñó sobre el paraje del Francés un nuevo barrio para Arrecife, con una serie de infraestructuras comerciales, de cines, restauración y ocio, junto con una parte de negocios, basado en un viejo proyecto bajo el prisma de la ciudad de Miami.
"Icono para la ciudad"
Por su parte, el alcalde capitalino, Cándido Reguera, le comunicó este mismo viernes a Cortezo que no está de acuerdo con esa idea de "crear otro barrio, otra urbanización", y le instó a que encargue una nueva propuesta a un arquitecto de prestigio mundial para que haga un edificio que sea un icono para la ciudad y para toda Canarias. Para el alcalde, el nuevo proyecto deberá ser “un foco de atracción para los visitantes, dar prestigio a la ciudad y generar empleo".
Reguera hizo referencia también al 10% de compensación que piden los
propietarios de La Rocar a cambio de dejar terreno libre al Ayuntamiento
para zona de esparcimiento y ocio. En este sentido, explicó que en su
momento se verá la fórmula que se fije para compensar a la empresa, si
bien precisó que “todo lo que se haga, se hará con transparencia absoluta y dentro del Ayuntamiento”.
Desacuerdo en torno al derribo
En lo que no parecen muy de acuerdo el alcalde y Cortezo es en el derribo de las naves de La Rocar. Cándido Reguera asegura que el derribo se llevará a cabo próximamente y que le pasará la factura, que costará algo más de medio millón de euros, al actual propietario del Islote. Por su parte, Cortezo anuncia que cuando le llegue la factura pedirá al Ayuntamiento que la compense con el pago que el Ayuntamiento le debe a su propiedad por la cesión, en su día, de los viales de la zona del Islote y del Charco San Ginés. Sobre esos viales existe sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias decretando que el Ayuntamiento debe compensar a la propiedad por la cesión de dichos viales, ya que a la empresa nunca se le compensó urbanísticamente, como se acordó.