ANC considera una "fascistada colonial intolerable" el comunicado del SUP y exige que se abra una investigación sobre el policía español que empuñó su arma en Arrecife

La formación de la izquierda nacional canaria Alternativa Nacionalista Canaria en Lanzarote considera una cadena de despropósitos intolerables los hechos que se han ido produciendo desde que el pasado viernes 22 de julio una manifestación pacífica a favor del pueblo saharaui celebrada en Arrecife finalizara con un altercado en el que un policía español sacó su pistola causando asombro e inseguridad entre los asistentes.

Ante este primer hecho ANC ha mostrado mediante un comunicado su repulsa "frente a este acto de violencia e intimidación" producido en Lanzarote y considera "impermisible que la policía española actúe por las calles de nuestro país con este talante colonial, prepotente y embrutecido, sin que nadie por lo pronto pida responsabilidades ni investigue las circunstancias en que se produjo el incidente".

ANC llama a la ciudadanía canaria a que se posicione contra estos elementos enviados por la Metrópoli española a las Islas para el control férreo de sus ciudadanos y movimientos sociales, ya que cabe recordar que el agente se encontraba de incógnito y su trabajo consistía en ir fotografiando a todos los asistentes a la concentración, incluidos niños, para no se sabe qué fines.

"Desde aquel día hemos asistido a un abuso de poder por parte del aparato del Estado español, que ha fijado su inquina contra el activista de nacionalidad uruguaya José Morales Brum, quien tras denunciar el incidente con el policía español ha sido detenido, ha pasado una noche en el calabozo y puesto a disposición judicial", relata ANC.

En su escrito argumenta que "por si no era suficiente la vía judicial, la propia Policía española y el propio Estado han abierto un expediente para expulsarlo como represalia, aun tratándose de un ciudadano que reside de manera legal en Canarias desde hace más de 8 años, está plenamente integrado en nuestro país y participa activamente en diferentes foros y movimientos sociales y políticos a favor de los trabajadores que viven en las islas, pueblos sometidos como el saharaui, las comunidades migrantes y también en la defensa de la identidad nacional canaria y los derechos nacionales de este Archipiélago". Por ello, también por su condición de independentista, ANC considera que José Morales está siendo víctima de una "mezquina persecución policial y política por parte de elemento del aparato del Estado".

Comunicado del SUP

Para el partido de izquierda, el último "despropósito" ha llegado con la publicación de un comunicado por parte del Sindicato Unificado de Policía, SUP, un texto que "evidencia hasta qué punto la desfasada ideología fascista esté latente entre determinados elementos enviados por el Estado español a las Islas Canarias".

En el texto no se recatan al aplaudir la expulsión de José Morales Brum, a pesar de ser la propia policía la que inició el expediente que está aun en trámite. "Por ello debemos suponer que desde dentro del cuerpo se está presionando para que la resolución final sea en contra del activista Morales y a favor de quienes han iniciado su persecución", alegan.

Además, creen que la nota utiliza "argumentos antidemocráticos, ultrareaccionarios, xenófobos y totalitarios" para exigir la expulsión de José Morales aprovechando su situación de extranjero, a pesar de que por su integración, compromiso y lucha a favor de Canarias es sin duda un compatriota más de este país. De este modo, recuerdan que "se le acusa a Morales de ser bien conocido por la policía en Arrecife por ser habitual en todo tipo de concentraciones y manifestaciones y por pretender liderar protestas y algarabías, al tiempo que se le recrimina que acuda a medios de comunicación, para justificar el procedimiento de expulsión iniciado".

A juicio de ANC, ningún país democrático toleraría que los representantes de unos funcionarios públicos dotados de autoridad esgrimiesen argumentos de este tipo, que niegan a los ciudadanos derechos democráticos como la capacidad para manifestarse o expresarse. Todos los hechos relatados, desde el instante en que el agente sacó su pistola, pasan en Canarias porque es Canarias, y especialmente en una isla no capitalina como Lanzarote porque tiene menor repercusión. Por lo tanto, cabe pensar que esta vía libre a argumentos típicos de regímenes dictatoriales evidencia los déficits democráticos del sistema colonial que España aplica en Canarias.

"Con una prepotencia igualmente impropia, el SUP anima a Morales a irse por no querer ?integrarse en España?, diciéndole que ?puede irse cuando quiera, que nosotros no se lo vamos a impedir?. Desde ANC consideramos que este ataque xenófobo hacia un ciudadano de un país hermanado con Canarias como Uruguay no tiene lugar en esta tierra. Nos negamos a que representantes de agentes españoles exporten a Canarias su bajeza racista y su intento de desestabilizar el entendimiento que por lo general se da en Canarias entre diferentes nacionalidades".

Por todo ello, desde la formación de la izquierda nacional canaria ANC se exige:

- Que la Delegación del Gobierno abra una investigación contra el policía español que se supuestamente se dedicó a amedrentar a ciudadanos manifestados con su pistola el pasado viernes en Arrecife.

- Que se cese en la persecución contra el activista José Morales, se archive su expediente de expulsión, se le resarza, y se investigue si las presiones del SUP son generalizadas entre miembros y mandos de la Policía española destinada en Canarias, por lo que podrían haber incurrido en un flagrante abuso de poder contra el activista.

- Medidas disciplinares y todo el rechazo social hacia quienes, en supuesta representación de los policías, emiten un mensaje xenófobo, chulesco, antidemocrático y fascistoide, manchando el término ?sindicato?, ligado históricamente a la loable defensa de los más débiles y no de las ideas más retrógradas y peligrosas.

Igualmente invitamos al pueblo canario a que muestre su solidaridad ante esta injusticia y a que reaccionen pacíficamente contra los abusos de poder que el colonialismo español efectúa en las islas, ya que son otros, y no los luchadores por Canarias y por los derechos de sus clases populares, quienes nunca podrán integrarse en nuestro país, ya que vienen a él sin deseo de compartir, sino de imponerse como el elemento colonial que son.