A ver quién le pone el cascabel al gato
1.- Vale, ya se cargaron al tal Pedro Sánchez, que sigue de diputado porque entre otras cosas no tiene dónde ir. Pero, ¿y ahora, quién le pone el cascabel al gato? Quedan 28 días para que haya o no Gobierno, pero el PSOE, o parte de él, se tiene que abstener. Y Rajoy no va a aceptar sólo la abstención del PSOE, sino que le aprueben los presupuestos, quizá un Gobierno compartido o quizá respaldo en algunas leyes. Porque, si no, elecciones; y en las elecciones habrá un PSOE sin candidato definido. Porque no esperen ustedes un líder y un congreso inmediatos. La Gestora estará al menos un año en funciones en el PSOE, pongan ustedes el cuño a eso. Un líder no se fabrica en un mes, miren cómo han salido los dos últimos, Zapatero y Sánchez. O sea, que el PSOE no sólo se tendrá que abstener, sino que tendrá que apoyar un Gobierno de Rajoy con el respaldo de Ciudadanos. Porque si hay elecciones, el PSOE desaparece y Podemos asumirá la representación de la izquierda, aunque sea la izquierda ramplona y peluda. A todo esto nos ha conducido Sánchez y a todo esto ha abocado a su partido. Y aun tiene la cara de seguir ocupando un escaño en el Congreso, porque son 3.000 euritos al mes y a nadie le amarga un dulce. Sólo por eso, porque Sánchez no tiene oficio ni beneficio, ni tiene a dónde ir. Esto es lo que hay.
2.- ¿Pero cómo va a vender el PSOE su abstención? De momento, Mariano Rajoy ha hablado con Javier Fernández, el presidente de la Gestora. Luego empieza a verse un acercamiento, que ya era hora. Con Pedro Sánchez, que se creyó reina por un día, era imposible. Ahora manda gente mucho más sensata en el PSOE; los de Sánchez han huido, pero quieren reagruparse para volver a la carga. Por eso cuanto más tarde sea el congreso, mucho mejor para el partido. Tienen que reflexionar, no andar con prisas ni permitir que les obnubile el odio contagioso a Rajoy que Pedro Sánchez infundió en sus filas. Odio absurdo, porque se trataba del futuro de España y del futuro del partido. ¿No se daba cuenta Sánchez, a menos que fuera un agente de Podemos, de que este país no podía ser gobernado por una pandilla de irreverentes, de antisistema y de payasos de feria, a los que les da igual acatar que no acatar la Constitución y que tampoco tenían pudor en aliarse con los independentistas para dividir España?
3.- Vamos a ver quién le pone el cascabel al gato, si se abstienen 14 o se abstienen todos los diputados (menos Sánchez) para que Rajoy sea presidente; y vamos a ver si Rajoy acepta las condiciones del PSOE. Porque las cosas han cambiado y quien tiene la sartén por el mango es el PP, a cuyo candidato las encuestas le dan ganador de unas hipotéticas elecciones en diciembre con 150 diputados, como mínimo. Miren el otro favorcito que le hizo Sánchez a su partido, con su cerrazón atroz: poner en el Cielo al PP, a pesar de sus errores, de la corrupción y de todo lo que le han tirado los propios sociatas a la cara.