Carta a ZP

Por Andrés Chaves

1.- Señor Zapatero, olé a su política social. Usted deja entrar delincuentes del Este, atraídos porque en España es barata la pena por violar las leyes, y está haciendo que las ciudades españolas -sobre todo Madrid- vivan bajo el imperio del robo generalizado y cotidiano. Viva su política social. Usted es el capitán del barco del paro, que naufraga mes a mes con estadísticas sobrecogedoras. Mientras usted ejercía su risa de conejo, el Nobel Krugman le hablaba de un futuro aterrador para su país. Viva, repito, su política social. Mientras usted ocultaba la crisis a los ciudadanos, y les mentía con su silencio y sus fintas de futbolista correlón, Europa se preparaba para afrontarla. Usted y sus ministros y sus parlamentarios y sus funcionarios sectarios cobran sustanciosos sueldos mensuales, que no tienen tiempo de gastar entre alianzas de civilizaciones y gaitas; y hasta usted, señor ZP, se atreve a aconsejar a otros países de la Unión Europea sobre política de empleo, cuando ha provocado un verdadero cataclismo laboral en España, valiéndose de unos sindicatos untados e indignos. Usted, señor Zapatero, ha perdido todo el crédito y debe tener la vergüenza suficiente para marcharse.

2.- Mientras su Gobierno y su policía y algunos determinados jueces de la cuerda del poder persiguen a políticos de la oposición, su vicepresidenta caía en un imperdonable desliz de tipo electoral, votando donde no tenía que votar. Acusan ustedes a la derecha de retrógrada, pero ¿dónde coño está su progresismo, en qué lo basan, a dónde nos ha llevado, qué país nos va a dejar usted, señor Zapatero? Han reducido su política a decir que ustedes son los buenos y la derecha la mala, como en los tiempos de la oprobiosa. ¿Por qué no buscan otro modelo?

3.- Han convertido España en un foro de gente idiotizada y atenazada por la crisis económica, abrumada por el horizonte brumoso, destrozada por la contradicción y el desvarío de su gente pública, por la discusión, por la nimiedad y por la ausencia de recursos para saltar el muro del desastre económico. Qué pánico me da usted, señor Zapatero, con esa apariencia patética de encantador de serpientes, cansado, torpe en las respuestas a las preguntas parlamentarias, falso insuflador de optimismo, desastre de presidente, que va a pasar a la historia por haber hundido a este país hasta los infiernos de la economía. ¿Lo suple todo con su política social? Por cierto, ¿qué política social?

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