El Carnaval, más pesado que Puigdemont

1.- El Carnaval de Tenerife es más pesado todavía –que ya es decir—que Puigdemont. Este es un país de modas; es decir, Puigdemont va a pasar a la historia pronto, en cuanto Cataluña se normalice. Y, además, Rajoy está por lo positivo. Vista su posición en el partido –mala— está decidido a prorrogar los presupuestos y a llegar al final del mandato, gobernando por decreto, y a extender el artículo 155 de la Constitución en Cataluña hasta donde sea preciso, incluída la defensa del castellano en las escuelas. Rajoy, que se ha ganado a pulso el título de Duque en cuanto termine su mandato, ingresará entonces en el Consejo de Estado y cederá el cetro a otro, quizá a Rivera, quizá a alguno o alguna del PP. ¿Quién? No hay líder definido que no sea ni demasiado joven ni demasiado viejo. La política es muy golosa, pero yo estoy seguro de una cosa: ni Pedro Sánchez ni el Coletas serán presidentes del Gobierno. Eso lo tengo más claro que el agua, a no ser que se produzca un cataclismo. Hace bien el PP en combatir a los veletas de Ciudadanos, que un día dicen una cosa y otros días dicen otra, dependiendo de la temperatura de sus culos cuando levantan el edredón. Pero yo, en realidad, retirado como estoy del mundanal ruido, lo que quiero es que se acabe el Carnaval, que para mí es una fiesta sin sentido en la que la gente se intenta divertir por obligación. Yo me divierto, si puedo, fuera del Carnaval, en los tiempos de los calendarios sin fiestas. Es mucho más elegante.

2.- En cuanto a lo de Cataluña, va para largo si Ciudadanos, que dice que ganó las elecciones, no da un paso al frente. Yo no he visto episodio como éste: ganas y no tomas la iniciativa, sino que te mantienes en una espera eterna. No lo entiendo. A esto lo llamo yo cobardía. Inés Arrimadas, que me cae bien y que es elegante –menos cuando e pone el traje a rayas— tiene que tomar la iniciativa y buscar apoyos. Que no los encuentra, pues a volver a empezar. Y, si no, nuevas elecciones y a revolucionar Tabarnia para que Boadella se presente y a lo mejor gane en su territorio. ¿No hay tres millones de votos no independentistas en Cataluña? Pues, ¡a por ellos!, desde donde sea. Quien lo caga todo es el PSOE, que se muestra en contra del español como idioma a elegir en los colegios. Y más lo cagará ahora, cuando van a gobernar las bases. Por esas bases, en parte, nació el Frente Popular, que dio lugar a la guerra civil. Los españoles nunca aprenden de la historia, porque siempre están haciendo historia nueva, convencidos y mesiánicos. Pedro Sánchez es una desgracia nacional, un mal líder y un tipo mal encarado. Ha tenido mala suerte el PSOE; primero, Zapatero; ahora, Sánchez. Los dos cortados por la misma tijera: la de la mediocridad. Zapatero, no contento con armar la que armó en España la arma ahora en Venezuela. Que Dios coja confesados a los venezolanos.

3.- Por delante de mi balcón está pasando el coso portuense, que se hace de retales del propio Puerto, Los Realejos, Icod, La Orotava y algo de Santa Cruz. Mucha gente, mucho ruido y poco arte. Como el Carnaval de Tenerife, en general. No veo a los políticos, que estarán refugiados en sus balcones o en los de los amigos (en el mío, ni de coña). Pero sí bullicio y poca música. El tambor ha fagocitado a la música porque una batucada hortera es fácil de formar. Mucho más que una banda. Que ustedes lo pasen bien. Mandaré unas fotos panorámicas del cortejo, obtenidas con el móvil desde mi balcón, a pesar de la oscuridad reinante. No hay ciudad más oscura que el Puerto de la Cruz. Ya he dicho que el Puerto tiene más pasos de peatones que Nueva York. Me lo ratifica un taxista, porque yo aquí, ante la imposibilidad de obtener un aparcamiento, me muevo en taxi. Y eso.

Es una publicación de El Diario de Tenerife.com