Canarión tenía que ser

Por Andrés Chaves

1.- Le ocurrió a un señor de Tenerife, que alquiló un taxi en Las Palmas para dar la vuelta a la isla. Para vacilarse del taxista se hizo pasar por andaluz. El taxista se ofreció como guía y le fue dando explicaciones detalladas de todos los lugares del territorio. Para el chófer aquello era todo lo mejor, y no lo de Tenerife. Creía firmemente que el pasajero venía de Andalucía y empezó a meterle goles. Y el chicharrero, callado. Cuando llegaron a Tejeda, después de subir por una carretera infame, el taxista se entusiasmó; y en un momento dado de la conversación, dijo al cliente: "Y, mire usted, no le subo al Teide porque hoy han cortado la carretera". A lo que el pasajero tinerfeño, sentado en el asiento de atrás, le contestó, muy serio, ya cambiando el acento: "Mire, jodido canarión, yo soy chicharrero y usted se va a tomar por el culo con sus mentiras". Dicho esto, se bajó del taxi, le pagó al mentiroso y tomó otro taxi para el aeropuerto, en la misma localidad de Tejeda. Me lo cuentan con todas las garantías de veracidad. Y es que hay gente muy osada. El genial Opelio Rodríguez Peña , a quien Dios tenga en su gloria, con su terno blanco, escuchaba una conferencia en el Casino de los Caballeros de Santa Cruz, pronunciada por un godo abominable que no decía sino disparates. Cuando aquel lebranche dio determinados datos de Canarias, que no tenían ni pies ni cabeza, Opelio se puso en pie, hizo al conferenciante una seña con la mano y cuando el godo paró y le miró, gritó: "¡Atrevido!". Se acabó la conferencia. Opelio había nacido en Las Palmas, pero era un tinerfeño convencido y cabal y detestaba la envidia canariona. Era muy crítico con sus paisanos.

2.- Yo me acuerdo de cuando los canariones nos copiaban las fotos de los folletos turísticos. Se apropiaban del Teide. Lo copian todo. No tienen reparo. Copian los Carnavales, copian los Indianos. Los palmeros están que trinan porque se han llevado su espectáculo a Las Palmas. Como tienen poca imaginación -a no ser esa mariconada de las drags queen- se aprovechan del trabajo de los demás. Y se quedan tan frescos. Ahora que estamos en Carnaval es bueno dar un repaso a estos copiones. Hasta quisieron imitar a Los Sabandeños creando la agrupación Los Gofiones, que en honor a la verdad, toca y canta muy bien, mas es una réplica de nuestros Sabandeños. Coño, es que no perdonan una. Y no es que a mí me guste mucho entrar en el pleito entre Tenerife y Las Palmas, pero se pasan de listos. Y eso tampoco.

3.- Defender a Tenerife, que es la isla de uno, no está de moda. Cuando criticamos algo de Las Palmas en este periódico, algunos ponen el grito en el cielo y nos llaman de todo. Ya ni siquiera las murgas le dan estopa a Las Palmas, cuando antañazo era el deporte de moda en los Carnavales. Ahora las murgas, casi todas ellas muy malas, menos la Ni Fu-Ni Fa y alguna otra, se dedican a hablar de sí mismas, de lo que les cuesta a sus miembros ir a los ensayos y zarandajas, del sacrificio de sus familias y otras estupideces, en vez de criticar al elemento canarión, por otra parte muy peligroso. La tienen tomada con los políticos, cuando los políticos no interesan ahora a nadie. La gente normal pasa de ellos. ¿O ya no se acuerdan de lo que se inventaron en el pasado en Las Palmas, cuando dijeron que en la arena del Sahara que trajeron para Las Teresitas podían habitar alacranes? Para las murgas, aquello fue una fiesta. Ellos lo dijeron con muy mala leche: para espantarnos el turismo los muy cabrones. En fin, que el pleito, cantera murguera inagotable, se ha secado y ahora estos machangos sólo hablan de sí mismos. Sí, machangos. ¿Por qué los murgueros me pueden llamar a mí machango y yo a ellos no? En fin, que no sigo para no calentarme. (Por cierto, una murga, y este sí que es un buen detalle, tenía una foto mía pegada al bombo del grupo; cada vez que el tipo daba un leñazo al tambor me pegaba a mí en los hocicos). La verdad que esto sí que es humor. Un diez para esa murga y un cero para el resto.

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