Inés Rojas de León, consejera de Bienestar Social, Vivienda, Deportes y Cultura del Gobierno de Canarias

"Hay un tiempo en la vida y yo habría continuado en política de haber estado bien con mi partido, pero CC no lo ha considerado y ya preparo mi incorporación al colegio de San Bartolomé"

"En estos momentos, sinceramente, yo he pasado página. A veces las críticas de tus propios compañeros duelen muchísimos pues no solo no son justas, sino ni quiera tampoco necesarias ni resuelven nada. Pero cada persona actúa de una determinada manera ante determinadas cosas"

- "A una se le rompe el alma con los desahucios, con viviendas casi sin estrenar, pero ahora nuestra Ley de Vivienda ha sido suspendida cautelarmente por cinco meses por petición de Mariano Rajoy"

- "En este tiempo esperamos culminar los convenios con los cabildos en Dependencia. Prácticamente en este 2015 se acaba la lista de espera de Dependencia y la isla de Lanzarote, tengo que decirlo, aquí se queda bastante planchada, con nuevas infraestructuras y centros socio-sanitarios"

A pesar de lo mucho que se ha escrito y especulado en las últimas semanas sobre el futuro inminente de Inés Rojas, la actual consejera de Bienestar Social, Vivienda, Deportes y Cultura en el Gobierno de Canarias, ha confirmado este lunes en la entrevista concedida al programa 'A buena hora' de Crónicas Radio-Cope Lanzarote que deja la actividad política y anuncia que está tramitando su vuelta como profesional al ámbito educativo.

- Consejera, lo cierto es que le han hecho ofertas serias como la de Nueva Canarias. ¿Qué ha pasado al final con esa propuesta?

Lo que ha pasado es sencillamente, y quiero expresarlo en su justa medida y agradecerlo, es que Nueva Canarias no ha venido a robar nada. Sencillamente comprobó que Coalición Canaria no contaba conmigo para estas elecciones y consideró que estaba disponible por ese valor que parece que yo pudiera tener. Ellos me ofrecían la oportunidad de continuar a través de su formación política.

- Pero le ofrecieron liderar la lista del Cabildo, la del Parlamento. ¿En algún momento llegó a pensarse esa posibilidad?

Bueno, tengo que decir que desde un primer momento yo tenía claras algunas cosas, aunque ellos me dieron algunos días para pensarlo, pero no es fácil dejar tu formación política, aunque sea con la misma ideología, pues no resulta nunca fácil. Está claro que hasta el último momento, sobre todo algunas personas, no se rindieron, pero tomé la decisión de que, efectivamente, hay un tiempo en la vida para la política. A mí sin duda también me hubiera gustado, y habría continuado de haber estado bien en mi partido y si este lo hubiera considerado. No ha sido así, y por lo tanto la decisión que he tomado ha sido acabar la legislatura, incorporarme al colegio y es lo que estoy haciendo en estos momentos, preparando mi vuelta al colegio de San Bartolomé, que por cierto me hace bastante ilusión. Ya he estado por allí hablando con algunas compañeras y la exdirectora y demás, y acabar los retos que quedan todavía, un par de cosas por culminar en el Gobierno, y sin más. Hay etapas en la vida que se cierran y otras que se abren, y esto es lo que ha pasado en estos momentos.

- Pero aunque en el partido no hayan contado con usted para esas listas electorales, ¿usted quiere seguir estando en Coalición Canaria?

Sí, vamos a ver. Yo estoy en Coalición Canaria, está claro. Mientras no me dé de baja como milita, yo estoy de militante, y no tengo pensado darme de baja, ni muchísimo menos. Lo que ha sucedido en estos momentos es que dejo la política activa y lo de ir en listas electorales, como sabe la gente. No voy en ninguna lista electoral de Coalición Canaria, porque no lo han considerado así y, por lo tanto, me voy al colegio. Es una etapa en la que he hecho ya hasta un balance importantísimo de todo lo que ha significado mi vida política. Tomar esas decisiones no resulta fácil. No en vano, empecé como concejal en en Teguise, en Tinajo, fui consejera del Cabido, presidenta, diputada, consejera del Gobierno durante ocho años, algo absolutamente histórico en una época durísima como la que nos ha tocado vivir. Pero también hago un balance muy positivo porque con el Gobierno de Paulino Rivero, en estos ocho años se ha dado la etapa de mayor inversión en Lanzarote, en la época de mayor crisis de la democracia. Por eso me han venido también a la cabeza muchos compañeros con los que hemos estado al pie del cañón, junto con las instituciones de Lanzarote, como Mario Pérez, Rota Hernández, Pedro Calero y los parlamentarios Juan Pedro Hernández, Isaac Castellano, David de la Hoz y Manuel Fajardo Palarea. Somos los que hemos estado apoyando al Gobierno, así que aprovecho la oportunidad para darle las gracias a la gente de Lanzarote y La Graciosa que siempre me apoyó. La verdad es que siempre me sentí muy muy respaldada. Esperé siempre estar a la altura de lo que Lanzarote había puesto en mis manos, y yo espero que con todo este bagaje político y todas las obras que dejamos hechas en Lanzarote les haya devuelto ese pequeño granito de arena desde la política.

- Inés, hay un balance positivo pero también no exento de muchas críticas. Le ha tocado bailar con la más fea y encima en la época más crítica económicamente.

Sí, y no solo por eso, también por la situación de vulnerabilidad y pobreza por la que sigue pasando la gente. A nadie le gusta un plato como éste y quizás otro lo habría dejado, habría renunciado o habría querido algo más suculento, de mayor venta política. A mí me ha tocado esto. Paulino Rivero puso esta tarea en mis manos y yo lo he hecho lo mejor que he podido. Hemos trabajado a piñón todos junto, hemos modificado leyes, .. Está claro que todo eso no podía estar exento de críticas, especialmente de la oposición. Duelen más las críticas de los tuyos, que tendrían que arrimar el hombro ante tanta carencia de medios para llegar a todo lo que queríamos. El Gobierno siempre fue subiendo los medios en la medida en que fue posible, pero sin duda se necesitaba mucho más. Pero no se necesitaba más esfuerzo pues éste ha sido al máximo por parte de todo el equipo, sin ninguna duda.

- Consejera, también habrá habido errores en este tiempo. ¿De qué se arrepiente políticamente en esta etapa?

Lo que siento es no haber podido estar en el Gobierno en una etapa de más bonanza económica. Sin embargo, por el contrario, he tenido la opción de estar en un Gobierno del que desde Lanzarote siempre nos quejábamos, y muchas veces con gran razón, porque siempre estaban sentados en el Consejo de Gobierno consejeros de otras islas. No ha habido una consejera o consejero de Lanzarote durante tanto tiempo, y en una época de crisis en el Gobierno de Canarias. Cuando estuvo Manuel Fajardo Feo, Lanzarote lo notó turísticamente, y ahora se ha notado en todos los aspectos: en el territorio, en las inversiones de carreteras. Tengo que recordar que yo me estrenaba en el año 2007 con la carretera de Tahíche. En aquel momento el consejero de Obras Públicas traía al tercer Consejo de Gobierno la retirada de los 20 millones de euros para esa carretera, para otra isla pues decían que Lanzarote no lo quería. Ahí ya me di cuenta de la importancia tan grande que tenía el que yo estuviera allí sentada. Le pedí al presidente que se quedara el asunto sobre la mesa porque Lanzarote no podía perder esa partida. Ahora se termina la obra de la Circunvalación de Arrecife, algo que también ha contado con muchas personas que hemos estado ahí empujando. Esa carretera se ha hecho cuando la partida del Gobierno español no daba para nada en el conjunto de carreteras de toda Canarias. Cada vez que pase por la carretera, me acordaré de que yo también pude mi granito de arena. Turísticamente, creo que hemos puesto también el listón de Lanzarote bien alto, con Rita Hernández y ese decreto de última hora que va a permitir también destinar viviendas al uso turístico. Creo que con Mario Pérez, Pedro Calero y todo el equipo esta legislatura no ha podido ser más fructífera. En mi caso, con la doble condición como parlamentaria y consejera, creo que eran muchas las posibilididades de mejora para Lanzarote, y creo que las hemos aprovechado, igual que ha puesto de su parte Manuel Fajardo Palarea. Creo que hay que ser justos en la vida. Con la inversión también de los 40 millones para el puerto de Playa Blanca, el concurso en estos momentos de la rehabilitación de viviendas en Arrecife y todos los centros socio-sanitarios, es un bagaje importante. Con eso quiero brindarle a Lanzarote mi pequeño homenaje y agradecerle el respaldo que siempre me ha dado. Por cierto, creo que soy de las pocas personas que en el Parlamento de Canarias se sube y habla de ocho, y no siete islas. La política no la dejaré en la vida. Si no estoy en cargos públicos, trabaré sin duda para arrimar el hombro y que las cosas sean mejor, porque eso lo llevo yo en las venas.

Consejera, antes comentaba usted que ha recibido críticas de algunos compañeros. ¿Le ha dolido alguna en particular?

En estos momentos, sinceramente, yo he pasado página. Tengo esa suerte. A veces, duelen muchísimos pues no solo no son justas, sino ni quiera tampoco necesarias ni resuelven nada. Pero cada persona actúa de una determinada manera ante determinadas cosas. Se dieron dos elementos muy fuertes ante las que, depende de cómo seamos, reaccionaremos de distinta forma: unas primarias inusuales, extrañas, dentro de Coalición Canaria, para elegir al candidato a la Presidencia del Gobierno, entre Paulino Rivero y Fernando Clavijo. Eso llevó a que el Grupo Parlamentario estuviera con muchísima crispación. Y la otra, la situación económica y social que nos está tocando vivir. Fueron elementos que yo pongo como disculpas de aquellos compañeros que tanto daño me hicieron en aquel momento. Que sepan que de verdad yo he pasado página.

- Pero también dicen en Coalición Canaria que contarían con usted en caso de tocar Gobierno.

Yo no estoy en política por los cargos, de verdad. No me seduce para nada en estos momentos. Yo no estoy en las listas de Coalición Canaria. Sí sigo estando en Coalición Canaria pero en estos momentos lo que haré será terminar mi trabajo en el Gobierno e incorporarme a mi colegio, para ir preparando toda la documentación desde que se acabe la legislatura.

- ¿Y qué queda por concluir de aquí a junio en el Gobierno canario desde sus áreas?

Sí, sí que queda. Nuestro mayor esfuerzo está centrado ahora mismo en Vivienda, ya que el Gobierno de España nos ha recurrido la Ley de Vivienda ante el Constitucional. Supone que las expectativas que teníamos para que todas las viviendas que tenían las entidades financieras y las íbamos a poner a disposición de la gente a precios asequibles, va a tener que hacerse de forma más ralentizada. El Constitucional nos ha mandado y publicado de oficio que nos suspende cautelarmente la Ley, a petición de Mariano Rajoy. Así nos lo ponen textualmente en el escrito que nos mandan. Es una grandísima pena que el Estado alegue que en Canarias no tenemos competencia para hacer esto, pero que el Estado no haya nada al respecto. El presidente español debería aplaudir a Canarias por no bajar los brazos. En Canarias tenemos unas 100.000 viviendas vacías, construidas y en manos de bancos. Tenemos unas 22.000 personas en Canarias solicitando una vivienda. Son personas con algunos ingresos pero que no pueden pagar los alquileres de estos momentos en el mercado. Con esta Ley íbamos a encontrar estas viviendas y los bancos iban a ponerlas a disposición de estas personas. Hemos cerrado un acuerdo con Bankia para alquilar a través de los ayuntamientos unas 18 viviendas. Ni los propietarios pueden dejar las viviendas sin sobrar ni los inquilinos hacerles frente a esos alquileres. Ésta es nuestra lucha y espero poder dejarla resuelta. Son viviendas que están ahí, pero vacías. Se nos rompe el alma, sabiendo que hay tantísimas viviendas casi sin estrenar, mientras la gente sigue siendo desahuciada. Y ahora nuestra Ley de Vivienda suspendida cautelarmente por cinco meses. Espero que en estos dos meses trabajemos ahí y seguiremos culminando los convenios con los cabildos en Dependencia. Prácticamente en este 2015 se acaba la lista de espera de Dependencia y la isla de Lanzarote, tengo que decirlo, aquí se queda bastante planchada, gracias también al Cabildo de Lanzarote y en algunos casos, con una parte del Estado. Creo que dejamos Lanzarote planchada con nuevos centros socio-sanitarios e infraestructuras, como el Centro de Atención Temprana, la residencia de Alzheimer, la residencia de Salud Mental, la de la discapacidad de Tahíche, la residencia de Haría, que la hemos hecho pública al cien por cien, y parte de la de Tías. Creo que se ha hecho un gran trabajo para Lanzarote y con esa satisfacción me voy, pensando que he vivido la etapa más dura pero con la sensación también de haberla trabajado con el mayor esfuerzo y los recursos que se tenían.