José Miguel Pérez, presidente del Cabildo de Gran Canaria y secretario general del PSC-PSOE

“Para decidir la ejecutiva regional siempre suele haber un interlocutor inicial y principal por la Isla y a partir de ahí, hay otras muchas claves que prefiero mantener en la reserva del partido”

“Haber actuado durante mucho tiempo sembrando la duda legal sobre cualquier procedimiento genera una incertidumbre en la actividad económica que no es sana”

El presidente del Cabildo de Gran Canaria y secretario general del Partido Socialista Canario, José Miguel Pérez, participó este jueves en Crónicas Radio para hablar de cuestiones como la formación de la Ejecutiva regional de su partido, de la participación de los lanzaroteños en ella y de los diversos asuntos de los que se tiene que ir ocupando una vez llegado al cargo. Manifestó abiertamente su agrado ante un cambio del sistema electoral canario y aseguró también con rotundidad que no será doble candidato a la presidencia del gobierno canario y del Cabildo de Gran Canaria.

“Jerónimo Saavedra como Juan Fernando López Aguilar siempre tendrán en mí el afecto y el respeto y yo espero tener de ellos el consejo y la consulta que siempre será buena y bien recibida”

“Si uno es candidato a la presidencia del Cabildo no debería serlo a la presidencia del gobierno autónomo y viceversa y yo seré fiel a mis convicciones”

“Las islas periféricas, que no menores, tienen más representación que nunca en la historia de la ejecutiva regional del partido”

- ¿Qué mensaje le gustaría trasladar a la gente de Lanzarote sobre el futuro del Partido Socialista?

- El mismo que he venido comentando a lo largo de estas jornadas y el mismo que pudimos exponer en el propio congreso. Lo primero es que ha habido una etapa que creo que ha sido un ejemplo de coherencia y sobre todo un ejemplo de cómo hay que hacer las cosas democráticamente. Eso es algo muy importante y no sólo para mí sino también para los otros dos candidatos. Hemos querido cuidar mucho el procedimiento, garantizando que cada persona del partido debatiera, analizara, explicara, criticara y en definitiva, participara y en función de todo eso votara con absoluta libertad. Para nosotros esto era importante en primer lugar porque queremos practicar en nosotros mismos lo que queremos para toda la sociedad, mejorar la calidad de la democracia y segundo, porque sabíamos que para que saliera reforzada la nueva dirección del partido en un congreso de este tipo, como es un congreso extraordinario, debía ser un proceso con estos ingredientes y estas características. Ese es el primer dato que extraemos todos como conclusión. Ha ido muy bien la práctica interna de la experiencia democrática.

- En Canarias no es fácil conformar unas listas equilibradas en ninguna formación política. Se habla de su nueva Ejecutiva y se critica el peso específico de cada una de las islas. ¿Cómo se ha confeccionado esa Ejecutiva?

- Hay algunas características que saltan a la vista sólo con hacer números. Es la dirección que ha aprobado el congreso del partido con un porcentaje muy suficiente y rotundo. En cuanto a la composición interna desde el punto de vista del territorio, hay dos ingredientes que hay que tener en cuenta. Las islas periféricas, que no menores, tienen más representación que nunca en la historia de la ejecutiva regional del partido, más representación porcentual y en cifras absolutas que nunca. En cuanto a Tenerife, es la isla que más representantes tiene.

- En el caso de Lanzarote, ha habido cierta sorpresa por dos de las personas que se han elegido para esa Ejecutiva, Manuel Fajardo Palarea y Manuela Armas y no tanto por José Domingo Morera. Esto es así porque ha habido cargos destacados como el alcalde de Tías o el primer teniente de alcalde de San Bartolomé que ofrecieron su apoyo sin ningún tipo de problema a su candidatura y no se les ve en esta Ejecutiva y sin embargo sí están otros que no lo hicieron. ¿Por qué se eligió a estas personas?

- Las personas se van decidiendo en función de un montón de variables que se corresponden siempre con un procedimiento cuyas claves quedarán ahí, en el interior del partido. En segundo lugar, cita a dos personas especialmente queridas en Lanzarote, en el partido y por mí, que son el alcalde de Tías y el de San Bartolomé, que son dos personas que tienen la voz y la presencia institucional del partido en alto nivel. No desmerece esa consideración el hecho de estar o no en una ejecutiva regional. Si tuviésemos que colocar en una ejecutiva regional a todas las personas que por méritos propios podrían estar ahí, en vez de una ejecutiva con el número de personas que tenemos, tendríamos una con centenares de personas.

- ¿Es cierto que a los delegados de Lanzarote se les comunicó que la elección de Manuela Armas y Manuel Fajardo era una decisión del secretario general y que ellos sólo podían elegir a otro miembro más, que resultó ser José Domingo Morera?

- Eso forma parte en lo que está en los alrededores de algo que a mí en política me gusta muy poco, que es entrar en debates que tienen mucho de rumor y que en muchas ocasiones tienen muy poco fundamento, al igual que estar haciendo cálculos sobre si tal persona votó a favor de este o del otro candidato. Yo le indico que la decisión de la votación fue secreta y es absolutamente imposible que eso sucediera. Cuando estuve en Lanzarote, ya le dije a Manuela Armas que me gustaría contar con ella. La conozco porque hemos sido colegas políticos como presidentes de cabildos y sé de su buen hacer y tenía claro que si yo era el secretario general, Manuela Armas iba a estar, si ella quería, trabajando ahí. La composición de la Ejecutiva tiene muchos vericuetos. Lógicamente, hay una etapa de consulta inicial del nuevo secretario general con todos y cada uno de los responsables insulares, que es lo primero que hacemos y que viene siendo ya tradicional. Siempre suele haber un interlocutor inicial y principal por la Isla y a partir de ahí, hay otras muchas claves que prefiero mantener en la reserva del partido porque creo que en el fondo es lo que hay y a nadie le interesa y que no tienen más consecuencias.

- Hablando de nuevo de Lanzarote, el secretario general de la Isla sacó una nota de prensa para decir que con la decisión que usted había tomado se avalaba de alguna forma la política de desarrollo sostenible practicada en la Isla, sobre el tema del derribo de los hoteles. ¿Ha seguido las polémicas que ha habido en torno a este asunto y es cierto que avala todo lo que se ha hecho en Lanzarote en este sentido?

- Yo creo que el Partido Socialista y el gobierno del Cabildo en manos del Partido Socialista tuvo un trabajo que no es sencillo. Se trata de establecer lo que en forma de desaguisado se ha ido montando y acumulando a lo largo de una serie de años y no por el Partido Socialista sino porque hay unas normas que están más allá del Partido Socialista. Hay unas leyes y de lo que se trata es de actuar conforme a ellas, incluso por la seguridad de la propia actividad económica. El haber actuado durante mucho tiempo sembrando la duda legal sobre cualquier procedimiento genera luego una incertidumbre en la actividad económica que no es sana y no es buena. Yo tengo un buen concepto de Manuela Armas como presidenta del Cabildo y me consta que trabajó siempre por otorgar legalidad, seguridad y hacer combinable algo que es importante, y en Lanzarote han tenido larga experiencia de ello, el establecer un modelo propio de una isla que sirva de ejemplo para las demás en cuanto a la preservación del territorio y en cuanto al modelo de actuación en ese tema que ha sido buenísimo en el plano turístico con evitar que de repente se nos desmadre todo y por tanto, yo creo que esa actuación no se puede perder porque Lanzarote siempre se ha distinguido por esa forma de tratar y de cuidar la Isla.

- Ahora tiene en Lanzarote dos papas calientes por resolver, el cese de Miguel Ángel Leal como secretario general de Arrecife y la impugnación del último congreso insular. ¿Tiene previsto dar alguna explicación al respecto?

- A pesar de que ya han pasado unos días, todavía no hemos podido ver los expedientes que se tienen que sustanciar y que están pendientes. Yo ignoro en qué momento de tramitación están. Esta semana ha sido complicada porque independientemente de lo reciente que está el congreso, hemos tenido unas citas institucionales muy relevantes como la de este jueves en el Parlamento de Canarias, con el debate sobre la política general de Canarias y lógicamente nos cogió en una fecha que no era la mejor para el partido, en el sentido de que tuvimos que realizar el congreso unos días antes y en mi caso, como presidente del Cabildo, acabo de salir de un Consejo de gobierno, el viernes tenemos el Pleno ordinario de todos los meses y el secretario de organización, Julio Cruz, está haciendo acopio de la situación de toda la administración del partido. Vamos a tener este viernes una primera reunión y a partir de ahí ordenaremos todo ese trabajo.

- ¿Qué papel va a jugar Jerónimo Saavedra en esta nueva etapa?

- Tiene un papel muy importante porque es el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria en un Ayuntamiento que es esencial y donde el trabajo que está desarrollando no es sencillo, primero porque heredó una situación complicada y además, el tiempo que vivimos es complicado. Él sabe que cuenta con todo mi apoyo y respaldo para que esa tarea salga bien, tanto en mi función de presidente del Cabildo como secretario regional. Independientemente de eso, Jerónimo Saavedra como Juan Fernando López Aguilar han sido secretarios generales y han pasado por los órganos de dirección y siempre tendrán en mí el afecto, el respeto y yo espero tener de ellos el consejo y la consulta que siempre será buena y bien recibida por mi parte.

- Antes incluso de que fuera elegido secretario general, hablaron muy bien de usted muchas personas, incluido el presidente del gobierno canario. Eso se ha llegado hasta a utilizar en su contra por parte de sus adversarios. ¿Le molesta que gente de otros partidos políticos opinaran sobre su persona o alabaran su talante dialogante?

- Que yo soy una persona con la que se puede hablar no hace falta que lo diga nadie porque es así y siempre he procurado ser así, dentro y fuera de la política. Eso no es ningún valor ni ninguna ventaja, uno es así y punto. En cuanto a las intenciones de algún adversario político de colocar ahí sus preferencias, yo no dudo de que tengan buena intención o a lo mejor están hechas para fastidiar pero dice mucho los gestos con que se acompañan las frases.

- El Partido Popular enseguida salió a valorar el congreso y lo calificó como el congreso de la división definitiva del PSC. ¿Qué hay de cierta en esa percepción?

- Yo creo que no es una percepción de PP, es una pequeña maldad del PP, que desde mi punto de vista tiene un gran problema, que ojalá no tuviera y es que están acostumbrados a que alguien piense y decida por todos en Canarias. El exceso de personalismo político en un partido no es sano ni bueno y es justamente lo contrario de lo que hemos procurado hacer nosotros, que todo el mundo pueda pensar y decidir por si mismo. Es verdad que es más difícil y que se visualiza más el esqueleto y la vida interior de un partido político pero eso nos hace más fuertes y es bueno porque no todo el mundo está obligado a pensar lo mismo. El problema que tiene el PP desde mi punto de vista es que a su dirección le encantaría que la sociedad y el mundo fuera así, que todo el mundo estuviera sometido a un dedo, asustado, sin decidir y sin pensar, por una supuesta autoridad. Esa forma de trabajar en una organización política no es buena pero es que tampoco es buena para el conjunto de Canarias porque lleva a renuncias y a no estar presentes en muchas islas. Hay islas en las que el PP no tiene ni un concejal y eso no es bueno para Canarias. Por eso, esas críticas y ese buscar la pajita en el ojo ajena cuando tienen una viga en el propio uno lo acepta deportivamente pero también con bastante ironía.

- El actual sistema electoral de Canarias obliga a que siempre tengan que estar el Partido Socialista, el Partido Popular y Coalición Canaria. ¿Ve usted un futuro en el que no tengan que ser las cosas así?

- Siempre nos preguntan a nosotros si vamos a pactar con el PP “a la vasca” o con CC y yo respondo que hasta ahora el único que tiene un pacto amarrado para el 2011 es Soria que le anda contando a todo el mundo que tiene un acuerdo con Paulino Rivero y a mí eso me parece una temeridad y una falta de respeto. Aunque a mí no se me olvida, parece que a otros sí se les olvida que quienes tienen que decidir la vida parlamentaria son los ciudadanos en 2011 exactamente igual de libres y responsables que lo que hemos intentando practicar aquí internamente. Lo que nosotros vamos a intentar es que ese deseo de los ciudadanos tenga un punto de confianza en el Partido Socialista, que en Canarias lleva más de dos décadas sin gobernar. A partir de cómo quede el arco parlamentario, los partidos decidirán o deberían decidir qué es lo que van a hacer. Desde luego, nosotros lo haremos en ese momento. Anticipar qué es lo que vamos a hacer tiene poco sentido porque no sólo es una falta de respeto a los ciudadanos sino que constituye también una temeridad. No sabemos si seguirá el mismo juego de fuerzas o incluso quién se va a presentar a las elecciones. Yo aconsejaría esperar un poco. Es verdad que nuestro sistema electoral es perverso, injusto y tiene poco sentido que, por ejemplo, una isla como Fuerteventura tenga menos representación que la que debe tener por número de habitantes. Eso es absolutamente injusto y nos distingue de lo que pasa en otras latitudes en condiciones similares en la representación parlamentaria y eso hay que cambiarlo y hay que atreverse a hacerlo sin miedo y sin tapujos. Nosotros queremos cambiar este sistema electoral y combinar el respeto a la realidad de la isla con lo que es la cohesión de todo el archipiélago, con una fórmula que dé cohesión a las formaciones políticas, estableciendo una parte de la circunscripción de Canarias como circunscripción común y eso lo venimos proponiendo desde hace muchísimos años y algún día eso llegará.

- Ustedes gobiernan en el Cabildo con NC y es una formación que parece que va muy bien y que podría incluso llegar al Parlamento. ¿Qué cree?

- Ojalá fuera así porque introduciría, entre otras cosas, algo que no pudo ocurrir, que hay personas que puedan ver su voz y su preferencia representada en el Parlamento. En Gran Canaria, por ejemplo, NC sacó muchísimos más votos que CC y sin embargo, no pudo acceder al Parlamento y ellos sí tienen aquí un diputado. Eso no es justo. Es bueno que aquellos a quienes votan los ciudadanos lleguen al Parlamento, si alcanzan unos mínimos y no lo que tenemos en Canarias. En su día me pareció injusto que el Partido de Independientes de Lanzarote, alcanzando un porcentaje de casi el 29% de la Isla, no entrara en el Parlamento y lo digo yo, que pertenezco a un partido que se pudo beneficiar de esa no entrada y eso hay que cambiarlo, no para que entre el PIL y no entremos nosotros sino para evitar que se den esas distorsiones.

- Se da por hecho de que se va a presentar como candidato al gobierno de Canarias. ¿Podría pasar como ocurrió con José Manuel Soria, que fue candidato al Gobierno de Canarias y también al Cabildo de Gran Canaria?

- Yo no sé si seré candidato o no porque no me corresponde a mí tomar la decisión sino al partido. No está establecido que quien es el secretario general tenga que ser el candidato a la presidencia del gobierno. Son dos procedimientos distintos y a mí me parece que sí debería ser así pero esa es mi opinión personal. Si el partido lo desea, yo les diré que sí. En cuanto a la segunda cuestión, yo repito que soy cabildista pero para mí no es buena la doble candidatura. Si uno es candidato a la presidencia del Cabildo no debería serlo a la presidencia del gobierno autónomo y viceversa y yo seré fiel a mis convicciones.