Antonio Corujo rememora "con nostalgia pero sin pena" los inicios del barrio de Titerroy
El conocido y querido folclorista Antonio Corujo fue el encargado este lunes de dar lectura al pregón de las fiestas en honor a San José Obrero 2011 en Titerroy, que tuvo lugar en la carpa ubicada en la plaza Pío XII de este populoso barrio arrecifeño.
Al emotivo pregón de Corujo acudieron numerosos vecinos y políticos de Lanzarote que no quisieron perderse el entrañable relato de las vivencias de este querido vecino de un barrio al que vio nacer y en el que reside desde que “a finales de los años cincuenta del siglo pasado (qué lejos suena esto ahora) tuvimos la suerte de conseguir una de estas casas que, por poco dinero, nos daban no sólo un techo sino la oportunidad de progresar”, tal y como consta en la nota enviada a Crónicas.
El pregonero, que estuvo acompañado de su mujer e hija, recordó los
inicios del barrio de Titerroy con anécdotas que iba incorporando a su
pregón y la magistral representación de coplas que en más de una ocasión hicieron levantar de sus asientos a un aforo repleto hasta los topes.
“Recuerdo con nostalgia pero sin pena, todo sea dicho, aquellas calles
polvorientas, sin aceras ni asfalto, aquel viento que cuando soplaba como sólo sabe soplar en esta isla cerraba de golpe las puertas de estas casas, que permanecían siempre abiertas porque la confianza y la seguridad que disfrutábamos era tal que no importaba mucho que se cerraran de golpe y no encontráramos la llave: alguna llave de algún vecino servía para abrirlas todas”, señaló Antonio Corujo.
Corujo hizo referencia también a las necesidades que se pasó en este
barrio en los primeros años y a la “estrella” que alumbró el mismo para
que la suerte de Titerroy cambiara, dedicando parte de su pregón a
“aquellos que levantaron escuelas y nos dieron a todos la oportunidad de darle una educación a nuestros hijos. Y levantaron también el que por aquel entonces era el edificio más alto de todo Arrecife: la casa de los maestros del Colegio Benito Méndez”.
De este modo, el folclorista resaltó la transformación producida en el
barrio tras la construcción del polideportivo "Avendaño Porrúa", el
Instituto, la Escuela de Artes y Oficios, el cine Hollywood, la farmacia,
el centro de salud, la casa del cura, la de Don Francisco, y la
biblioteca, núcleo desde el cual se empieza a generar ese concepto de
barrio que nos identifica: la asociación de vecinos de Titerroy”.
Antonio Corujo hizo así un repaso a la historia del barrio de Titerroy,
recordando las “calles, como digo, sin aceras ni asfalto donde nuestros
hijos pudieron correr, jugar, aprender a caminar y llegar, ya de noche,
encachazados de tal modo que más de una madre ponía el grito en el cielo…” o “las casas sin agua ni luz, alumbradas por un manto de estrellas que hoy apenas sí podemos ver y habitadas por ilusiones tranquilas que con el paso del tiempo han dado a este barrio progreso y desarrollo, y también su poquito de eso que ahora llaman glamour..”.
“Hoy recorro las calles de mi barrio, porque es mío, porque lo vi nacer,
porque lo he visto crecer y porque lo siento mío, y me emociono al ver qué lejos queda aquella escasez, escasez que nos hacía iguales a todos y que quizá gracias a ella aprendimos a sentirnos solidarios…”, concluyó Corujo.
Apuesta decidida por Titerroy
Por su parte, el alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, felicitó al
folclorista por su “magnífico pregón”, así como a la Asociación de Vecinos
de Titerroy por el programa de fiestas. A lo lardo de su intervención, el
primer edil capitalino apostó decididamente por dotar a este barrio de
las infraestructuras y servicios públicos que se merece, recordando “el
notorio esfuerzo que se ha realizado desde el Ayuntamiento para llevar a cabo obras de mejora en sus calles, alumbrado y aceras”.
Asimismo, Reguera animó a los vecinos de Titerroy a que crean en Arrecife y en las grandes oportunidades que nos ofrece. “Impulsemos las sinergias necesarias que promuevan confianza entre los diferentes sectores de la sociedad a fin de favorecer el movimiento y el dinamismo económico y empresarial, cultural y social que la capital de Lanzarote necesita para convertirse en una ciudad generadora de prosperidad y bienestar para todos sus habitantes”, dijo Reguera.
También el concejal de Festejos, Eduardo Lasso, se dirigió a los más de
7.000 vecinos que conforman uno de los núcleos más poblados de la Isla, para animarles a participar de “unas fiestas preparadas con mucho cariño y bastante esfuerzo por sus vecinos.”
Una vez que concluyó la lectura del pregón, los vecinos pudieron disfrutar de un tenderete canario con música en vivo a cargo de los componentes del Taller de Folclore de Titerroy, que llevan 12 años participando en el pregón de las fiestas patronales del barrio y que animaron al público presente con su actuación.
En el acto, presentado por Mangüé González, miembro de la Asociación de Vecinos de Titerroy, intervino además su presidente, Ismael Montero, para dar la bienvenida a los vecinos y animarles a participar de un programa de fiestas hecho “con mucha ilusión”, y que se prolongará hasta el próximo 1 de mayo, día de San José Obrero.
Además del alcalde de Arrecife y del concejal de Festejos, a la lectura
del pregón acudieron el director insular de la Administración del Estado
en Lanzarote, Orlando Suárez; el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés; así como la casi la totalidad de los concejales de la corporación
capitalina, entre otros políticos lanzaroteños.