ROBOS A CASCOPORRO

En esta edición especial, la que viene justo después de nuestro primer día oficial de descanso en todo el año -no somos especiales, en Navidad, como saben nuestros amables y queridos lectores, no sale ningún periódico-, venimos con una inquietud de la que les informaremos con más extensión en la siguiente edición: los robos que se están produciendo en numerosos complejos turísticos de la Isla. Y no es hablar por hablar de un tema manido, estamos hablando de algo muy serio, del asalto a complejos con turistas dentro, de turistas asaltados por la calle y dentro de sus apartamentos. El lunes intervino en el programa Punto de Mira un empresario y político muy conocido en Lanzarote que ahora trabaja en Fuerteventura, Miguel Ángel Remedios. Pudo hablar más alto, pero no más claro. Dice estar harto de los constantes robos, dice estar cansado de venir a Lanzarote y no encontrarse otra cosa que chorizos y mangantes de todas las especies, algo que resulta frustrante a su juicio cuando además observa que la clase política no hace nada. Además, Remedios se quejaba de la ausencia total de vigilancia, de la escasa o nula presencia de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y de las policías locales. ¿Exagera? Pues no, porque en el momento de radiar la entrevista se produjeron varias llamadas a Agustín Acosta Radio, todas con el mismo mensaje. La que más desaliento nos produjo fue la de una pareja de turistas noruegos que llevan años viniendo a Lanzarote y que han sido víctimas de robos en sus dos últimas visitas. Como te imaginarás, tienen claro que no piensan volver. Una pena, pero así está la situación en estos momentos y a nuestros políticos no parece preocuparles demasiado. Por cierto, que Miguel Ángel Remedios, que conoce perfectamente la política lanzaroteña, confirma que en Fuerteventura las cosas se hacen de otro modo, los políticos trabajan mucho y se pelean poco. Vaya, parece que no era sólo cosa nuestra.