¿QUIÉN SE ENCADENA EN LAS CADENAS?

En este espacio ya saben que de vez en cuando nos dedicamos al chisme político. Porque sí, porque nos da la gana. El caso es que este viernes, terminado el pleno cabildício de las casi cinco horas de rigor, don Sergio Machín, hábil maestro de ceremonias como pocos, dirigió sus pasos e hizo dirigir los de un numeroso grupo hacia un lugar de sobra conocido, el restaurante “Las Cadenas” de Tinajo. Hacia allí se marchó don Sergio cantando esa canción de Francisco que decía algo así como “Encadenado a ti estoy como el mar a la arena...”. El caso es que cantando cantando fueron llegando a un restaurante de triste recuerdo para don Manuel Fajardo. Sí, hombre, ya saben, el mismo en el que estuvo el día en el que toda la plana mayor de su partido le esperaba para celebrara una reunión de la Comisión Ejecutiva Insular que finalmente se tuvo que suspender. Y fueron llegando uno a uno todos los integrantes del grupo de gobierno del Cabildo que preside Inés Rojas, con la intención de practicar eso del buen comer y del buen beber. Hasta ahí todo más o menos normal. O no tan normal, porque, ¡oh, sorpresa!, entre los integrantes de la comitiva había alguien que desentonaba, un político que no pertenece al grupo de gobierno, alguien que de hecho pertenece a la oposición. ¿Qué quién era? Nada más y nada menos que la consejera del Partido Popular (PP) Astrid Pérez, la que se supone, insistimos en eso de que se supone, que va a ser la cabeza de lista en el Ayuntamiento de Arrecife. Con la que está cayendo, nos imaginamos lo que puede pensar doña Loly Luzardo cuando se entere de que una de sus compañeras está confraternizando con el enemigo. ¿A dónde van a parar esos contactos culinarios, doña Astrid estaba haciendo algún tipo de trasvase? Creemos que no, aunque en política, especialmente en la política de Lanzarote, todo es posible. Lo que sí que tenemos claro es que “Las Cadenas” tienen algo extraño, algo que embruja y que hace que algunos saquen lo mejor y lo peor que llevan dentro. Parece que es un sitio que engancha, que engancha a la clase política. Insistimos en que el mejor ejemplo lo tienen todos los lectores de esta sección en lo que le pasó a don Manuel Fajardo. El caso es que este Sergio Machín sabe más que el Kilo, sobre todo de revolver y de enredar la pita. Esperemos que luego doña Loly no salga por ahí diciendo que se enteró de esto por la prensa, como hace siempre, y si es así, que diga al menos por qué prensa se entera, qué prensa lee. ¿Nos leerá a nosotros?