MOVIMIENTOS EN LA POLÍTICA DE LANZAROTE

En este tiempo de desaparición forzosa y forzada del Zurriagazo han pasado muchas cosas en la política de Lanzarote: la principal, que algunos fueron a por lana y salieron trasquilados. Nos estamos refiriendo por supuesto al PSOE de Carlos Espino (no confundir con el PSOE normal de toda la vida, que ese es otro), que anda precisamente en estos días de incertidumbre más perdido que un taxi por el desierto. ¿Razón? Que hicieron algo que antes habían hecho con ellos, menospreciar al enemigo. Jamás de los jamases se le pasó por la cabeza al líder en la luz del PSOE actual y a su corte de carísimos asesores que un hombre de campo sin estudios como Suso Machín iba a ser capaz de urdir una estrategia como la que ha llevado a efecto. Habrá algún mameluco que todavía piense que al alcalde de Tinajo le salió la jugada de churro: nosotros, que sabemos la verdad desde su origen, les podemos asegurar que no.

Coalición Canaria (CC) tenía una cuenta pendiente con el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), y se la cobró en Teguise. Pero tenía muchas más cuentas pendientes con el PSOE de Espino, y se las cobró en Teguise y en el Cabildo. De momento. La cosa no ha parado. Ya se sabe, porque en Lanzarote todo el mundo habla de política (probablemente sea el rincón del globo donde hay más expertos en política en proporción al número de habitantes), que están a punto de producirse al menos otras dos mociones de censura, la de Tías y la de Arrecife. Ya se sabe, porque el Partido Popular (PP) en buena lógica lo quiere así, que la una no sale sin la otra. Y ahí comienzan las dificultades, en el momento en el que hay que amarrar algo que los actores principales no pueden amarrar.

Si bien es cierto que hemos dicho y seguimos manteniendo que a Suso Machín le salió bien la jugada, no deja de ser menos cierto que los peores golpes se los ha llevado desde dentro de sus filas. Ya dijo en su día Pío Cabanillas: “en política hay adversarios, enemigos... ¡y compañeros de partido!”. Pero no fue el único: en sus memorias, Winston Churchill recuerda que un día un novato diputado conservador que cayó al lado del viejo león en su primer día de Cámara de los Comunes le dijo a Sir Winston, señalando a la bancada de los laboristas: “Qué alegría, estar aquí a su lado, con el enemigo enfrente...”. “No se confunda, joven -le respondió Churchill-, los que tiene usted enfrente son los laboristas, que son sus adversarios. Los enemigos los tiene usted aquí detrás, en su propio partido”. Ejemplos suficientes para explicar que los peores enemigos se los ha encontrado Machín en su partido, especialmente alguien que presumía de ser amigo suyo, José Torres Stinga, quien tiene por cierto más cerca un expediente de expulsión que la continuidad al frente del Ayuntamiento de Haría.

Pero volviendo a lo más novedoso, para no cansar a nadie con resúmenes, tenemos que decir que lo de las mociones de censura de Tías y Arrecife está en marcha. Es más, si no fuera por lo de Tías la de Arrecife ya habría caído, puesto que todo el mundo está de acuerdo en que la fórmula del Cabildo ha sido la correcta. Ahora bien, como aquí nos gusta contar la verdad, tenemos que explicar que hay dificultades en los propios partidos, donde existe cierto distanciamiento entre la cúpula y la base, o la “puta base”, que diría el literato Miguel González. ¿Caerán las mociones en breve? Si tuviéramos que apostar, apostaríamos a que sí, aunque en Lanzarote apostar en política es jugarse el dinero tontamente.

De todos modos, caigan o no caigan estos dos ayuntamientos, en estos días se podría producir otra movida casi inesperada: el asalto a la Alcaldía de Yaiza. Es un rumor que está en la calle y que gana fuerza, una vez que este confidencial ha hablado con alguno de los protagonistas que no lo desmienten. Las constantes declaraciones de Gladys Acuña y de Leonardo Rodríguez en los medios que todavía sobreviven a la quema de los torquemadas de turno han encendido algunos ánimos. En el Partido Nacionalista de Lanzarote (PNL) no quieren terminar rompiendo la baraja, una vez que han sido los que más han cedido en el Cabildo y una vez que están a punto de llevarse la Alcaldía de Arrecife; aunque todo tiene un límite. Urge, tal y como nos han dicho, una reunión en la cumbre para que cambien algunas cosas en el sur, antes de que las cambien por la fuerza.

Y para cambios, los que se prevén en algunos partidos. No sólo en Coalición se avecinan tiempos entretenidos. En el PSOE de Espino también están pasando cosas, algo que se evidencia más en el exterior con la guerra nada disimulada entre Jerónimo Saavedra y Juan Fernando López Aguilar. Dicen los que se mueven en el interior de esta histórica formación que los numerosos errores cometidos en la Isla tienen que tener un coste político. ¿Quién o quiénes pagarán los platos rotos?