LAS DESVENTURAS DEL SARGENTO ALATRISTE
El Sargento Alatriste (ya explicamos en su día que el de aquí no llega a Capitán) está de capa caída. Sin embargo, como ocurre en muchos casos, la procesión va por dentro, porque por fuera parece más enrabietado que nunca, con más ganas de largar y con más ganas de ser el protagonista que muchos dicen que va a dejar de ser dentro de muy poco, cuando se descubran sus verdaderas maniobras dentro y fuera de la política. Ahora resulta que el Sargento Alatriste está directamente relacionado con el maletín de los 2.000 kilos del que les venimos hablando estos días, y que navega y navega por las procelosas aguas de la corrupción que se escapa a los ojos y oídos de los que tienen que ver y oír. En cualquier momento el maletín navegante puede llegar a puerto, y puede ser así que el Sargento Alatriste y el resto de rufianes que lo codician sacien su sed de poder. Con 2.000 kilos se puede tener mucho poder, y mucha tranquilidad. Eso si no te cogen y terminas entre rejas. Bueno, el caso es que con tanta ansiedad, con tanto estrés, nos han dicho fuentes de absoluta solvencia que en estos días se está dedicando a jugar al golf, con lo que quiere matar cualquier sensación que no controle. ¿Estará jugando hoyos con Don Pepa, habrán hecho las paces definitivamente, se meterán nuevamente en negocios de difícil justificación? Lo veremos muy pronto, y creemos que será titular de portada. Lo del golf, lo del maletín y la unión entre el Sargento Alatriste y Don Pepa.