LA ASOCIACIÓN PARA LA DEFENSA DE LA AGRICULTURA

Estamos en condiciones de anunciar, porque nos lo han autorizado sus promotores, que está a punto de ver la luz la Asociación para la Defensa de la Agricultura de Lanzarote, cuyas siglas no conocemos, aunque podría ser perfectamente ADAL. El caso es que esta más que interesante iniciativa, que ha surgido como consecuencia de un también interesante debate que se produjo en una de las habituales tertulias del programa “El Despertador” de Lanzarote Radio, está dando ya sus primeros pasos. Fue en esa tertulia, en la que participaron entre otros el consejero de Agricultura y Ganadería del Cabildo, Higinio Hernández, y el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen del Vino de Lanzarote, Miguel Martín, donde, tras llegar a la conclusión de que había que hacer algo para que no se abandone definitivamente lo poco que queda del sector primario, se decidió meterse a fondo con el proyecto. Nos cuentan que en unos quince o veinte días tendrán ya los estatutos y la comisión gestora, que será la encargada de informar sobre las iniciativas que van a emprender para sacar al campo del abandono y la orfandad que padece en la actualidad. Sabemos que la gente que va a estar detrás de la Asociación para la Defensa de la Agricultura de Lanzarote es de lo más variada, hay gente que está directamente vinculada con el campo, que trabaja cada día la tierra, y gente que no, gente que sólo quiere echar una mano porque entiende que el futuro del sector es el futuro de toda la Isla. ¿O es que hay alguien que piense que el turismo se puede mantener si desaparecen las pocas personas que se encargan de cuidar las fincas? Son muchas y novedosas las cuestiones que van a plantear los promotores de la iniciativa, aunque entienden que para que salgan adelante van a necesitar la ayuda de la clase política, aunque en estos días ande metida en descomunales líos que parece que no se van a resolver nunca. Por ello se van a dirigir al nuevo consejero de Política Territorial, Mario Pérez, para pedirle que les eche una mano en todo lo concerniente a agilizar los trámites para que se recuperen fincas y se hagan verdaderos cuartos de aperos, para que se destine suelo a la creación de queserías como la que se quiere hacer en Tinajo y para que, en definitiva, se eliminen las muchas trabas burocráticas que existen en la actualidad. Estamos seguros de que don Mario será sensible a las peticiones, como estamos seguros de que esta buena idea va a salir adelante y va a dar sus frutos.