GABINETES DE PRENSA
Siempre hemos dicho que hay gabinetes y gabinetes, no cabe duda. Y entre los gabinetes de prensa, también hay “gabinetes” y “gabinetes”. Está claro que no todas las instituciones públicas, partidos políticos o patronales tienen la suerte de contar con profesionales de un nivel más o menos aceptable. Y es que el trabajo del gabinete de prensa, aunque bien pagado, está mal visto por la profesión y tiene relativa inestabilidad, sobre todo si está relacionado con la política de Lanzarote. La queja de hoy, porque este preámbulo viene establecido como antesala de nuestra habitual queja, está dirigida contra dos concretos responsables de dos concretas instituciones públicas que no dan una a derechas, ni a torcidas. Creemos además que son los responsables de determinada confusión con este medio, y como quiera que hemos expresado nuestras quejas por los conductos oficiales y no nos hacen ni caso, vamos a tener que empezar a contar con nombres y apellidos lo que están haciendo y por qué creemos que lo están haciendo. Cuando uno entra en un gabinete de prensa debe seguir siendo ante todo periodista, si es que ese uno es periodista y no forma parte de la legión de enchufados que jamás han pisado una facultad de Ciencias de la Información y que no conocen esta profesión ni por el forro, y pensar en lo importante que es facilitar la labor a sus “compañeros”, no poner zancadillas. Les contaremos más.