DOÑA LOLY Y SUS EXCLUSIVAS
Hace tiempo que gente del Partido Popular (PP) de Lanzarote asegura que doña Loly y parte de su singular gestora se la tiene jurada a este medio de comunicación. Nosotros hemos preferido pensar siempre que no es así, más que nada porque somos tan bobos y tan ingenuos que seguimos creyendo en la honestidad de las personas que se definen como demócratas. Lo malo es cuando demócratas como doña Loly comienzan a distribuir la información pública del partido a su antojo, obviando a aquellos que como nosotros no viven a la espera de que se produzcan las noticias sino que siempre las buscan, para lo que se pregunta y se pregunta hasta llegar al aburrimiento. Casualmente a los que preguntan jamás se les cuenta nada desde la gestora del PP, y sí a los que ni siquiera han llamado. Luego doña Loly se permite el lujo de ir dejando recados por aquí y por allá, tergiversando la verdad de las cosas. Vaya camino. Al final le vamos a tener que dar toda la razón a Alejandro Díaz y a todos los que se han quejado por su comportamiento. Por cierto, que nuevamente el afectado vuelve a ser el último en enterarse. Hablamos con Alejandro Díaz después de publicar la noticia sobre la expulsión definitiva del partido y nos confesó que todavía no había tenido noticia al respecto. Vamos, que todavía no le ha llegado el expediente de expulsión. Eso sí que es democracia interna, como es mantener una gestora saltándose a la torera unos estatutos o haciendo las listas electorales sin contar con la mayoría. Y es que, claro, la autoproclamada puede mucho, y quiere sobre todo asegurarse otros cuatro años más en la primera línea de la política canaria, nada más y nada menos que siendo la cabeza de lista al Parlamento regional. La verdad es que se lo ha ganado a pulso, después del éxito del Cabildo y después del éxito en las pasadas elecciones, donde el PP con ella de cabeza de lista sólo sacó dos concejales en el Ayuntamiento de Arrecife. Habrá que estar atentos para ver cómo camina la demanda interpuesta en el juzgado de lo Civil de Las Palmas contra la gestora, aunque es difícil esperar que los lentos tribunales de justicia resuelvan una cuestión así en los pocos meses que faltan para que se celebren las elecciones locales y autonómicas. Ahora, sorpresas, lo que se dice sorpresas, nos cuentan que las va a haber.