CUESTA MUCHO CREER...

Cuesta trabajo creer, que así por las buenas, Pepe Torres-(por supuesto que no el alcalde de Haría)- dimitiera sin más como vicepresidente de Aetur y de todos los cargos que ostentaba en esta federación e incluso de su flamante escaño de la Cámara de Comercio. En apariencia no había razones para pensar en una ida inmediata. Nos soplan motivaciones de las más variada índole de las que no nos vamos hacer eco al menos de momento. Respetamos las decisiones del señor Torres y a otra cosa.

Tanto o más nos sorprende que Gerardo Fontes -(Yayo para los amigos)- dicen que ha anunciado su dimisión al frente de Aetur por razones que ni el propio afectado ni nadie desvelan. Gerardo, con sus virtudes y defectos, sacó del ostracismo a la tal Aetur y la colocó en primerísimo plano de la actualidad conejera. Es real que su posición en torno a lo de ADERLAN le llevo a granjearse enemigos de la más variada índole y también sus posicionamientos en torno al desarrollo turístico, urbanístico... etc del terruño amado. No vamos a glosar, aquí y ahora, sobre la figura de Yayo porque no es ni el lugar ni el momento adecuado. Esperemos que el tema Flumelán no fuera el argumento de su supuesta o real dimisión. De todas formas manifestamos nuestra sorpresa y de momento añadimos que nos reservamos comentar la decisión del señor Fontes.

Sorpresa nos causa a nosotros que en el comité de los populares del día de hoy en el que estarán presentes el señor Soria y la plana mayor de esta formación política incluyendo a Domingo González Arroyo, Doña Dolores Luzardo, y como no, el inefable señor Larry -(auténtico personaje inspirador del hacer o deshacer del jefe) - en desarmonía con la realidad de la que pronto hablaremos en amplitud, con la amplitud que algunos quisieran “paliquear” pero que no se atreven por miedo a desatar las iras de tan curioso individuo.

Sorprende que nosotros nos sorprendamos, a estas alturas de la película, de lo que ocurra en este Lanzarote de nuestros amores y también de nuestros pecados confesados y los que no.