ALGUNOS SE CABREAN

Parece que no están sentando nada bien alguno de los comentarios que se publican últimamente en esta particular sección del periódico en la que se analiza a nuestro aire la actualidad informativa de arriba y de debajo de la tierra. No le han sentado bien a los que se han sentido aludidos, gente que sabe que algo ha hecho para que tengan que hablar de él en un periódico. También se cabrean los enchufados, los parásitos políticos, los que hacen negocio de la actividad pública, gente a la que les aseguramos que vamos a ir señalando con el dedo -cada vez con más crudeza- de aquí hasta que se acerquen las elecciones generales, otras elecciones. El objetivo no es otro que intentar desenmascarar a todos aquellos que intentan vender motos que no saben conducir, gente sin oficio ni beneficio y carente de ideología que se arrima a las formaciones políticas para medrar. No es de extrañar la cantidad de mensajes que se reciben a diario en nuestra edición digital criticando a los políticos y a los que tienen a su alrededor, no es de extrañar que muchos ciudadanos pidan incluso que devuelvan el sueldo que han cobrado por no hacer nada. Por cierto, que nos han dicho que el Cochinilla y el Cochinillo siguen cabreados por los madrinazgos y por los padrinazgos... ¿Por qué será?