El lío de Política Territorial
Todo el mundo aventuraba al comienzo de la legislatura que el Área de Política Territorial y Medio Ambiente del Cabildo iba a ser el más importante. Sin duda lo ha sido, aunque no siempre portando noticias positivas y no siempre ofreciendo a los ciudadanos la transparencia informativa que reclamaban. Qué decir de los medios de comunicación, que han tenido que soportar cómo en la época más reciente se filtraban de forma arbitraria e intencionada noticias importantes con el único objetivo de intentar que unos destacaran por encima de otros. ¿Las razones? Muchas y muy variadas, aunque en estos momentos no son objeto de este artículo editorial.
El caso es que la cosa no comenzó mal, con un Mario Pérez que se empeñó desde el principio en cambiar la tendencia que se había heredado de la legislatura anterior, la del enfrentamiento casi obsesivo entre el Cabildo y el Ayuntamiento de Yaiza. De todos modos, y aunque se produjeron importantes encuentros que prometían no menos importantes avances, todo se quedó en nada, agravándose la situación cuando incluso apareció la sombra del maletín por las esquinas de la Casa Amarilla.
Con la llegada del Partido Socialista Canario (PSC) al poder muchos pensaron que el Área de Política Territorial y Medio Ambiente iba a entrar por el sendero de la cordura, la transparencia y el diálogo. Nada más lejos de la realidad. Con Carlos Espino al frente se han producido los debates más agrios no sólo ya entre el grupo de gobierno y la oposición sino entre los propios socios del grupo de gobierno. Se ha discutido prácticamente todo, lo que se hacía y lo que no se hacía. ¿La principal consecuencia? Que los asuntos más importantes, salvo los pleitos judiciales, se han estancado de una manera ciertamente preocupante, y vamos a terminar la legislatura, salvo milagro de última hora, sin que se apruebe algo que se presumía vital para el futuro del control del crecimiento como es el Plan Territorial Especial.
Todos los partidos, conscientes como son de que en Lanzarote el medio ambiente y la conservación del territorio es prioritario para los ciudadanos, han tratado de rentabilizar su paso por este importante departamento. Pero una cosa es que se trate de rentabilizar y otra cosa muy distinta es que se paralice o se hagan las cosas al revés.
Mario Pérez y Coalición Canaria (CC) vuelven a tener la oportunidad, aunque sólo sea durante seis meses, de enmendar la plana y hacer que cambien las cosas. De momento parece muy sensato y razonable que se le dé democracia al departamento y democracia participativa a los importantes asuntos que emanan de él. De ahí que lo primero que se haya hecho, como adelantó este diario en su edición del sábado, es celebrar una Junta de Portavoces con el objeto de estudiar qué expedientes de los que dejó el socialista Carlos Espino sobre la mesa de su despacho debe ir a los tribunales y qué expedientes no lo deben hacer. Parece la forma más razonable de intentar cerrar la legislatura con algo de honra y de trabajo efectivo, porque de lo contrario cualquier asunto que se plantee, sobre todo con un Gobierno en minoría, no saldría jamás adelante.
De todos modos, con asuntos de este tipo la polémica siempre está servida. De hecho, la primera decisión que ha tomado el Cabildo insular bajo el Gobierno en minoría que preside Inés Rojas de recurrir una licencia turística del Plan Parcial Montaña Roja por incumplir la programación ya ha tenido la inmediata respuesta del Ayuntamiento de Yaiza. El teniente de alcalde y concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Yaiza, José Antonio Rodríguez, declaró en un comunicado enviado a los medios que en su institución no temen al nuevo recurso anunciado por el Cabildo, asegurando, y ahí entra ya el terreno político de la precampaña electoral en la que estamos inmersos, que “ahora, el grupo de gobierno de CC en solitario en el Cabildo hace más de lo mismo al seguir mediatizando para obtener réditos políticos al impugnar una nueva licencia urbanística en nuestro municipio”.
Como es lógico, teniendo en cuenta que se trata del único plan parcial de la Isla de los que tiene recurridos el Cabildo que cuenta con sentencia firme a su favor, desde el Ayuntamiento de Yaiza recordaron una vez más que el Tribunal Supremo anuló el Plan Insular de Ordenación del Territorio de Lanzarote, aprobado por el Cabildo en el año 1991 en el ámbito del Plan de Montaña Roja. “Esta sentencia firme, del 2002, está actualmente en ejecución por la entidad promotora”, subraya en su nota la institución que preside José Francisco Reyes.
Muchos ciudadanos pensarán con razón que es el cuento de nunca acabar. Sin embargo, hay razones para pensar que un cambio en la dirección del viento podría provocar un cambio también en la compleja situación de la política territorial de Lanzarote. Como siempre, habrá que tener algo de paciencia para esperar que ese cambio del viento aparezca en la institución más maltratada de la Isla.