Ironman 2009. El belga Bert Jammaer repite como “hombre de hierro”
Fotos: Dory Hernández
El día más inolvidable en el calendario deportivo de Lanzarote no decepcionó a nadie. Ni a los deportistas, ni a la afición, que se contaba por cientos en los laterales y gradas de la Avenida de las Playas de Puerto del Carmen. Muchos fueron los que llegaron a este Ironman 2009 para acompañar a sus amigos y familiares triatletas. Nadie quiso perderse la prueba más dura, como han reconocido los propios deportistas, de todo el circuito Ironman, una prueba que nació en Hawai para extenderse por todo el planeta, siendo Lanzarote la más especial y sacrificada de las pruebas.
Con el reloj acercándose a las nueve horas de carrera, que arrancó a las siete de la mañana con los 3,8 kilómetros a nado que tuvieron que completar los competidores, el primero en cruzar la meta fue el belga Bert Jammaer, que repite por segundo año como “hombre de hierro”. Agotado por la dureza de la prueba, no pudo siquiera atender a los medios de comunicación que le esperaban. Voluntarios de Emerlan se llevaron al atleta al set de recuperación, donde tuvo que ser atendido.
El español Gregorio Cáceres mejoró sus registros del año pasado quedando en la cuarta posición. Tardó varios minutos para sentirse con fuerza para atender a la prensa. “Desde el año pasado quiero estar en el podio, pero tampoco ha podido ser este año”, dijo el atleta. En la pasada edición quedó quinto, mientras que hace tres años tuvo el sexto mejor registro de la carrera. “Este año he mejorado mucho y espero seguir haciéndolo”, apuntó. Cáceres agradeció el apoyo a todos sus patrocinadores, entre ellos el Club La Santa, que estará a su lado al menos hasta 2011. “Quiero agradecer su apoyo a toda Lanzarote, que se ha portado muy bien conmigo”, añadió.
En declaraciones a los medios el deportista español dio un toque de atención al Cabildo y Ayuntamiento: “A ver si no están sólo para sacarse la foto y quitarle protagonismo a los triatletas. Se acuerdan de los deportistas cuando faltan tres o cuatro meses para el Ironman, pero yo también tengo que comer los ocho meses restantes”.
El alemán Stephan Vuckovic se alzó con la plata, mientras que el estonio Ain-Alar Juhanson repitió el bronce del año pasado. Vuckovic, al atender a los medios, estaba muy entero, dispuesto a responder a todas las preguntas de los periodistas. “La carrera ha sido muy dura. Este año la natación fue mejor que el año pasado, pero desde que me subí a la bici ya me dolía la espalda”, dijo. “A los pocos kilómetros de ir en bici ya me adelantó Gregorio. Supe que la carrera sería muy dura, por qué Gregorio ha mejorado mucho. Al final pude adelantarlo corriendo y quedar segundo”, concluyó el triatleta.