Pacto sí..., pacto no...
Por Ramón Pérez Hernández
Todos sabemos que los políticos que ocupan puestos de responsabilidad en las administraciones públicas son propuestos por los Partidos Políticos para ser elegidos por los ciudadanos en Elecciones libres. Asimismo nos consta que moral y legalmente dichos políticos, una vez subidos al poder por el voto ciudadano, tienen la obligación constitucional y moral de tomar sus decisiones para servir exclusivamente a la causa del “interés general ciudadano” y no a los intereses “privativos” de sus Partidos.
Opino que, salvo honrosas excepciones, el mortal endiosamiento “partidista” de la “clase” política está acogotando gravemente y desalentando a los vecinos de Lanzarote, que ingenuamente vemos sus malos rollos…: “pacto si... pacto no…”, sin hablar de planes y resoluciones cívicas, el fundamento de su elección, comportándose, bajo mi punto de vista, ramplonamente los mal llamados dirigentes políticos, muchos vanidosos como pavos reales al abrir las alas y mostrar sus cobardías materialistas y desprecio ofensivo al mandato mayoritario e interés general de los que vivimos en nuestra tierra.
Creo que a los Políticos de turno les importa un “carajo” las nefastas consecuencias que, seguro, su perverso comportamiento acarreará a los que tratamos de coexistir en armonía en nuestra tierra con todo el derecho del mundo amparados en la Constitución Española.
Un ferviente deseo: “por favor, lealtad y acatamiento a las decisiones mayoritarias ciudadanas”, por muy legitimo que cualquier pacto pueda ser.