INALSA… siguen las insolvencias
Por Ramón Pérez Hernández
“Luchemos por los derechos/sin cobardía
Que pobres somos muchos/que hay mayoría”
(Víctor Fernández Gopar, Poeta de las Breñas)
Efectivamente, siguen las ineptitudes dispendiosas sin que, nefastamente, nadie lo remedie, a pesar: del laudo improcedente (nos costará a “todos” más de nueve millones de euros según la inaudita Sentencia de la Audiencia Provincial de Las Palmas); de la impertinente declaración concursal prohibida por el párrafo 3 del articulo 1 de la Ley Concursal, al no ser aplicable a Empresa pública cuya actividad sea de interés público, como es la desalación y distribución de agua, y que nos costará, tan solo en pagar a los administradores concursales, en principio, casi un millón de euros.
Ya está bien de irresponsabilidades. Los municipios tienen el deber imperativo (Ley 7/1985) de defender sus bienes y derechos. Por tanto, como dueños de INALSA (los 7 Ayuntamientos y el Cabildo), a través del “CONSORCIO INSULAR PARA EL ABASTECIMIENTO DE AGUA A LANZAROTE”, están obligados a tomar cartas en el asunto rápidamente, pues no pueden permitir, no pueden tolerar, los despropósitos y embrollos que, sin sentido, se vienen sucediendo en el asunto de interés general ciudadano: “INALSA”. Se comentan “pérdidas de casi diez millones de euros en los 20 meses de administración concursal” y “Pérdidas en red de casi el 50% del agua desalada”… ¿Dónde vamos a llegar?. ¿Qué va a suceder?...
El Consorcio Insular para el Abastecimiento de Agua a Lanzarote, dueño de los activos hidráulicos insulares, tiene que oponerse, hay que anular tajantemente, la impertinente Declaración de Concurso de INALSA, y administrar directamente el activo hidráulico de su propiedad, aboliendo a INALSA tal como acordó el Parlamento de Canarias (BOC2000/092, del 26/07/2000) y exigir el forzoso auxilio (ayudas, subvenciones, líneas de préstamos con intereses a fondo perdido, etc.), del Gobierno de Canarias, del Central y de la UE, para sanear la Empresa, que por ser pública, es la única forma prevista por la legislación vigente para reflotarla hasta el total pago de las deudas. Eso permitirá una administración fluida y prescindir de innecesarias cargas como por ejemplo de los 3 administradores concursales a los que el Juez autorizó un pastón “arancelario”, etc. El Consorcio tiene que ser dirigido por un Gerente idóneo e intervenido por Funcionarios de Habilitación de Carácter Nacional (Secretario, Interventor y Tesorero), igual que sucedía antes de montarse el chiringuito duende y, supuesto, cuatrero INALSA. Si no se procede, entonces, la ruina, y la delirada privatización del ciclo integral del agua isleño está cantada y eso, en esta Isla reseca no debemos tolerarlo jamás, aparte de que tal como quieren llevarla a cabo, arruinándola, sería, quizás, un acto punible. El legal “ciclo integral del agua de Lanzarote” es nuestro y no es lícito ni decente desertar de él. Lo contrario sería encubrir una flagrante prevaricación contra Lanzarote.