Los hijos pertenecen a sus padres

Últimamente, cuando nos levantamos, muchos pensamos en cuál va a ser la sandez del día. Parece que hacen apuestas los políticos para ver quién dice la mayor estupidez, ya sea en las cámaras, ya sea en una rueda de prensa.

La barbaridad de hace unos días ha sido la de la ministra de Educación al decir que los hijos no pertenecen a sus padres. ¿A quién pertenecen si no?¿A usted, señora ministra?¿Al presidente del Gobierno?¿A los profesores?¿Quién responde cuando un hijo menor de edad comete un delito?

Los hijos pertenecen a sus padres o responsables legales, que tienen sus obligaciones según el Código Civil. La educación y las atenciones recaen en ellos. Es a estos a los que les corresponde inculcarles los principios y valores para que sean buenas personas y buenos ciudadanos y a nadie más. Nunca tenemos que olvidar la importancia de los abuelos.

Por tanto, a los hijos se les ha de educar en casa y no en los colegios e institutos. Estos han de centrarse en el proceso de enseñanza-aprendizaje; es decir, limitarse a la instrucción en las diversas disciplinas. Todo lo que se salga de aquí es entrar en terrenos escabrosos que pueden llevar al adoctrinamiento, que es normal en los estados comunistas y totalitarios que quedan en el mundo. Si no aclara la ministra estas declaraciones, podemos pensar que pretende hacer un guiño al comunismo.