Cuatro...
Por Ramón Pérez Hernández
Cuatro ciudadanos progresistas, bienhechores, de portentoso espíritu humano. Para mi son los “Cuatro Magníficos de Lanzarote”: César, Ginés, José y Manuel.
Tengo ilusión por lograr, en colaboración, que se instalen 4 efigies de los “Cuatro Magníficos de Lanzarote” en el Parque “Ramírez Cerdá” de Arrecife. 4 estatuas de tamaño natural, de bronce, duraderas de por vida, en su honor. Es fácil. Los lanzaroteños somos conscientes de la grandeza de las realizaciones de estos señores en bien del territorio: D. José Ramírez Cerdá y D. Ginés de la Hoz Gil, políticos destacados, estadistas excelentes por los siglos, que lo dieron todo por su amada Lanzarote y, además, ambos, copartícipes fundamentales ante las Autoridades del Estado para el logro de Termoeléctrica de Lanzarote, S.A.; D. Manuel Díaz Rijo, superior en su ferviente deseo y genial idea de dotar a Lanzarote de agua desalada, que influyó a más no poder en la alta vida de los lanzaroteños y en el desarrollo industrial y turístico de esta “requemada” Isla, y D. César Manrique Cabrera, genial artista universal, único, que quería a su idolatrada Isla más que así mismo.
Sueño, como el eximio escritor lanzaroteño Agustín de la Hoz Betancort, constituir una Comisión a tal fin. Recuerdo que colaboré con Agustín de la Hoz en su ferviente deseo de implantar el merecido Monumento al Ilustrísimo Médico-Misionero de Lanzarote DON JOSE MOLINA OROSA (ahí está, entre las calles Fajardo, José Antonio y José Molina, el lugar de encuentro más emotivo de Lanzarote). La Comisión (1971) Pro-Monumento doctor José Molina Orosa, se constituyó por: Agustín de la Hoz Betancort, Ginés de la Hoz Gil, Rogelio Tenorio de Páiz, Agustín García Márquez, Juan Bosch Millares, Francisco Perdomo Spínola, Pedro Medina Armas, Alberto Sánchez Quevedo, Enrique Miranda García y Ramón Pérez Hernández.
Una vez se constituya la Comisión para el Monumento de los “”Cuatro Magníficos de Lanzarote”, estudiaremos el Proyecto. El coste puede pagarse en colaboración vecinal, que aportará su “granito de arena” para participar en el coste de la elaboración de las 4 efigies en bronce de 1ª calidad, a tamaño natural. La aportación voluntaria se fijará como máximo 25,00€ para cada familia y entidades. La recaudación se hará a través de Bancos y Cajas, publicitándose las sumas recaudadas cada mes hasta totalizar el Presupuesto del Monumento, del que también daremos cuenta pública a los vecinos.
Surgirán, seguro, admirables anécdotas como sucedió en la de Pro-Monumento al Dr. Molina Orosa (Monumento encargado por 300.000 Ptas. en 1972)…: ”una señora nonagenaria, de la Puntilla, entró en el Banco y me dijo afectuosa… ”si “podía aportar 1,50 PTA…, que era todo lo que disponía” para ayudar a D. José. Sabe, dijo la Sra., “tengo mucho cariño y amor a D. José; es un Santo: siempre me curó gratuitamente. En mis oraciones le rezo y pido cosas…”
Ante la avalancha de donaciones, la recaudación llegó a 327.000 pesetas. En ese momento el Presidente de la Comisión (1972) D. Rogelio Tenorio de Páiz, Alcalde de Arrecife, se cogió un “cabreo del 15” porque el Ayuntamiento pretendía colaborar con 25.000 pesetas”. Le sugerí a D. Rogelio que en plan simbólico el Ayuntamiento ingresara solo 5,00 pesetas y las 27.005 pesetas sobrantes las donáramos, en nombre de Don José, a la incipiente Comisión para el “Colegio de Discapacitados de Lanzarote” que entonces presidía el Sr. Vilas. Don Rogelio aceptó encantado. Cuando le entregué al Sr. Vilas, en su Oficina de la Fabrica Hijos de Ángel Ojeda, S.A., el cheque de 27.005 pesetas, este señor dijo algo que se grabó en mi alma: “Ramón, no cabe duda que Don José era un Santo. Hace milagros hasta después de muerto”.
¡Ojalá! que los “CUATRO MAGNIFICOS de LANZAROTE” eternicen sus milagros…