Los concejales del partido de Independientes de Lanzarote (PIL) en los ayuntamientos de Arrecife y San Bartolomé, Tomás Fajardo y Eli Mesa, y Yésica Pérez, respectivamente, han confirmado este miércoles en un comunicado de prensa trasladado a este diario que no acatarán finalmente la ruptura del pacto de gobierno con el Partido Socialista (PSOE) decretada en el Consejo Político de los insularistas a principios de este mes de abril.
"Nos encontramos en una situación sorprendente e incomprensible, ni buscada ni deseada. Hemos cumplido disciplinadamente, lo mejor que hemos podido, los pactos que estableció el partido al inicio de legislatura. Ahora, lo que era una simple sustitución de un asesor en Arrecife, buscando otras personas con mayor preparación técnica, que puedan ayudarnos mejor con los nuevos áreas que asumimos y al amparo del articulo 9 de dicho pacto -que da libertad a los cargos electos en cada administración para estos nombramientos- se ha convertido, sin mas motivos, en encontrarnos de repente con que se nos amenazó en nota pública, sin escucharnos previamente, con la expulsión", sostienen los tres ediles en su misiva.
En su nota, los ediles acusan al presidente del PIL, Ramón Bermúdez, "de seguir las órdenes de CC solo por su liberación en la enseñanza", en clara alusión al cargo que este ostenta en la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias. "Lleva ocho meses cobardemente desaparecido, dictando a unos lo que deben decir y reuniéndose con otros a escondidas", critican al respecto.
"La explicación a todo esto solo la encontramos en que como ya denunció algún ex compañero y como ahora ya dice el rumor popular, "la liberación del presidente de un partido, por otro partido diferente, hace que el primero se convierta en satélite del segundo", afirman.
"Denunciamos tener un presidente que lleva ocho meses cobardemente desaparecido, dictando a unos lo que deben decir y reuniéndose con otros a escondidas. Pero sin dar la cara en el partido, ni ante la ciudadanía. Dejando el partido en manos de vicepresidentes de poco calado político, y hasta novatos, que en algún caso parecen buscar más de lo mismo: Hacer de la política su echadero personal", lamentan los tres concejales del PIL.
No readmitirán al vicepresidente como asesor de Arrecife
Por otro lado, Fajardo, Mesa y Pérez advierten al vicepresidente del PIL, José Marcial González, de que no le readmitirán como asesor en el Ayuntamiento de Arrecife.
"Si lo que se quería era romper con el PSOE, motivos había otros de más importancia que podríamos hasta compartir sin necesidad de expulsarnos. Ni de que se diera la vergonzosa imagen de aparentar que es por el interés en buscar un echadero pagado al vicepresidente. Al cual se deja a los pies de los caballos para siempre: Recién llegado a la política y demostrando que solo busca un sueldo. Sucia jugada del presidente que tapa su propio interés personal con la ingenua torpeza del vicepresidente", expresan.
"Por responsabilidad personal ante los que confiaron en nosotros y por dignidad", advierten, "no cederemos ni a amenazas, ni a los chantajes que se proponen". "No readmitiremos al vicepresidente como asesor del Ayuntamiento de Arrecife. Y no dejaremos nuestras responsabilidades de Gobierno mientras las administraciones y nuestros socios de gobierno en ellas lo necesiten. Al igual que creemos que en Yaiza o en el Cabildo nuestros compañeros deben de seguir con su labor de Gobierno", explican.
Sorprendidos
Los concejales del PIL en Arrecife y San Bartolomé añaden que creían "de verdad que el nuevo PIL quería ser un partido de estabilidad y sensatez". "Una alternativa seria PSOE y CC. Pero a la primeras de cambio se traslada sin saber muy bien por qué a la ciudadanía y a nuestros votantes un lío incomprensible y vergonzante. Una imagen alejada de lo que pregonaba el presidente hasta ese momento", alegan.
Posible expulsión
Además, ante una más que posible expulsión del partido, los tres ediles manifiestan que saben "que nos pueden expedientar, expulsar y hasta tratarnos de tránsfugas. Nos afecta, y mucho, esta situación con nuestro partido que no merecimos", señalan al respecto. "Pero desde este momento, con pesar, no atenderemos más a llamadas o instrucciones del presidente o vicepresidentes, hasta que estos demuestren que sus decisiones son imparciales y que están alejadas de intereses particulares". "Si el presidente renuncia a su liberación en la enseñanza por CC y se vuelve a dedicar con independencia al partido nos encontrará a su disposición. Igualmente si el vicepresidente renuncia públicamente a obligarnos a nombrarle asesor en el Ayuntamiento. A partir de ahí", advierten, "todo lo podemos hablar, discutir y tratar dentro de la lógica en un partido. Pero no permitiremos que nos usen para intereses particulares". "Dejamos a la ética y responsabilidad del resto de compañeros del partido sus respectivos posicionamientos", concluyen.