Muy sensatas sugerencias, en las que solamente faltaría la especificación del destino final de ese suelo rescatado y acondicionado para la agricultura. Espero que no se trate de perpetuar el modelo de explotación platanera extensiva a base de producir mucho para cobrar subvenciones europeas, malvendiendo la fruta en competencia con productores con menores costes y botando al barranco los excedentes con la pica. Espero y deseo que se acometa la recuperación de nuestras prácticas tradicionales de cultivo, para el abastecimiento local o archipelágico, frenando las importaciones inexplicables en una isla como la nuestra. Espero y deseo que se comprenda que ahí, en la agricultura y ganadería tradicionales, con el debido apoyo y asesoramiento, con garantía de precios justos, está el nicho de empleo que solucionaría los terribles problemas sociales que atribulan a La Palma y al resto de islas.