Los vecinos de Playa Blanca y del municipio en general tendrán que esperar al 2022 para estrenar el pabellón deportivo de la localidad. Y es que, según denuncia este domingo el Partido Popular (PP) en nota de prensa, "la pésima planificación y las deficiencias que tiene el proyecto licitado por el Ayuntamiento obligan a retrasar la ejecución de las obras y, lo que es aún peor, a aumentar su presupuesto en casi dos millones de euros".
Un desfase presupuestario que desde el PP califican de “escandaloso” al representar una modificación de casi un 40% del proyecto. Así lo han denunciado los concejales del PP en el consistorio sureño, Juan Monzón y Guayo Rodríguez, en el pleno celebrado este pasado viernes donde el gobierno de Óscar Noda ha aprobado una nueva modificación, la segunda ya, por valor de 1.891,620 euros.
“Ahora nos encontramos con que un pabellón que se presupuestó en 5,2 millones de euros se ha disparado hasta los 7,2 millones”. “Se puede entender que en el momento de ejecutar cualquier obra surjan los famosos gastos imprevistos, pero no hay imprevistos que valgan cuando estamos hablando de casi dos millones de euros de sobrecoste. Desde luego eso tiene otro nombre y es negligencia, por falta de supervisión en el momento de redactar el proyecto y no tener claro el tipo de infraestructura deportiva que se quería hacer”, denuncia el portavoz municipal Juan Monzón, que señala la falta de seriedad y rigurosidad con el dinero público que está demostrando el gobierno de Oscar Noda.
Los Populares advierten que algunos cambios de este nuevo modificado son sustanciales, como el vaso de la piscina o los servicios en las canchas anexas al pabellón, que tienen muy difícil encaje legal en la ley de contratos. Unos cambios que además pueden resultar un agravio para las empresas licitantes excluidas, que pudieran iniciar acciones legales contra la administración. Aspectos éstos que se recogen también en el informe desfavorable a este segundo modificado de obra emitido por la Intervención.
Para los ediles del PP, dicho informe resulta esclarecedor al señalar por ejemplo que “... en ningún caso puede ser aceptable el cambio de vaso de la piscina con una repercusión cercana a medio millón de euros una vez ha sido licitado el proyecto...”, o que “de igual manera resulta sorprendente que dicho cambio implique un exceso de coste tan elevado”.
En cuanto a los movimientos de tierra derivados del deficiente estudio geológico, se apunta que “... hablamos de una desviación desmesurada que alcanza el 300%. Igualmente merece mención la elevada desviación del capítulo de cimentaciones, un 70%, que ya no se conoce si se debe al error también del geotécnico o a otras razones”, añadiéndose que “son también especialmente significativas las desviaciones de estructuras de casi un 40% y de albañilería en torno a un 30%”.
Asimismo, en lo que se refiere al saneamiento con una desviación del 200% se justifica en el descubrimiento de los puntos de acometida nuevamente se trata de errores del proyecto por falta de un correcto estudio para su preparación, siendo un importe nada desdeñable”.
Todas estas apreciaciones están poniendo en evidencia una gestión improvisada y un déficit grave de planificación y fiscalización de la redacción del proyecto que pueden poner en riesgo la consecución del pabellón si deriva en una maraña o conflicto judicial. “De momento, va a suponer un retraso de unos 10 meses y dos millones de euros más a las arcas municipales”, destaca Juan Monzón.
Desde las filas del PP de Yaiza también destacan y confían en que el gobierno municipal, esta vez sí, siga las indicaciones de los informes e inicie expediente para reclamar la correspondiente compensación a la empresa adjudicataria de la redacción del proyecto del pabellón deportivo.
