miércoles. 24.04.2024

“El paisaje de la cochinilla podría ser tan importante como La Geria, que lo vendemos y lo respetamos e intentamos tenerlo siempre presente”

 “A nosotros nos ha salvado el consumo local”

“La pandemia no puede ser excusa para que las cosas funcionen mal un año después”

“A nosotros no nos vamos a aburrir y vamos a intentar que entre hasta la última solicitud”

“Al final, entre tantos viticultores, no solo los de Lanzarote, sino contando los de toda Canarias, alguno puede decir que ya ha ido dos veces y que la tercera no vuelve”

Dice la secretaria del Consejo Regulador de la Denominación de Origen del Vino de Lanzarote, Nereida Pérez, que deberíamos ver Lanzarote como una isla global y darnos cuenta de que si tuviéramos en consideración el paisaje de La Cochinilla, tendríamos un atractivo turístico similar a un icono venerado por todos como es La Geria. En el programa “A Buena Hora” de Crónicas Radio – Cadena Cope de este viernes aseguró que Lanzarote ha vuelto a tener que tirar del carro a la hora de hacer reclamaciones para el bien de los viticultores. En esta ocasión, ha sido “poniendo el grito en el cielo” por el mal funcionamiento de la sede electrónica en la que gestionar las subvenciones para los viticultores. Aseguró que no puede seguir usándose un año después la pandemia para justificar la falta de capacidad de este sistema, que está provocando que haya agricultores que se den por vencidos a la hora de gestionar sus expedientes. Reconoce que los residentes en la Isla han salvado la venta de vino y mantiene que nadie la va a aburrir a la hora de defender los derechos del sector.

-Hay que celebrar el Día de Canarias bebiendo vino de Lanzarote pero con moderación…

-El vino de Lanzarote nunca puede faltar y la moderación y el respeto en estos tiempos tampoco.

-Han denunciado la imposibilidad de tramitar las ayudas por el mal funcionamiento de la sede electrónica. ¿Qué ha pasado?

-Eso lo tendrán que decir los técnicos. En lenguaje coloquial lo que puedo decir es que no funciona la sede. El lunes y el martes fue imposible tramitar un solo expediente. El lunes hicimos cada compañero una; por lo tanto, tres solicitudes en toda una jornada laboral. Empezamos sobre las ocho y diez hasta las tres de la tarde y el martes fue imposible. No es solamente que no se pueda hacer la solicitud; el problema es el volumen de trabajo que tenemos, la gente que se tiene que desplazar y el trabajo no se puede hacer. Además, no es algo puntual de este año; la sede funciona fatal; no sé si es que hay que darme mayor capacidad o cuál es el problema técnico que tiene pero cuando se abren periodos concretos para la apertura de expedientes o lo que sea, debería funcionar.

-Siendo mal pensados, ¿esto no provoca que no se tramite nada y el dinero se quede donde está?

-Yo quiero pensar que eso no es así porque cuando pusimos el grito en el cielo, ampliaron diez días el plazo y ahora ya podemos hacerlo hasta el 13 de julio. No creo que sea así y vamos a no pensar mal. Lo que pasa es que al final, entre tantos viticultores, no solo los de Lanzarote, sino contando los de toda Canarias, alguno puede decir que ya ha ido dos veces y que la tercera no vuelve. El año pasado nosotros, por el tema de los DNIs, por la pandemia y la imposibilidad de autorizarlos y demás, se hicieron 53 solicitudes menos respecto al año anterior. Nosotros siempre intentamos que eso no pase pero a veces es inevitable.

-La Administración siempre juega con la baza de aburrir al personal…

-A nosotros no nos vamos a aburrir y vamos a intentar que entre hasta la última solicitud. De todos modos, yo creo que si no pasa nada raro, entraremos en plazo. Confiemos en que no vuelva a darse porque no es algo que pase solo en Agricultura sino que pasa también en otros departamentos.

-Hay una parte justificable por la pandemia pero hay otra que no se puede justificar…

-Eso se entendía el año pasado, que podíamos entender el volumen de trabajo que se dio por lo que pasó en marzo y en mayo, junio… nadie esperaba todo lo que nos estaba pasando. Se colapsó la actualización de los DNIs electrónicos con las claves y era entendible. Ha pasado un año y tan difícil no es darle capacidad a esa sede electrónica. Ahora estamos tramitando más de 4.000 expedientes; se están tramitando traslados de Educación, que hay temas de la Seguridad Social para pedir certificados para las ayudas sociales… y en un año hay tiempo para tener eso en mejores condiciones. La pandemia no puede ser excusa para que las cosas funcionen mal un año después. Hay cosas en las que hay que poner toda la carne en el asador para que funcionen.

-Ha dicho que tuvieron que poner el grito en el cielo y es que parece que para que funcionen las cosas de Lanzarote siempre hay que poner el grito en el cielo…

-Sí y encima parece que siempre es Lanzarote la que siempre tiene que estar ahí. Nos van a poner una cruz diciendo que los de Lanzarote protestando porque un día no funciona algo y ya están con los comunicados pero lo que pasa es que Lanzarote tiene 1.200 expedientes y el siguiente consejo que tramita así es Tacoronte que tiene 700. A partir de ahí, todos los otros consejos reguladores tramitan muchos menos, unos 200 o 250. Para Lanzarote perder dos días de poder tramitar expedientes nos supone que quizá no lleguemos. Además, no solo estamos tramitando esas ayudas sino que tenemos el día a día nuestro que hay que seguir con él y se ralentiza todo. Por desgracia, Lanzarote somos los que tenemos que tirar del carro y estar ahí y ellos mismos nos lo dicen. Esta vez sí que hemos sido los 11 consejos reguladores y nos dicen que si ellos están como están, no quieren ni imaginarse cómo estaremos nosotros aquí.

-Aunque es un poco pronto, ¿ya saben cómo va a venir la próxima cosecha?

-No viene muy emparejadita. Los agricultores vienen por aquí y unos nos dicen que viene más uva que el año pasado y otros, que más o menos igual. Ahora lo que nos queda es esperar que los agricultores puedan controlar esta ceniza que está cayendo y que no afecte a la calidad. Yo espero que sea así. Somos optimistas en cuanto a que parece que está empezando a entrar más turismo; las bodegas, quitando ese mes de febrero que fue bastante malo en cuanto a la entrega de contraetiquetas, el año no está siendo tan complicado como pensamos. Las bodegas están otra vez pidiendo contraetiquetas y eso es señal de que van vendiendo más vino y se va viendo la luz al final del túnel.

-También la gente local está yendo a las bodegas a tomar un vino y pasar un rato…

-A nosotros nos ha salvado el consumo local. El supermercado se ha notado y nuestros residentes han consumido mucho vino. Cuando la gente estuvo confinada sin poder salir, tomó vino en casa y ahora que ya podemos salir, nuestra clientela fiel sigue siendo los residentes. Lo que pasa es que para llegar a la vendimia con una bodega lo más vacía posible, nuestros residentes solos no pueden consumir todo ese vino; por eso, hay que tirar del turismo canario o nacional. Además, las ventas on line. Las bodegas han hecho un trabajo durísimo este año y ahora se van viendo los resultados.

-Hay que concienciar a la gente que consumiendo vino de Lanzarote nos ayudamos todos…

-Efectivamente.

-Por cierto, tenemos una lucha especial por levantar también el sector de la cochinilla. Usted que es del norte y conoce la zona, ¿cómo lo ve?

-El sector primario en si está ahí ahí. En cuanto a la cochinilla, todavía no podemos decir que sea imposible porque hay un grupito que sigue motivado a través de la cooperativa. Lo que pasa es que necesitamos estar agrupados, desde el político que nos represente al último agricultor que venga a colocar la última piedrita de la parcela; todos tenemos que ir en la misma línea. El cultivo y el paisaje de la cochinilla es tan importante en la zona de Mala y Guatiza como puede ser La Geria. Tenemos a La Geria como un icono porque todos pasamos por esa carretera y no nos damos cuenta de la cantidad de gente que pasa entre Mala y Guatiza, con ese Jardín de Cactus que tenemos ahí para ir a Órzola, La Graciosa… si todas esas parcelas estuvieran cultivadas con cochinilla tendríamos un atractivo turístico increíble. Podría ser tan importante como La Geria, que lo vendemos y lo respetamos e intentamos tenerlo siempre presente. Lanzarote debería estar de punta a punta cultivada y mantenida, teniéndola en cuenta como algo global, como un conjunto.

-Y con el dineral que ha circulado y se ha gastado, podría haberse hecho…

Y que sigue circulando. Nos llenamos la boca diciendo que viene un montón de dinero para el sector primario, para el desarrollo rural, para la mejora de la calidad de vida de los núcleos rurales y Lanzarote es rural entero. Hay que tener proyectos y el as debajo de la manga y sacarlo en todas partes porque alguna vez nos dirá que sí a ese proyecto. Lo que no podemos hacer es aburrirnos. Yo seguiré peleando con el sector del vino, que parece que lo llevamos un poco mejor, y donde quieran mi apoyo allí estaré con el resto del sector primario.

“Por desgracia, Lanzarote siempre tiene que ser quien tire del carro”
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