jueves. 28.03.2024
Francisco Armas, presidente de Asolan

“Estamos tratando de sensibilizar a las administraciones para que se centren en renovar no solamente la planta alojativa, sino también el entorno”

“Hay que buscar los medios necesarios para que ese propietario no se vea abocado a la venta individual de sus apartamentos y en ello tienen que implicarse las administraciones”

“Tenemos unas opciones deportivas fantásticas por la climatología y orografía de la Isla y por ello tenemos que vincularnos más a las actividades acuáticas”

“No tenemos una visión certera de lo que puede ser el invierno. En principio hay apuntes que pueden ser positivos y otros que no lo son tanto. Es una realidad muy cambiante”

“Estamos en un momento que evidentemente no es bueno, pero puede ir a peor. Sin embargo, todavía estamos a tiempo de retomar nuestro rumbo”

El presidente de la Asociación de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan), Francisco Armas, confirma que la venta individual de apartamentos turísticos como residenciales no es algo que se dé solamente en Lanzarote, “se está produciendo” -dice- “en las zonas turísticas más obsoletas de las Islas Canarias y en algunos casos con mayor incidencia de lo que se puede dar en alguna zona de Lanzarote como Puerto del Carmen, que es la zona que por tener más ‘edad' presenta unos síntomas claros de obsolescencia”. Para Armas no es, sin embargo, una consecuencia de la situación de pánico que se vive en la Isla ante la situación turística de Lanzarote. “Yo lo que sí creo es que puntualmente pequeños complejitos de apartamentos, que ahora mismo no tienen mercado porque no son demandados por los touroperadores, se han visto en la tesitura de o renovarse, lo cual tiene un futuro muy incierto, o vender sus apartamentos individualmente como residenciales”. En este sentido, el presidente de los hoteleros considera necesario “implicar a las administraciones para intentar que este fenómeno sea un tema aislado y no repercuta en lo que es la fortaleza de la zona turística”.

-¿Cuáles son las perspectivas que tiene la Isla para el otoño en cuanto a turismo se refiere?

-Usted ha dicho bien que estos meses de verano, julio y agosto, son los meses de las alegrías de los empresarios alojativos porque se registran los mayores niveles de ocupación del año. Aunque es cierto que el verano acaba prácticamente, -con septiembre y octubre ya se puede dar por terminada la temporada de verano-, las sombras son claras en el sentido de que no tenemos tampoco una visión certera de lo que puede ser el invierno. En principio hay apuntes que pueden ser positivos y otros que no lo son tanto. Es una realidad muy cambiante. En cuanto a la información que tenemos del aeropuerto, sabemos que la información que están pidiendo las compañías aéreas está en torno al mismo volumen del año pasado y es verdad que también se aprecia un corrimiento de compañías de un país a otro. Quiero decir que a lo mejor suben un poco los nórdicos y se mantiene la tendencia a la baja de los británicos y alemanes, con lo cual una previsión para el invierno sigue siendo una tarea muy difícil.

-Da la impresión de que en el mismo sector ha cundido el pánico y en algunos casos hasta se están reconvirtiendo camas turísticas en residenciales. ¿Eso es así realmente?

-Si, efectivamente, no solamente en Lanzarote, esto se está produciendo en las zonas turísticas más obsoletas de las islas Canarias y en algunos casos con mayor incidencia de la que se puede dar en alguna zona de Lanzarote como es Puerto del Carmen, que es la zona que por tener más ‘edad', presenta unos síntomas claros de obsolescencia. Pero yo no diría que no es una situación de pánico, yo lo que sí creo es que puntualmente pequeños complejitos de apartamentos, que ahora mismo no tienen mercado porque no son demandados por los touroperadores, ha dado lugar a que haya empresarios que se han visto en la tesitura de o renovarse, lo cual tiene un futuro muy incierto, o venderlos individualmente como residenciales, a lo que algunos han optado. Y eso evidentemente yo creo que clarísimamente perjudica a la zona. Yo creo que lo que hay que buscar precisamente son los medios para incentivar que ese propietario no se vea abocado a buscar la venta individualmente de sus apartamentos y hay que implicar evidentemente a las administraciones para intentar que este fenómeno sea un tema aislado y no repercuta en lo que es la fortaleza de la zona turística.

-Si, porque efectivamente eso daña la imagen de algunas zonas.

-Si, es difícil la pervivencia en la misma zona de hoteles o de complejos de apartamentos con zonas residencializadas, que además son complejitos a veces de apartamentos de pocos metros cuadrados y que normalmente son gente trabajadora la que se hace con ellos. Evidentemente no es tampoco agradable ver en una zona turística la colada y la ropa tendida al lado de lo que son los hoteles.

-No, y lo que no es la colada, botellas de gas en la escalera, etc.. Eso es algo absolutamente dañino y aparte de eso ilegal, porque la zona turística no se puede transformar en residencial de la noche a la mañana. Pero, por otro lado, ¿existe la conciencia de empresarios y políticos de la necesidad de trabajar juntos para superar el ‘bache' turístico en el que nos encontramos?

-La preocupación existe en todos los estamentos implicados. Nosotros lo que pedimos, los empresarios, que somos los que vivimos esta situación más de cerca y vivimos el día a día, y estamos de alguna manera empujando, es la implicación de todos. Entiendo que también los políticos tienen multitud de responsabilidades y tareas, pero como bien ha dicho usted, el sector turístico es el que prácticamente nos da de comer a la inmensa mayoría del pueblo de Lanzarote y nosotros lo que reclamamos de la acción pública y de los estamentos públicos, es una mayor implicación. Yo creo que estamos en un momento que evidentemente no es bueno, pero puede ir a peor. Estamos todavía a tiempo de retomar nuestro rumbo. Yo creo que se han dado pasos positivos, el tema de la promoción, yo creo que ya la hemos encaminado, está encauzada; en el tema de la renovación estamos tratando de sensibilizar a las administraciones para que se centren en renovar no solamente la planta alojativa, que eso en cierta medida se está dando y en otra cierta medida estamos pidiendo que las administraciones públicas también incentiven esa renovación alojativa, sino también el entorno. Ahora, que tenemos la suerte de tener alguien muy sensible en la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias, que es también de Lanzarote y conoce además todas las islas, yo sé que está por la labor de meterle una inversión fuerte a las zonas turísticas, sobre todo a las más dañadas por el paso del tiempo para adecentarlas, renovarlas, limpiarlas y para poder recuperar y ser competitivos también en los mercados turísticos.

-Vuelve a hablarse del plan de ocio alternativo como una amenaza para Lanzarote.

-Esto es como un bucle, siempre estamos discutiendo sobre el sexo de los ángeles y somos incapaces de ponernos a trabajar. Es cierto que hay distintas sensibilidades en la Isla y se ofrecen distintos caminos para hacer más competitiva la Isla de Lanzarote desde el punto de vista turístico, pero yo creo que no estamos muy lejos unos y otros. Quiero decir, en Lanzarote lo que sí es conveniente es reforzar la oferta que tenemos. Es decir, somos un buen destino de sol y playa, pero buenos destinos de sol y playa los hay a montones, con lo cual difícilmente podemos atraer a los turistas. Lo que podemos hacer es sin bajar los precios intentar ofrecer más y ofrecer más es evidentemente ofrecerle algo más que lo que es la opción de pasar sus vacaciones en la playa tumbado al sol o ver los Centros Turísticos, que no cabe duda de que son una opción estrella que tiene Lanzarote. Pero habría que darle la oportunidad de experimentar, de tener experiencia con los turistas que nos visitan. Evidentemente un turista que ha visto los Jameos del Agua una vez, el próximo año no lo va a ver. Somos una Isla que estamos rodeados de mar por todas partes, que tenemos unas opciones deportivas fantásticas por la climatología y orografía que tenemos y tenemos que vincularnos más a las actividades acuáticas que aparte a su vez se compaginan también con un turista de mayor poder adquisitivo al que nos visita actualmente.

-Eso es verdad. El propio director gerente del Patronato, Héctor Fernández, decía que los problemas del turismo en Lanzarote están aquí, no en destino.

-Si, si, yo creo que Héctor es una opinión muy autorizada, conoce mucho del turismo y yo creo que ha sido una bendición poder contar con Héctor ahora en la Sociedad de Promoción y en el Patronato y comparto esa opinión, porque como digo, aquí llevamos muchísimos años discutiendo sobre algo que no tiene sentido discutir. Yo creo que hay que ponerse manos a la obra. Evidentemente no se pretende desvirtuar el carácter general de la Isla porque todo el mundo lo valoramos, pero eso no significa que no sea compatible con determinadas actuaciones.

-¿Entonces a pesar de la actual situación, usted se muestra prudentemente optimista?

-No, lo que pasa que estamos en un momento en que la gente le empieza a ver las orejas al lobo. Creo que estamos tomando conciencia, que los políticos están tomando conciencia y que yo creo que se están creando las herramientas necesarias para poder corregir esto.

“Estamos tratando de sensibilizar a las administraciones para que se centren en renovar...
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