viernes. 29.03.2024
José Luis Aparicio, gerente de los Servicios Sanitarios de Lanzarote

"El miedo es algo libre, pero con la vacuna del COVID no es racional porque es la única herramienta para vencer esta epidemia"

"No hay ningún motivo para tener miedo a la vacuna. Yo no me he vacunado de los primeros porque no soy residente en una residencia ni profesional sanitario que trabaje en primera línea, pero tengo claro que yo mismo, mi mujer y mis hijos nos vamos a vacunar. Son seguras y son muy eficaces"

 

 

 

Visita-Hospital-Dr-José-Molina-Orosa-Lanzarote

- "Las vacunas hasta dentro de un mes o mes y pico no empezarán a funcionar a pleno rendimiento y además la cantidad de población vacunada aún no será suficiente hasta dentro de tres o cuatro meses, hasta marzo o abril al menos, para poder relajar las medidas, que creo, personalmente, que algunas se irán relajando"

- "En las dos últimas semanas Lanzarote ha tenido un repunte de casos pero que no es preocupante por ahora, y que tiene que ver con el puente de principios de diciembre. Desde el punto de vista epidemiológico y de riesgo, las Navidades son mucho más peligrosas que el propio puente de diciembre"

- "Ahora mismo, incluso con las vacunas que ya estamos administrando, hay que mantener todavía las medidas de seguridad y la distancia, junto a los geles. Nos ha ido bien así hasta la fecha pero todo dependerá de la prudencia y de que seamos todos responsables"

- "Hemos reducido la lista quirúrgica en un 50 por ciento y la demora ya la tenemos otra vez por debajo de los niveles de antes del COVID, que supuso dos meses sin actividad quirúrgica. No hemos podido arreglar las esperas de especialidades pero estamos haciendo acopio de profesionales. En muchas especialidades estamos bien, pero hay una merma en departamentos como Trauma, con solo 3 traumatólogos para toda la Isla que no dan abasto"

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El gerente de los Servicios Sanitarios de Lanzarote, José Luis Aparicio, explica en la entrevista concedida esta semana al programa 'A buena hora' de Crónicas Radio-COPE Lanzarote que no hay ningún motivo para rechazar las vacunas de la COVID-19 que comenzaron a llegar y a administrarse en Canarias el pasado domingo. De hecho, asegura que si pudiera, sería de los primeros en ponérsela. Aparicio explica el orden establecido para la administración de las vacunas que, garantiza, cuentan con todas las bendiciones de las sociedades científicas más prestigiosas y que se han hallado en poco tiempo por la alta tecnología aplicada para ello, el interés de Salud Pública por que no haya más muertes por la pandemia y, reconoce, "también por los pingües beneficios para quien la consiguiera antes". El gerente del Hospital Molina Orosa aporta datos sobre el recorte en los tiempos de espera quirúrgicas y las excesivas demoras en las listas de espera de consultas y especialidades, con Traumatología y Dermatología como principales talones de Aquiles en la Isla. Anuncia nuevos proyectos para 2021 para Lanzarote, vuelve a reclamar prudencia a la población y confía en que las próximas navidades podamos celebrarlas "con la máxima normalidad".

-¿Qué tal están yendo las navidades?

- Bueno, tranquilos, en familia. El 31 lo pasaré con mi mujer, un mano a mano, con nuestros langostinos. Son unas navidades raras, pero esperemos que sean las últimas así, y que éstas sean un paréntesis y que las próximas tengamos una normalidad plena.

-Sí, como si esto no hubiera pasado nunca, ¿no?

-Hombre va a ser muy difícil de olvidar, sobre todo para las personas que han perdido a sus seres queridos, pero las sociedades tienen poca memoria y probablemente de aquí a 3 ó 4 años hasta nos reiremos de algunas cosas; de otras muchas no, obviamente, porque es imposible.

-La última vez que hablamos nos dijo que había que tener fe en la vacuna y mucha gente no se lo creyó, pero la vacuna llegó, también a Lanzarote. Ya el domingo empezó a administrársele a algunas personas, ¿verdad?

- Sí efectivamente, el mismo domingo llegó la vacuna y administramos las 65 dosis que nos llegaron, las 65 que administramos. Entre hoy y mañana nos llegarán otras 260 dosis más para completar la los residentes de las residencias de mayores. El siguiente objetivo será el personal de estas residencias y ya con eso ya es un buen alivio, es un salvavida porque, como saben, uno de los principales problemas del COVID es que se meta en una residencia. No me gusta la expresión, pero arma una escabechina terrible, así que si tenemos las residencias cubiertas todo lo demás será más sencillo. 

- Porque, para que la gente nos entienda, si entra el COVID, aunque haya vacunas, no tienen ningún efecto, ¿no?

-El efecto máximo de las vacunas llega a partir de las tres o cuatro semanas de administrarlas, es justo después de la segunda dosis. Las vacunas no son digitales. No es ahora sí y mañana no, sino que poco a poco vamos creando anticuerpos y el cuerpo alcanza niveles protectores a partir de la tercera o cuarta semana de la primera dosis, cuando coincide justo con la segunda dosis. Entonces, aunque pronto tengamos a todos los residentes de las residencias vacunados, a los de Haría y a los del Doctor Guzmán, en Nazaret, ellos hasta dentro de un mes más o menos no podrán decir que están inmunizados. 

-Y lo siguiente es el personal sanitario, ¿no?

-El Ministerio de Sanidad, junto con las autonomías emitió un documento de estrategia que establece tres fases. La primera se desarrolla hasta marzo y pasa un poco lo mismo que con las PCR al comienzo de la epidemia, cuando no había para tanta gente. Ahora mismo, como la cantidad de vacunas es limitada, se orientan a colectivos vulnerables. Así, ahora hemos empezado con los residentes y quienes trabajan en residencias, luego a sanitarios que trabajan en primera línea, que no es mi caso pues no trabajo directamente con pacientes con COVID. Después les tocará al resto de sanitarios, donde sí estaremos ya incluidos, y finalmente, a personas dependientes que vivan con sus familias, que no estén institucionalizados, y sus familias también, sus cuidadores. Eso será a partir de marzo. La segunda fase dura hasta junio pero el Ministerio todavía no ha concretado exactamente cómo se hará. Pero imaginamos que se incluirán a personas mayores de 65 años, personas con diabetes y vulnerables, pero el Ministerio no ha publicado todavía cómo quiere que lo hagamos.

- Por cierto, doctor, ¿usted entiende que haya gente que tenga miedo a vacunarse?

-A ver, el miedo es algo libre, pero el miedo casi nunca es racional y en este caso concreto no es racional. No hay ningún motivo para ello. Yo no he vacunado de los primeros porque no soy residente en una residencia. No sería adecuado. Tampoco soy profesional sanitario que trabaje en primera línea, pero tengo claro que yo mismo, mi mujer y mis hijos nos vamos a vacunar porque no hay ningún problema. Las vacunas son seguras y son muy eficaces. De hecho, son la única herramienta de vencer esta epidemia.  No hay otra. Las PCR, los anticuerpos, … son formas de contener el agente, para que no se propague, pero no permiten darle un mazazo al virus en la cabeza. Las vacunas llevan en la ciencia hace muchos años y son la única herramienta que han conseguido erradicar enfermedades como la viruela. Ahora están a punto también de erradicar la polio. Es la única herramienta que es capaz de erradicar enfermedades; las otras vías, como los antibióticos, son capaces de curar a una persona en concreto, pero a la sociedad en su conjunto. Estas vacunas han tenido un desarrollo que ha sido rápido porque la tecnología de hoy es muy diferente a la que se empleaba para las vacunas anteriores, porque también había un interés obvio en sacarla rápido y también es cierto que había intereses económicos. ¿Por qué no decirlo? Pues el primero que la sacara obtendría pingües beneficios. Pero sobre todo ha sido porque esta tecnología es mucho más rápida que la anterior, pero se han seguido todos los procesos y miles de personas se han prestado voluntarias para probarlas y ver si había efectos secundarios o no. Las agencias de medicamento, la FDA, la Agencia de Medicamentos Española, y también la Agencia Europea, no son agencias políticas, sino técnicas, y muy prestigiosas, y si sus científicos consideran, estudiando toda la documentación de la vacuna, del nuevo medicamento, que es segura y apta, la autorizan. Y si no, no. Y no se cortan un pelo. O sea que tienen el aval de sociedades científicas importantes y serias. Insisto, el miedo es libre, cada uno puede tener miedo a lo que quiera. Hay quien tiene miedo a la oscuridad, pero en este caso no es racional, no hay motivos para tener miedo. Insisto, yo sería el primero en vacunarme si no fuera porque no puedo porque hay otras personas que la necesitan más que yo.

- Hay que tener fe en la Medicina. Por cierto, teníamos el temor de que diciembre pudiera ser un mes similar al de agosto. De momento los datos no van tan mal como a finales del último verano pero habrá que seguir tomando medidas y tener mucha precaución, ¿verdad?

- Sí, en las dos últimas semanas hemos visto un pequeño repunte en el número de casos, que no es preocupante de momento, pero sí que ha habido un pequeño repunte que probablemente tenga que ver con el puente de principios de diciembre, porque además coinciden las fechas. Es un repunte que ha llegado justo tras dos o tres semanas de ese puente. Ahora tenemos las navidades que desde el punto de vista epidemiológico y de riesgo, son mucho más peligrosas que el propio puente de diciembre. Son más días, tenemos el Fin de año, ha pasado la Nochebuena y son fechas que se prestan más al roce, al cariño, al amor a los seres queridos, pero vamos a ver qué pasa de aquí a 15 días o un mes. Ahora mismo, incluso con las vacunas que ya estamos administrando, hay que mantener todavía las medidas de seguridad y la distancia, junto a los geles. Nos ha ido bien así hasta la fecha. Insisto en la prudencia porque igual la semana que viene tenemos que decir exactamente lo contrario que hoy. Eso dependerá de cómo de responsables seamos todos y de que mantengamos o no la distancia de seguridad. Las vacunas hasta dentro de un mes o mes y pico no empezarán a funcionar a pleno rendimiento y además la cantidad de población vacunada aún no será suficiente hasta dentro de tres o cuatro meses, hasta marzo o abril al menos, para poder relajar las medidas. Pero creo, y esto es una opinión personal, que las medidas pronto se irán relajando. Las medidas como el uso de la mascarilla durarán más, pero otras puede que se vayan relajando pronto. Todo eso dependerá de la evolución. 

- Bien. Además, desde Sanidad han hecho seguimiento, dentro de la estrategia de detección precoz, a algunos institutos como el de San Bartolomé. ¿Se han hecho más cribados estos días?

- Sí, los hemos hecho en tres institutos. Hemos realizado las pruebas en tres institutos y esta mañana saldrán los resultados de la última tanda del último instituto, pero hasta la fecha son todos negativos en todos los institutos. Es muy frustrante, las cosas cómo son, y ya saben que soy muy sincero, porque hemos desplegado un dispositivo muy grande. En el caso de dos institutos de Arrecife, Altasvista y Zonzamas,  los alumnos han sido sometidos a dichas pruebas a través del sistema COVID-Auto porque ya habían empezado las vacaciones y ya no podíamos contar con que estuviera el alumnado en los institutos. Pero en el caso del primer instituto [el IEs de San Bartolomé] las pruebas se realizaron in situ, con todo el despliegue que ello conlleva y el esfuerzo de todo el equipo, que está agotado pues lleva desde febrero o marzo dándolo todo; tanto el equipo de rastreo como el de laboratorio. Hasta la fecha, a falta de la última tanda que conoceremos ahora por la mañana, no hay ningún caso. Y esto tiene su explicación: lo que detecta el cribado son restos de ARN viral en agua fecales, pero no se sabe si eso corresponde a virus muertos o a virus vivos, a enfermos, a portadores sanos o a personas curadas, pacientes curados que, como nos pasó al principio de la pandemia, seguían dando esos resultados a pesar de estar curados. Esto hace que los busquemos desesperadamente con rastreos bastante exhaustivos, pero no aparece ningún caso activo porque realmente no los hay: lo que estamos viendo es a alguien que ya está curado pero que dejó ese rastro en las aguas fecales de ese instituto. Eso es lo que ha ocurrido. Es frustrante porque no ves a primera vista el fruto del rastreo, pero es muy alentador que tres institutos completos estén limpios, limpios, como los chorros del oro, y es muy tranquilizador.

- Sanidad también mirará el gasto de estos rastreos, ¿no? Porque serán costosos estos cribados, ¿no?

- Sí, esto habrá que pagarlo tarde o temprano. Esto no es gratis, efectivamente, pero a fecha de hoy ninguna gerencia ha recibido instrucciones en ese sentido, de tener cuidado con la economía en lo relacionado con el COVID. En otras cosas obviamente sí, hay que tener cuidado porque al final es dinero público de todos. Con esto también, pero si hay que hacer un cribado, no hay ningún problema aunque nos gastemos las PCR que sean. Ahora mismo e interés de Salud Pública es que no fallezca nadie más.  El interés público justifica todo esto. Lo que sí nos piden es que tengamos todas las cuentas claras para que luego, cuando se vaya a Europa o adonde sea, se pueda ver qué dinero se ha gastado en COVID y qué otras partidas se han empleado en otros asuntos. Hasta la fecha el tema económico sigue siendo un problema, y no solo para nosotros, sino también para toda la sociedad, para la gente que ha perdido su trabajo y quienes hayan cerrado su empresa. Pero hasta ahora la limitación económica no es un problema. Ya a este partido le queda poco y esperamos que podamos terminarlo con la misma solvencia económica con la que comenzamos todo esto.

- Hablando de economía, ha sido un año difícil pero también un año de logros, como el inicio de las obras del nuevo búnker de radioterapia en Lanzarote. Suponemos que siguen pendientes de mejorar las listas de espera para especialidades como dermatología. Son objetivos para 2021, ¿verdad?

- Efectivamente, el 2020 ha sido un año robado. Como dice la canción de Jaquín Sabina de ‘quién me ha robado el mes de abril’, pues a nosotros nos han robado el año entero. Pero no todo ha sido COVID y también hemos hecho muchos avances mientras. Por ejemplo, este año hemos puesto en marcha la acción de nódulos trioideos por radiofrecuencia, que es tecnología puntera. Hemos mejorado también la Unidad del Dolor, con radiofrecuencia espinal, que también es algo puntero, lo más puntero en Canarias y también a nivel nacional. Hemos comprado el lito-inductor láser para poder hacer aquí cálculos renales con láser, que son más rápidos, más sencillos y más seguros, gracias a la nemotécnica, una de las técnicas hoy en día más aceptadas. También hemos estrenado hace poco la colonoscopia virtual, para poder hacer colonoscopias sin tener que meter el tubo y poder sacar así biopsias. También contamos con nirvanas, con puestos operativos ya este año. El nirvana es un aparato para hacer rehabilitación virtual, jugando, con un ordenador y una pantalla y un detector de movimientos para enfermedades degenerativas. A nivel de organización también hemos puesto este año en marcha el registro de manifestaciones anticipadas de voluntad. También hemos reforzado y apostado por la transparencia y el trabajo en prensa y las redes sociales. Se han hecho varias cosas. Para el año que viene hay una lista grande de deseos y proyectos en los que llevamos ya trabajando algunas semanas. Acabar con el bunker de radioterapia, comenzar con la Unidad de Hemodinámica; en cuanto al nuevo Centro de Salud de Argana, el Ayuntamiento d Arrecife ya ha explicado que el técnico al que le habían encargado el cambio de uso del solar de Argana ya lo había entregado, con lo cual espero que en los próximos plenos, o cuando Arrecife pueda, lo aprobarán y entonces comenzaremos nosotros con el proyecto. También tenemos previstos proyectos para el Hospital insular. Hay una partida para el proyecto en los Presupuestos, y también queremos construir un edificio polivalente de 60 camas al lado del Hospital, para que sirva para tener camas auxiliares por su hay otra pandemia y para que no ocurra como esta vez, que tuvimos que parar la producción y cambiar las plantas de cirugía y los quirófanos por el COVID. También estamos trabajando con el proyecto del Centro de Salud para Playa Honda y con el Centro de Salud de Yaiza, que hay que remodelarlo, para lo que también hay presupuestos. Tenemos proyectos también que revisar y lo bueno es que hay proyectos e ideas que queremos desarrollar.

- Sí, ya vemos, ya. Habrá oyentes que se estarán estresando al escucharle.

- Sí. Y yo el primero … (se ríen].

En cuanto a las listas de espera, hemos reducido la lista de espera quirúrgica. Hemos reducido la lista en un 50 por ciento y la demora ya la tenemos otra vez por debajo de los niveles de antes del COVID, que supuso dos meses sin actividad quirúrgica, pero ya la tenemos por debajo. La que no hemos conseguido arreglar, siendo honestos y honrados, es la lista de espera para las consultas. Ahí, efectivamente, tenemos algunos tapones pero estamos tratando de buscar soluciones a eso.

-En el caso de Traumatología, ¿el problema es que no hay suficientes profesionales para atender tantos casos?

- Hubo varios problemas que ya hemos resuelto. Uno de ellos era ese, efectivamente, pero a principios de año invertimos mucho dinero para poder contratar a profesionales, traumatólogos, anestesistas, para darle agilidad a las consultas. Otro problema fue el de materiales pues a mitad o finales de año se nos averió un aparato caro y tuvimos que comprar otro sin que estuviera presupuestado. Este aparato no llegó a desarrollar la vida promedia del resto de aparatos. Al no tener repuestos, tuvimos que esperar y abordar otras intervenciones que no requirieran ese aparato. Estos han sido los mayores problemas, pero ya los hemos resuelto. Ahora mismo, por ejemplo, de 5 quirófanos por semana hemos pasado a 12 por semana, por los nuevos profesionales y por el nuevo material que hemos comprado. Todo esto después de poder volver a operar tras el COVID. Eso ha hecho que ya haya bajado bastante la lista de espera de trauma. Estamos haciendo acopio de profesionales y en muchas especialidades estamos bien, pero hay una merma en departamentos como Trauma, con solo 3 traumatólogos para toda la Isla, nada más, y no dan abasto. Trabajan como negros, trabajan mucho y muy bien, pero la demanda es muy superior. Los traumatólogos son muy bienvenidos pero eso depende del mercado y el mercado nosotros no lo establecemos, sino que nos viene dado.

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