viernes. 29.03.2024
Los técnicos del Ayuntamiento se niegan a conceder permisos de apertura por defectos, de los que también dejan constancia vecinos del complejo

Arrecife requiere a la constructora de Jardín de Triana para que subsane anomalías detectadas en unos locales

Antonio Hernández espera un informe jurídico para ver si es factible revocarle a Salatín la licencia de primera ocupación e instarla a que asuma los costes de reparación. El concejal de Urbanismo asegura que al Ayuntamiento le corresponden varios de esos locales y no descarta reclamarlos en los tribunales

Antonio Hernández, concejal de Urbanismo de Arrecife, explicó que el estudio encargado por el Ayuntamiento para ver si es posible revocar la licencia de primera ocupación de Jardín de Triana obedece a que hay unos locales del complejo que se levantaron en terrenos del Consistorio sin que se hubiese hecho recepción alguna de los mismos. “La obra posee algunas anomalías, como las baldosas de los pasillos que no son antideslizantes”, comentó Hernández en Agustín Acosta Radio. Es más, el concejal pilista dio cuenta de varias denuncias de los vecinos que han sufrido caídas por este imperfecto. La idea del Ayuntamiento es revocar la licencia y que sea la propiedad la que asuma el coste de las reparaciones pertinentes. Según Hernández, la licencia de primera ocupación fue otorgada por silencio administrativo.

Los técnicos se niegan a dar el aval

El edil destacó que los técnicos del Ayuntamiento se están negando a firmar los permisos de apertura de los locales porque entienden que existen anomalías que deben ser corregidas. “Como no se pueden aceptar este tipo de errores, el Ayuntamiento apoya a los técnicos y es por lo que hay que buscar una solución”, anotó Hernández. Sin embargo, el problema que asalta es que la empresa que hizo la obra, Salatín, ha vendido parte de la propiedad y pasa de todo, “dejándole ese muerto al Ayuntamiento”. En definitiva, la Administración local pretende que la promotora inmobiliaria asuma la responsabilidad de subsanar las deficiencias de construcción. “Esperamos que el informe jurídico sea favorable para buscarle una solución”, agregó el responsable de Urbanismo. Además de provocar el cambio del pavimento, entre otros arreglos, el Ayuntamiento pretende quedarse con los locales que cree le pertenecen y que afortunadamente no han sido vendidos. “Hay un transformador que está situado en un sitio inadecuado, ya que es paso de niños y adultos”, señaló Hernández como ejemplo del desaguisado.

Ya fue denunciado

Hernández cree recordar que la licencia fue concedida en el mes de enero, cuando el Ayuntamiento estaba presidido por María Isabel Déniz, e incluso rememora que varios fueron los grupos políticos que denunciaron lo que estaba aconteciendo. “El PIL denunció el tema y al final un concejal hizo la recepción de la obra”. Hernández no descarta ir a los tribunales para reclamar los derechos del Ayuntamientos, que no son otros que la propiedad de alguno de los locales en cuestión. El concejal dijo que estas son las consecuencias de no caminar por los caminos de la legalidad y de no hacer las cosas como se deben hacer. Hernández espera no encontrarse con otro ‘marrón' parecido. El concejal del PIL, una vez que tuvo conocimiento de la situación por parte de los técnicos, decidió llevar el asunto a comisión de gobierno y fue allí en donde se adoptó la decisión de encargar el estudio con miras a revocar la licencia. Lo que menos desea el Ayuntamiento es que sean los vecinos los que tengan que pagar la inversión que conlleva la reparación, “cuando entendemos que es la propia constructora la que asuma la responsabilidad”.

Arrecife requiere a la constructora de Jardín de Triana para que subsane anomalías...
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