sábado. 20.04.2024

Nos cuentan algo que no podemos creer, de verdad. Parece ser que Chayancito, íntimo amigo del artista de nombre parecido, se fue del polémico concierto -sí, hombre, ese que fue patrocinado por el Cabildo, por doña Rita y por varios ayuntamientos con la compra de entradas; sí, hombre, esas mismas instituciones que luego no tienen dinero para otras cosas menos importantes como poner una cocina en un colegio o celebrar los Autos Sacramentales en Tinajo- en un Seiscientos, coche mítico donde los haya. No tuvo la suerte de la estrella puertorriqueña, a la que creemos, porque no estuvimos allí, que le prepararon otro tipo de transporte algo más lujoso. Y que conste que no tenemos nada contra el Seiscientos. Es un número que nos encanta. Por cierto, y sin que tenga nada que ver con lo anterior, o sí. ¿Explicará alguna vez el señor Espino por qué convocó a una segunda reunión a los medios para entregar unos datos que la empresa Perfiles había dicho que no eran válidos, explicará alguna vez el señor Espino por qué no se va a hacer ese segundo estudio en el que se iba a profundizar con detalle sobre la programación local de las emisoras de radio en Lanzarote, explicará alguna vez el señor Espino por qué entregó unas cifras de audiencia que no se habían dado a conocer en la primera reunión? Además, ¿por qué algún medio de comunicación no dijo ni pío sobre el estudio tras hacerse la presentación oficial del estudio, por qué sus ahora representantes no fueron ni siquiera a conocer a la gente de Perfiles, por qué incluso hicieron pública su queja sobre el sistema empleado, por qué ahora sacan pecho con los nuevos datos que se ha sacado de la manga el señor Espino? Como diría nuestro añorado Papuchi, “raro, raro, raro...”

Y CHAYANCITO SE FUE EN UN SEISCIENTOS
Comentarios