El presidente del Gobierno regional, Paulino Rivero, y el de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, subrayaron este lunes en Valencia que "exigirán" al Gobierno central que reconozca el incremento poblacional de los últimos siete años en el nuevo modelo de financiación autonómica, ya que en la actualidad son "las dos peor financiadas" por habitante, con una diferencia de unos 700 euros respecto a la media estatal. Camps y Rivero encabezaron las dos delegaciones de sus respectivos ejecutivos autonómicos que se reunieron en la capita levantina para tratar temas de interés común. Estuvieron acompañados por los dos vicepresidentes económicos, Gerardo Camps y José Manuel Soria; y los responsables de Asuntos Sociales, Rafael Blasco e Inés Rojas.
Más dinero
"El Estado debe poner sobre la mesa el dinero que corresponde a cada Comunidad por su población", manifestó Camps, al tiempo que destacó que son las autonomías "las que prestan servicios a los ciudadanos" y que si ha crecido la población de algunas de ellas es por "las oportunidades" generadas gracias a su dinamismo económico. No obstante, Paulino Rivero evitó decir que Canarias fuese a realizar ningún tipo de "frentismo" con otras Comunidades en la negociación de la financiación autonómica, pues "por lo que estamos es por construir un sistema justo más que por crear un frente". Asimismo, agregó que Canarias acudirá a las reuniones con el vicepresidente Solbes sobre esta materia "con espíritu constructivo" y que éste ya ha demostrado "buena disposición" sobre la materia.
Cesión de impuestos
Por otra parte, Camps, eludió por dos veces durante la rueda de prensa decir si su Comunidad Autónoma iba a sumarse a las demandas de Catalunya de incrementar el porcentaje de impuestos cedidos a las Comunidades Autónomas -y que en casos como el IVA ya están totalmente en manos de Canarias a través del IGIC- mediante una reforma más profunda del sistema. Sin embargo, sí dio a entender que esa posibilidad que Valencia ha contemplado en más de una ocasión -por ser de las que tienen un PIB más elevado de España- no tenía por qué perjudicar la solidaridad. Ante el debate que está en ciernes, Rivero, por su parte, dijo que no veía ningún inconveniente en que se hagan oficiales las balanzas fiscales de las distintas Comunidades, pero que eso "no tiene por qué suponer ventajas para nadie", al tiempo que insistió en que el nuevo sistema "debe basarse en la cohesión territorial".
Reparto "equilibrado"
En este sentido, Rivero destacó que si los inmigrantes han aportado 23.000 millones de euros a la Caja Común de la Seguridad Social en los últimos años, sería "coherente" una redistribución de los ingresos del Estado en función del crecimiento poblacional y que ese sistema "equilibrado, justo y solidario" no tendría que "ir en contra" de ninguna Comunidad. Así señaló que junto a la ponderación de variables como la dispersión o el envejecimiento de población, y la insularidad y lejanía en el caso de Canarias, y la revisión de los Fondos de Suficiencia o de Cohesión Territorial, la actualización del censo debería ser "de sentido común" para todas las Comunidades y que con ello "no se trata de mejorar a unos y de restárselo a otros".
