Tras tres años de quejas infructuosas, una vecina del centro de Arrecife ha vuelto a denunciar este martes en Crónicas Radio-Cope Lanzarote las concentraciones que se producen cada fin de semana en el campo de fútbol que está situado frente al Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Adolfo Tophan, reuniones multitudinarias sin ningún tipo de regulación y en las que se celebran partidos de baseball, pero donde, además, según esta residente, "se organizan asaderos, se venden salchichas a los transeúntes y a quienes acuden allí a pasar el día, y donde la gente hace sus necesidades a la vista de todos".
La zona en cuestión, donde antes entrenaba el Torrelavega, se ha convertido, según el testimonio de esta vecina, que lleva más de un año quejándose, en un lugar para "botellones y escándalos todos los fines de semana". "Hacen botellón, se juntan unos 50 ó 60 coches cada fin de semana y no podemos ni abrir las ventanas por el ruido y el humo que hay".
Al respecto, la denunciante critica el agravio comparativo que supone para los vecinos de Arrecife que el Ayuntamiento capitalino haya cerrado estos días las instalaciones deportivas que gestiona Lude mientras no parece aplicar la ley con tanta perseverancia en este caso. "No entiendo cómo aplican la normativa tan a rajatabla en el caso del polideportivo y para otras se la saltan a la torera", sostiene la afectada. "¿Eso no lo cierran? ¿Eso sí cumple con las condiciones para estar en funcionamiento? Hasta mi hijo de 6 años me pregunta cómo cierran el campo de fútbol y él no puede ir a entrenar, mientras este campo, en el centro de Arrecife, sigue abierto", lamenta.
Versión del Ayuntamiento
Por su parte, en el tiempo de tertulia radiofónica donde se producía la denuncia, el concejal de Limpieza de Arrecife, Víctor Sanginés, ha dado la razón a esta vecina, pero explicaba el trabajo que el Ayuntamiento ha realizado en relación a este caso. "Estuvimos hablando con esta señora y estuvimos hace unos días limpiando esa zona, donde sacamos un par de toneladas. Desgraciadamente el pasado lunes me llamaron de nuevo y me informaron de que el área estaba hecho un desastre otra vez", relata Sanginés. Tras advertir al propietario del solar de su obligación de vallar la zona, el Ayuntamiento anuncia que tendrá que abrir expediente.
El concejal explica que "hubo que cerrar una puerta que tuvo que ser derribada y ya lleva tiempo así, algunos años, con una situación que está empezando ya a causar molestias".
El Ayuntamiento advierte al propietario del solar de su obligación de vallar la zona. "La Policía ha ido también y espero que el Ayuntamiento pueda ponerse en contacto con esta propiedad para que la valle o, en su defecto, será el Ayuntamiento el que tenga que vallarlo y le pasará el coste a los propietarios. Allí se están haciendo actividades que molestan a muchísimas personas y lo cierto es que realmente muchos no van a hacer deporte allí. Esta señora tiene toda la razón y algún sábado por la tarde he ido y se me han puesto los pelos de punta, ha asegurado el concejal.
