Estos días ha comenzado desde Lanzarote una campaña de recogida de firmas para solicitar el dragado del Charco de Los Clicos, un entorno natural y paisajístico único en el mundo que, situado en el municipio de Yaiza, se encuentra en avanzado estado de deterioro.
A través de www.change.org, portal donde puede rubricarse el apoyo a esta petición, se describe cómo el Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno de España ha dejado fuera de sus Presupuestos para 2013 la financiación del proyecto de recuperación del Charco de los Clicos, en el sur de Lanzarote.
"Los informes y contrainformes cruzados entre las distintas administraciones, para establecer las condiciones del dragado de la laguna verde, han dilatado durante más de una década una intervención que se presenta hoy como urgente y prioritaria, si queremos salvaguardar el espacio", sostienen los convocantes de la campaña.
De forma paralela a la degradación del Charco de Los Ciclos, explican, tanto su entorno como los accesos se han visto afectados por el paso incontrolado de visitantes y por la total ausencia de mantenimiento. "A día de hoy, la carretera está cerrada por derrumbe y el paso por la ladera contraria resulta inaccesible para muchas personas", señalan.
La laguna verde, -que debe su coloración al alga que la habita, y que se localiza en el interior de un cráter volcánico en la costa sureña de Lanzarote-, es única en su género y supone un atractivo turístico de primer orden, sin taquillas ni intervención humana.
Los promotores de esta iniciativa recuerdan que cineastas como Eric Rommer o Pedro Almodóvar han capturado su mágica atmósfera, que ha dado la vuelta al mundo en películas como “Hace un millón de años”, “El rayo verde” o “Los abrazos rotos”.
Por todo ello, exigen a todas las administraciones implicadas, tanto al Cabildo de Lanzarote, como al Ayuntamiento de Yaiza, al Gobierno de Canarias y al propio Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno de España que trabajen para la recuperación del Charco de Los Clicos y accesos, un proyecto que data de la época cuando José María Aznar era aún presidente del Ejecutivo central, para que acometan con carácter inmediato el urgente dragado de la laguna, advirtiéndoles de que "su dejación pone en riesgo de desaparición un espacio natural de enorme valor y extraordinaria belleza".
