El jefe de la Oficina técnica de Arrecife, Rafael Arrocha, que fue detenido el año pasado dentro de la operación Unión y este lunes de nuevo en la operación Jable, se reincorporó a su puesto de trabajo como responsable de la Oficina técnica tras un periodo de baja laboral. Es la segunda vez que lo detienen en un año por presuntos delitos derivados de su cargo.
Según recoge la agencia Acn Press, a pesar de estar imputado por un delito de revelación de secretos en su ejercicio de funcionario municipal, Arrocha continuó al frente de las cuestiones técnicas del Ayuntamiento. El anterior alcalde Enrique Pérez Parrilla (PSOE), firmó por decreto la sustitución de Arrocha al frente de la Oficina técnica en junio del año pasado, pero después volvió a recuperar su puesto en octubre, tras una baja laboral.
En la actualidad seguía ejerciendo sus funciones de jefe en la Oficina técnica. Arrocha era militante del PSOE y el partido inició su expediente de expulsión al día siguiente de su primera detención. En el Ayuntamiento, sin embargo, mantuvo su puesto, a pesar de que es un puesto que se concede de forma discrecional por la alcaldía.
La Guardia Civil, en la primera oleada de la operación Unión, le relacionaba con el amaño del Plan General de Ordenación Urbana. Se le acusa a de haber facilitado a Dimas Martín, que era ajeno al Ayuntamiento, una copia del pliego de condiciones del Plan, por orden de Ubaldo Becerra. Tenía una cita concertada con Martín en el Hotel Beatriz.
Arrocha es jefe de la Oficina técnica desde el año 2002. Fue nombrado por la anterior alcaldesa, María Isabel Déniz, que también está detenida desde este lunes. Arrocha, además, era administrador de una sociedad dedicada a redactar proyectos, Proyectos Gamma 3, junto a otros dos detenidos, Manuel Spínola y Julio Romero.
