miércoles. 24.04.2024

El ministro Soria está en su papel (de malo), pero el PSOE lleva disfraz, y los que abominamos del carnaval por lo que tiene de impostura y de manejo político de las masas con ese cómplice necesario que es el infraperiodismo vivacartagenero seguiremos señalando la careta del carota como el que predicaba en el desierto.

Donde José Manuel Soria (PP) ve futuros pozos de petróleo, el falsario PSOE que nos avergüenza a todos los socialistas que no le hemos sacado partido económico al Partido ve un filón populista para agenciarse simpatías electorales en estos tiempos de perdición a los que el propio PSOE nos ha llevado a todos, como es triste fama. ¿Ahora resulta que el Partido Socialista ha estado siempre en contra de la explotación petrolífera en aguas canarias? ¿De verdad sale tan barato y fácil insultar la memoria y la inteligencia de todos los canarios? Pues vamos a ponérselo un poco complicado a los que van de listillos o enterados de la caja del agua y tienen siempre un mensaje distinto y distante según hablen en un sitio u otro, antes o ahora.

Titular del diario ABC del pasado año, en vísperas del carnaval de 2011: “José Miguel Pérez ve en el petróleo una gran oportunidad para las islas”. El secretario general y candidato del PSC a la presidencia del Gobierno regional manifestaba abiertamente que la postura contraria de su partido en el pasado “fue un error”. Algunos aprovechaban la inminencia carnavalera para quitarse las caretas… aunque han vuelto a ponerse el disfraz en este carnaval de 2012, visto lo visto y escuchado. Que no pare la carnavalada.

Ya hemos venido avisando desde hace años en esta misma tribuna que en esta pésima película de petroplátanos, petropejines y pijoprogres que todos van de farol. Pero el que ha contado las trolas más gordas es el PSOE, con diferencia. La hemeroteca, esa gran enemiga del político incoherente y embustero, no me dejará por mentiroso. ¿Recuerdan la recurrente serpiente de verano de 2010?: “El Gobierno de Canarias no cierra totalmente la puerta a la realización de prospecciones petrolíferas en las costas canarias”. Pero sin relajos, como se precipitó a terciar en el envite Paulino Rivero: “No vamos a permitirlo. Primero queremos el reconocimiento de las aguas, que las aguas sean canarias, y a partir de ahí hablamos”. Hombre tenemos. Ojo al dato: “Aguas canarias”, como las de Firgas o las que hace Inalsa. Un respetito ahí al agua con denominación de origen. Pocas bromas con eso. ¿Recuerdan que José Luis Rodríguez El Puma (Zapatero, perdón) le vendió la moto y la mula a Paulino en forma de unas aguas canarias que convertían al archipiélago, sobre el papel (mojado) en la región más grande de España y parte del extranjero? ¿En qué quedó aquella promesa que tanto vendió CC por aquí abajo? Pues eso: en humo. Agua de borrajas, a lo sumo.

Especificó hace apenas unos meses Rivero, que se puso torero (o gallito, porque en Canarias los toros están mal vistos), que “si entregamos un cheque en blanco para que Repsol se lucre en aguas canarias y que eso sea sólo para negocio de los privados o para beneficios que no llegarán a los canarios, la respuesta es rotundamente no”. O sea, sí pero no. Igualito que el PSOE, pero a la inversa. El Gobierno no descarta buscar petróleo, por si lo hubiera o hubiese, pero el presidente del mismo Ejecutivo avisa y advierte que tampoco hay que pasarse. Más claro, el agua clara. Más oscuro, imposible. El que lo entienda que lo compre (o lo vote), como al burro del afamado cuento.

Ya por aquel entonces descubría el desnortado José Miguel Pérez, que sigue siendo secretario general de un PSOE canario que va literalmente proa al marisco, la engañifa socialista que todos nos olíamos de antemano. Se desenmascaraba definitivamente el discurso cínico del PSOE con respecto a la explotación petrolífera en las costas conejeras y majoreras. Saltaba así por los aires su habitual doble lenguaje psoecialista, que por cierto ha vuelto a cambiar de viento con motivo de la ventolera “soriana”. Llámalo hipocresía, si te gusta hablar en cristiano. Pero lo cierto es que ni nombre tiene tanta pose pretendidamente ecologista y tanto engaño a su propio electorado. Así va el PSOE en Canarias, como dijo aquel ministro franquista: “Hace un año estábamos al borde del precipicio, pero ahora hemos dado un paso hacia delante…”

NOTA AL MARGEN: Odia el carnaval y compadece al carnavalero, y más en estos tiempos de periodismo militante o militonto y de partidos-sectas donde el pensamiento propio está muy mal visto y (casi) todo el mundo habla como el político idiota, que “pone en valor” (con perdón por la simplonada) en lugar de valorar.

Petróleo Socialista Obrero Español: te conozco, mascarita
Comentarios