jueves. 28.03.2024

En un mundo de múltiples preguntas sin respuesta hay cosas que no se pueden explicar. Otras, sin embargo, tienen fácil contestación. ¿Fue casualidad que Pedro de Armas se convirtiera en centro de atención informativa mientras se abordaba un asunto tan turbio como es el de los correos electrónicos del Ayuntamiento de Arrecife, es casualidad que se haya montado un escándalo mayúsculo esta semana con el alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, como principal protagonista? Pues no, no es casualidad. Parece que todo forma parte de lo mismo, y curiosamente, parece que detrás pueden estar los mismos de siempre haciendo lo mismo que ya hicieron en el pasado y que parece que es lo único que saben hacer.

Independientemente de lo que determinen los tribunales de justicia, que serán los que digan si el herreño Domingo Martín Afonso tiene las pruebas que avalan las graves acusaciones que profirió este miércoles en la cadena SER de Lanzarote contra el alcalde y varios de sus concejales, llegando a asegurar, siempre utilizando un absurdo “presuntamente” que no vale para luego añadir cualquier cosa, que el concejal Jorge Quintero había cobrado 60.000 euros más una paga mensual de un hotel de Costa Teguise de 4.000 euros por mantenerse en el Grupo Mixto y evitar una hipotética moción de censura, detrás de esta historia existen evidentes connotaciones políticas. Coalición Canaria (CC), nos consta, está tras la pista de ésta y otras jugarretas que se huelen que les está preparando el sector menos noble del Partido Socialista (PSOE), ese que se jactó en su día de manejar los resortes del poder y que convirtió Lanzarote en un fuego cruzado en el que cualquiera que entrara en el selecto grupo de sus objetivos caería por la bala utilizada por alguno de sus muchos francotiradores. Ya lo advirtió recientemente el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, detrás de la desestabilización permanente de su institución está una parte de su partido y un grupo del PSOE que creían residual pero que parece que sigue manteniendo un notable mando en plaza.

No puede ser casualidad que en la reunión de la mesa de seguimiento del pacto que se produjo hace un par de semanas en Playa Honda y que desveló este medio de comunicación tanto Loli Corujo como José Juan Cruz, especialmente la primera, tuvieran un empeño tremendo en aclarar cuanto antes lo que estaba sucediendo en Teguise, donde el alcalde adoptó una decisión vinculada con un área del PSOE que se conocerá en breve que a la secretaria general no le gustó nada. En esa reunión, según nos cuentan, se habló de Oswaldo Betancort, y de lo que se sabía de él. ¿Es posible además que se realizara la preceptiva consulta al abogado y portavoz parlamentario Manuel Fajardo Palarea sobre el conflicto de La Villa, aportó su experiencia como letrado a sus "jefes" de filas en Lanzarote? Tanto Antonio Morales como Marci Acuña salieron del encuentro, como sospechan ya en CC desde hace tiempo, con la idea de que el joven político de Teguise se ha convertido en un objetivo a batir no por los adversarios que tiene fuera del pacto, sino, y principalmente, por los que tiene dentro.

Y si le quedaba alguna duda a CC de lo que está pasando, este jueves el concejal del PP Roger Deign ha soltado en el programa "Entre Barrios" de la emisora Crónicas Radio-Cadena COPE que su partido había quedado por la tarde para hablar con el PSOE de una posible alianza. Inmediatamente los conductores del programa recibieron un mensaje de la concejal socialista Lourdes Cabrera en el que se negaba la mayor y se pedía al concejal del PP que rectificara, cosa que no quiso hacer. Vamos, que se mantuvo en que los socialistas les habían llamado para hablar de un posible acuerdo en Teguise. Y todavía falta año y medio para las elecciones.

Sabemos que tanto el alcalde como sus concejales van a presentar varias querellas, como lo va a hacer también el hotel de Costa Teguise mencionado y en el que ya hay constancia de que jamás puso un pie el ex concejal del PP aludido, con el único objetivo de que el responsable de eso que se llama la Liga Anticorrupción aporte las pruebas que sustenten sus gravísimas acusaciones, o de lo contrario pague por el tremendo daño que se ha hecho a su honor y a su imagen. Habrá que esperar por tanto y ser prudentes, como lo hemos sido siempre, confiando por el bien de los afectados y por el de la política de Lanzarote en que todo sea mentira y quede en nada. Luego, si esto es así, que paguen todos aquellos que hacen públicas cosas que no son ciertas.

OSWALDO BETANCORT Y LAS CUENTAS PENDIENTES DEL PSOE
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