viernes. 29.03.2024

-¿Está usted camino de Bruselas?

-Estoy en Madrid ahora mismo. Salgo para Bruselas un poquito más tarde. Ahora estoy haciendo unas cositas en Madrid.

-La vicepresidenta del Gobierno central, María Teresa Fernández de la Vega, viaja mañana (hoy para el lector) a Finlandia, sede de la Presidencia de la Unión Europea, para hacer política de concienciación con la finalidad de que Europa se tome en serio el problema de la inmigración.

-Yo creo que Europa se lo está tomando en serio, fíjate como se ha producido una interrupción de la llegada de pateras durante dos semanas. En estos momentos las pateras están llegando de Casamanz, que es el sur del Senegal, estamos a 2.000 kilómetros de Canarias y del doble que la distancia que hay de Canarias a Cádiz. Es una distancia muy larga porque ya se ha conseguido el control de lo que es Senegal propiamente dicho. Como tú sabes la parte sur de Senegal se llama Casamanz. Es una zona algo independiente, no muy controlada por el Gobierno, y ya muy alejada y parece muy difícil que lleguen las pateras desde allí. En este momento están empezando a llegar pateras al sur de la Península otra vez y ocurre lo de siempre, y es que cuando cierras por un lado, se abre por el otro. Un poco lo del neumático viejo que cuando le pones un parche en un lado, explota por el otro porque la presión es muy fuerte. Pero parece que están empezando a tener eficacia las medidas pactadas por FRONTEX, el control de las zonas marítimas.

-Sin embargo, parece que son más positivas las que el propio Gobierno logra con los acuerdos alcanzados con algunos países de África.

-Bueno, pero eso es parte de unos acuerdos generales lógicamente de la Unión Europea. En estos momentos lo que está haciendo María Teresa Fernández de la Vega es reforzar lo que ya se ha empezado y, sobre todo, ir reforzando los acuerdos con los gobiernos en los que ha participado también la Unión Europea. O sea, estamos hablando de diferentes medidas. Por un lado, el control próximo, que puede llevar a salvar vidas humanas y luego el control ya más lejano, que es el control en el territorio y en la zona próxima a la costa y que se trata de disuadir a esta gente de que salga al mar. Y parece que está empezando a tener eficacia.

-¿Cuándo usted plantea estas cuestiones en Europa, nota la sensibilidad necesaria en Europa?

-Europa es totalmente sensible porque en estos momentos están entrando cientos de miles de personas en Europa por todos lados. Ten en cuenta que la agencia de control de fronteras está en Varsovia pero no por casualidad. Es que la mayor parte de la inmigración ilegal llega ahora mismo a Europa no llega por Canarias. Llega por Polonia, por la República Eslovaca, por Hungría, Austria, ya digo por los países de la parte oriental de la Unión Europea, lo que pasa que eso no tiene el mismo dramatismo, porque esta gente llega andando o llega en coche o en tren y realmente no sabes la cantidad de gente que está entrando, aparte de los que llegan por aeropuertos, sobre todo de América Latina. Uno de los aspectos más importante en este momento es quizás este aspecto, el más dramático, el que se ve más, pero no es el único. La agencia de control de fronteras está en Varsovia porque es precisamente en la Europa oriental donde más inmigración ileal se está produciendo, lo que pasa que en Canarias reviste este carácter dramático nacional por los episodios que se están viviendo, por la cantidad de gente que está entrando y por el dramatismo para los propios visitantes.

-Bueno, y porque territorialmente somos muy poca cosa.-

¿A qué te refieres?

-A que tenemos un territorio muy frágil y muy pequeño.

-No, no, el territorio de Canarias curiosamente está más protegido que el resto. En primer lugar somos bastantes islas pero sobre todo está protegido por el mar. Es decir, en Canarias no es fácil entrar. A pesar de la avalancha que se está produciendo no sabemos en estos momentos cuánta gente se ha ahogado y en cuanto hay dos o tres días de ‘meneo' se interrumpe la inmigración porque no hay quien entre en Canarias. Canarias tiene una protección que no tiene la mayor parte de la Unión Europea. En Europa para entrar se hace andando tranquilamente como si fuera de Mácher a Tías, ahí no se puede controlar. Ahí te enteras cuando ves que las ciudades están llenas de inmigrantes. Si los centros de las ciudades europeas, como París, Berlín, Londres, Bruselas...están llenas de inmigrantes con mucha mayor profusión que en Canarias.

-¿Usted cree que las comunidades autónomas de la Península serán solidarias con Canarias?

-Ha habido una ofensiva del Partido Popular (PP) contra Canarias organizada por las comunidades de Madrid, Valencia, Murcia, La Rioja... es decir donde gobierna el PP. El PP ha decidido lanzar un ofensiva contra Canarias para evitar que los inmigrantes sean trasladados de Canarias a la Península. Me parece una actitud poco coincidente con esa pretensión del PP de mantener la unidad de España, porque si las comunidades autónomas se niegan a participar para colaborar con Canarias en la llegada de inmigrantes, están rompiendo de hecho España. Me parece muy raro que un partido que se basa en la unidad de España, esté patrocinando en estos momentos la unidad de España. Lo que pasaba antes en Canarias. Cuando en Tenerife la gente de ATI se negaba a coger a los inmigrantes que llegaban a Lanzarote y Fuerteventura, pues ahora ocurre exactamente igual. El PP en la Península trata de evitar que los inmigrantes les lleguen porque es una forma de oponerse al gobierno socialista. Yo creo que es la única finalidad, no creo que sea por otra razón. Si hubiera un gobierno del PP en Canarias sería mucho más solidario. ¿Te acuerdas cuando José Manuel Soria les enviaba los inmigrantes a Madrid y la Comunidad Autónoma de Madrid tenía que soportar lo que hacía Soria porque era del PP? Ahora como no es el PP el que está gobernando en Canarias, pues el PP adopta una actitud absolutamente insolidaria con Canarias y con los canarios.

-De todas maneras lo que sí es dramático es la situación de los menores, porque los tiene que asumir la comunidad autónoma.

-Si, pero no hay que exagerar tanto, estamos hablando de un total de 700 menores frente a los miles de inmigrantes que ha tenido que recoger el gobierno de España. Estamos hablando de 20.000 inmigrantes. El gobierno español ha acogido 20.000 inmigrantes y aquí el gobierno canario se queja porque hay 700 menores cuando además hay una peculiaridad y es que estos menores realmente, como tú sabes, no están en la calle, están recogidos y lo que se está estudiando en estos momentos es una forma de devolverlos a sus países de origen, lo cual es muy difícil. Es muy difícil porque ahí prácticamente no existe familia. O sea, la idea de la familia es una idea europea, digamos cristiano occidental. En el mundo africano la familia no existe, existe la tribu y claro no hay formas de devolver a una tribu a un niño porque no sabemos a quién entregárselo. Yo no sé cómo se va a organizar esto porque la idea de que en todo el mundo hay familias cuando no lo hay va a ser un ‘jaleo'. En África el niño nace en una tribu o nace en una comunidad mucho más amplia donde no existe el concepto del padre y la madre como lo conocemos en Europa porque es una comunidad totalmente diferente y desde aquí estamos buscando un padre y una madre que no existe.

-¿Usted cree que esto tiene remedio por lo menos a corto plazo?

-A corto plazo no hay remedio. Simplemente las medidas que se están tomando que es evitar que se produzca ese flujo masivo, controlar un poco los sitios de mayor inmigración pero mientras haya esa enorme diferencia entre países ricos y países pobres la gente intentará llegar a los países ricos. Mientras haya sitios donde estamos tirando la comida como ocurre en estos momentos en Canarias por ejemplo mientras que al lado no hay nada que comer, pues la gente va a seguir viniendo. El tema está en evitar que eso se produzca. Además, hay otro elemento también y es que en estos momentos Europa necesita inmigración. Es seguro que en los próximos 20 años necesitamos 50 millones de inmigrantes. Esta es la razón fundamental por la cual la inmigración no se para. Los empresarios buscan trabajadores, la gente busca servicio doméstico, es decir en estos momentos no tenemos en los países desarrollados la población necesaria para mantener la actividad económica actual, con lo cual somos nosotros los que estamos pidiendo la inmigración. La única cuestión es regularla de forma que no llegue toda por Canarias o que no lleguen todos por Polonia, sino irlos distribuyendo a medida que van surgiendo las necesidades.

-Eso sería una fórmula de reparto racional.

-No, es que no hay más remedio. En estos momentos Europa no tiene más alternativa. Si en estos momentos los inmigrantes que tenemos en Canarias salieran de Canarias, el Archipiélago se paralizaría. No habría quien pudiera servir cafés a los turistas, entiendes, ni tampoco quien pudiera hacer ninguna obra de construcción. De lo que se trata es de espaciarlo, regularlo y ordenarlo pero la inmigración es importante en estos momentos. Como lo fue para Venezuela y tú estuviste allí en los años 40 y 50. Son países que no tenían mano de obra, que la necesitaban y que la reclutaban como fuera de una manera legal o ilegal. Lo único que tenemos que hacer es tener cuidado de que no sea excesiva.

“No hay que exagerar tanto, estamos hablando de 700 menores frente a los miles de...
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