viernes. 19.04.2024

Cerca de doscientos beneficiarios del programa municipal ‘Vive el verano’ participaron este jueves de la jornada de clausura celebrada en el Molino de Yaiza, donde niños de distintos pueblos sureños exhibieron orgullosos las manualidades trabajadas en los últimos dos meses y mostraron en vídeo gran parte de las actividades y excursiones de este plan de ocio accesible diseñado por el Área de Educación y Cultura del Ayuntamiento de Yaiza.

Los niños y niñas del municipio recibieron diplomas y compartieron sus experiencias junto a familiares, monitores y representantes del Ayuntamiento. Con algo de pena, por el asomo del otoño, pero satisfechos por haber disfrutado de días inolvidables, los diferentes grupos despidieron felices el verano bailando, cantando y dando rienda suelta a su imaginación. Francisco Guzmán Rodríguez, concejal de Educación y Cultura, Manuela Martín, titular de Dinamización Social, y Roque Herrera, responsable de Transportes, acompañaron a las familias de Yaiza en el cierre de ‘Vive el verano’.

Las imágenes y sonidos son una muestra fehaciente de lo divertido que resultó para los niños aprender, jugar e integrarse. ‘Vive el verano’ se desarrolló en salones de la Casa de la Cultura de Yaiza, centros socioculturales de Uga, Las Breñas, La Casona de Femés y en el Centro Cultural La Aurora de Playa Blanca.

Este servicio gratuito para niños, con edades entre 5 y 12 años, estimuló la creatividad y el trabajo en equipo de los participantes, pero también reforzó el aprendizaje académico de cara al inicio del curso escolar, fomentando, en todo caso, la cooperación, el respeto a los demás y la solidaridad. “Los talleres y la variedad de actividades lúdicas más el interés de los niños, así como el compromiso de sus padres y monitores, facilitaron el cumplimiento de objetivos”, destaca Francisco Guzmán Rodríguez.

No se puede obviar que durante la época estival es más complicado para la familia conciliar el trabajo y el hogar. En este sentido, ‘Vive el verano’, que propuso horarios totalmente flexibles, también se convirtió en una alternativa para que los niños inscritos pudieran aprovechar mejor el tiempo libre mientras sus padres o tutores cumplían con sus obligaciones laborales y tareas en casa.

‘Vive el verano’ termina además con un alto nivel de participación de madres y padres, que supone mayor integración y convivencia entre vecinos. La excursión a Isla de Lobos, las Jornadas Culturales en Las Casitas o la visita al Museo de la Piratería, en el Castillo de Guanapay (Teguise), son tres magníficos ejemplos del buen ambiente vivido alrededor del programa. La vuelta al cole llama a la puerta con el buen sabor de boca de ‘Vive el verano’.

Niños de Yaiza despiden dichosos ‘Vive el verano’
Comentarios