Por Andrés Chaves
1.- Si Ángel Llanos no cesa a un señor que se llama Luis Villegas de su puesto en el Ayuntamiento de Santa Cruz, lo tiene crudo en su partido. Villegas es un cargo nombrado por el PP en el municipio, así que lo pueden echar a la mínima. Interpreta Cristina Tavío que el discurso de Villegas en Adeje vulnera la legalidad y es susceptible de querella. En suma, la acusó de apropiarse de fondos del partido, según la interpretación de la propia Cristina Tavío. Llanos tendrá que echar a Villegas cuanto antes, si no quiere que el 71% del PP se le venga encima. Incluso le podrían abrir expediente al propio Llanos. Nadie se explica que el tesorero del partido (el citado Villegas) arremeta contra Cristina para defender a Llanos y el mismísimo Llanos le vote en contra. Esto forma parte de un congreso de locos, en el que los oradores no brillaron precisamente; más bien todo lo contrario.
2.- La reforma del PP tinerfeño pasa por partidas de ajedrez en varios pueblos de la isla. Tiene mucho interés el PP en gobernar en Los Realejos, donde Coalición Canaria lo hace con el PSOE; pretende cargarse a Lola Padrón en el Puerto de la Cruz, destinando para ello a Eva Navarro a una dirección general y aliándose de nuevo con Coalición Canaria (ya fueron amigos en el pasado); en Güímar podría intentarse también algún movimiento para apartar al alcalde socialista. Después del triunfo de Tavío en el congreso, la nueva dirigencia -qué palabro más horrible- desea hacerse notar y subir el papel del Partido Popular en la sociedad de Tenerife. Se lo han currado y están ansiosos por saborear el triunfo.
3.- Después de todas estas movidas, el congreso insular de Coalición Canaria de este fin de semana próximo aparece como en la nebulosa. O están tan mal que no despiertan interés o no habrá lucha entre Javi González Ortiz y Elena Luis , el primero en el poder y la segunda como aspirante al título. Aunque exista diferencia de peso entre el uno y la otra, el combate no será encarnizado; y ni siquiera sé si habrá combate o todo se resolverá amablemente. Los alcaldes del Norte están descontentos con el trato que les da González Ortiz y quieren hacerse oír. Coalición Canaria ya no despierta tanto interés como en aquellos días de mortadela y rosas. El pasado es el pasado y el futuro aparece incierto. Tan incierto que sus líderes apenas rellenan páginas en los diarios. Quien te ha visto y quien te ve.