jueves. 28.03.2024

No, si cuando decimos que don Miguel González la tiene tomada con nosotros es que la tiene tomada. Parece que no le hizo demasiada gracia leer lo que en esta misma sección publicamos hace unos días. Pues repetimos. Este socialista, que ha mamado en las fuentes de la democracia -fuentes de la democracia, ojo-, tiene un respeto absoluto por la pluralidad, por la diversidad de opiniones y por el deber que se tiene cuando uno ejerce un cargo público. Sistemáticamente se niega a hacer declaraciones a este medio, tal vez porque lo considera enemigo personal, aunque nos dicen que intenta convencer al resto de sus compañeros de que también es enemigo del Partido Socialista Canario (PSC), PSOE para la feligresía. Nada más lejos de la realidad, como saben nuestros estimados lectores y como saben los socialistas de verdad que todavía quedan en esta tierra. Aquí el que se excluye es porque quiere. Y curiosamente deberíamos ser nosotros los que censuráramos las salidas en el medio de don Miguel por su censurable comportamiento y no al revés. Pero en fin, así son los demócratas de nueva generación, los de “los nuevos tiempos”. La última, como viene siendo frecuente, la hizo este viernes, a la salida del minipleno que se celebró a primera hora de la mañana en el Cabildo. Nuestro compañero Ricardo intentó que le explicara el montante y la cuantía de las becas que se acababan de aprobar, para informar a nuestros lectores, que imaginamos que estarán interesados en este importante asunto. Esta vez ni siquiera le remitió a la nota de prensa que luego nunca aparece, esta vez le remitió nada menos que al orden del día del pleno. Vamos de mal en peor. Y al resto de compañeros de la Corporación, empezando por la presidenta, parece no importarles demasiado.

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