Las asociaciones de consumidores han rechazadoeste miércoles la subida de la tarifa eléctrica y han advertido de que la factura de un ciudadano medio español se puede incrementar en más de 50 euros anuales si se cumplen las previsiones del sector energético, que apuntan a un aumento del 10 por ciento.
El presidente de la Unión de Consumidores de España (UCE), Miguel Ángel Oliván, ha mostrado su "absoluto" desacuerdo con el hecho de que la tarifa eléctrica se incremente por encima del IPC.
Oliván ha explicado que aunque el aumento se refiere a la tarifa eléctrica de último recurso (TUR), como todas las tarifas del mercado libre están referenciadas a ella, al final la subida va a ser generalizada.
El representante de la UCE ha pedido al Gobierno que tome medidas para corregir la actual situación, en la que "muy pocos ciudadanos" se han acogido al mercado libre.
Además, ha denunciado que el Ministerio de Industria no consulte a las organizaciones de consumidores y sólo escuche a las compañías eléctricas.
En la misma línea, FACUA ha pedido al Gobierno que deje de plegarse a los intereses de las eléctricas "castigando injustamente el bolsillo de los consumidores".
Esta organización ha advertido en un comunicado de que el recibo del usuario medio se ha encarecido en 158,76 euros anuales en tres años y medio, cifra que "previsiblemente volverá a aumentar de forma considerable en enero de 2011".
Estas subidas, según FACUA, representan "un ataque frontal del Ejecutivo a la economía de las familias, que se hace aún más duro al producirse en una coyuntura de crisis".
Por su parte, la OCU ha estimado en 55 euros anuales el incremento de la factura del consumidor medio si se confirman las previsiones.
La organización ha recordado que esta subida vendría a sumarse a las que ya se han producido en 2010 (en enero y octubre), lo que significa, según la OCU, que el consumidor acumulará, desde 2008, un aumento de la luz cercana al 50 por ciento.
Además, los españoles pueden llegar a tener la factura más cara de la Unión Europea, solo por detrás de Alemania y Dinamarca.
También CEACCU ha rechazado nuevos incrementos en la tarifa eléctrica y ha considerado que una nueva subida supondría un duro golpe para las economías domésticas más vulnerables "y una burla a todos los consumidores ante la falta de transparencia en la formación de los precios en este sector".
La organización ha exigido al Gobierno que realice "la prometida revisión de costes".
