viernes. 29.03.2024
Adán Martín, presidente del Gobierno de Canarias

“La decisión de recurrir la sentencia del TSJC sobre el REF es técnica, de la Consejería de Economía y Hacienda, no del presidente”

“Estamos a la espera de la respuesta de Aena sobre la ampliación de la pista del aeropuerto de Lanzarote”

-Usted estaba ayer en Fuerteventura, anoche en Tenerife y hoy de vuelta aquí en Lanzarote. ¿Cómo se aguanta eso?

-Pues en base a tener mucha ilusión y responsabilidad.

-¿No ha perdido la ilusión?

-No, la verdad es que ahora de cara al fin de curso uno es como con los exámenes, cuando te vas a examinar trabajas más y le echas más horas y dedicas mucho tiempo para al final ver que se realiza una labor. Yo creo que ese es el único premio que tiene la política y por tanto si ese es el premio, lo haces con ilusión.

-Recuerdo que recién llegado usted al cargo de presidente del Gobierno de Canarias, yo le preguntaba si era consciente de que llegaba a la Presidencia de la Comunidad Autónoma en el peor momento de la historia de Canarias y los acontecimientos me han venido a dar la razón. Tenemos problemas muy graves con el temas de la inmigración, ¿en este sentido, Madrid ha estado a la altura de las circunstancias o Canarias queda lejos?

-En Madrid ha habido algo que no tiene discusión y es que ha ido detrás de los acontecimientos. Esa es la realidad. Y que se veía venir. O sea, todos en Canarias éramos conscientes de las dos inmigraciones, la inmigración por patera, barco o cayuco y la inmigración por el aeropuerto. De ambas somos conscientes desde hace años, que era un problema que había que atemperar, reducir e ir buscándole soluciones. Venimos demandando esas soluciones en sendos ámbitos. En el ámbito aeroportuario, de control de aeropuertos, control de fronteras y de control por el mar, desde hace muchos años. Primero, cuando venían desde Marruecos y después cuando se cerró Marruecos, dijimos ahora empezarán a venir por abajo, hay que empezar a trabajar en el Sur. La política española en África ha sido nula, lo reconocía el secretario de Estado hace muy poco en una entrevista en El País, donde decía que la política española con África era la de los años 70. Unos años donde lo único que se quería era que Canarias no se acercara a la uva. Entonces tenían unas embajadas colocadas en algunos sitios para en aquellos que podían tener una cierta influencia política, preservar la posible demanda de África de Canarias. Pero eso fue en los años 70. En los años 90 se vio muy claro que había que cambiar la política . Ya desde el año 99, en la legislatura anterior, empezamos a girar toda la política del propio Gobierno de Canarias y a concentrarla en África y a demandar de España que empezara a concentrar la política en África subsahariana. Lo han empezado a hacer hace escasamente 15 días. Luego no ha habido anticipación ninguna a los acontecimientos, ha habido un cierto relajamiento y en virtud de ello es un problema del gobierno anterior y de éste.

-¿Usted se dirigió a la Casa Real tal como anunció en su momento o fue al contrario, que el Rey se dirigió a usted?

-No, yo dije que no había muchas más instancias que la del presidente español, si no se movía ni cogía impulso realmente. Que no había nada más que dos y que en ambas líneas trabajaría. Una era la Comisión Europea y , de hecho, yo el miércoles voy a estar viajando a Bruselas y el jueves tengo una entrevista con el comisario de cooperación, el que lleva todos los recursos económicos, fondo europeo de cooperación para los países más pobres, que prácticamente son los del África subsahariana. Me entrevisto con él a las nueve de la mañana del jueves. Y después intentaré en una entrevista de los presidentes con Barroso, hablar con Barroso de este tema. Pero que después ya no quedaba otra altura. Eso lo dije un poco para intentar también movilizar voluntades del propio Jefe del Estado. Yo sé cuál es el papel del Jefe del Estado pero también bien sé la preocupación que tiene el propio Jefe del Estado porque lo he hablado muchas veces con él. Lo he hablado cuando estuvo aquí en Lanzarote, en la Zarzuela cuando he estado de visita con él y sé de la preocupación que tiene el Rey de España por Canarias, por los problemas de Canarias y por un problema tan sencillo como la inmigración. Yo no dije nada más que eso, no pedí entrevista, dije que habría que hablar de eso cuando tuviéramos una reunión y fue el Rey el que me llamó. Y el Rey fue el que en aquellos días expresó la solidaridad de la Casa Real con todos los canarios. Yo creo que fue un detalle.

-Continuando con la inmigración, está claro que se ha disparado el crecimiento poblacional de islas como Lanzarote y Fuerteventura...

-Ya tenemos dos millones trece mil habitantes. El Día de Canarias lo introduje como un dato, el dato que va a salir del padrón del Instituto Nacional de Estadística (INE), por tanto no hay duda, es dos millones trece mil habitantes a 1 de enero de 2006.

-Pero parece difícil hacer frente a ese incremento de población a menos que se tenga la contrapartida que permita cubrir ese gasto. ¿Desde el Gobierno se percibe algún gesto de solidaridad de Madrid con Canarias en este sentido?

-No, de hecho...

-Es que si no esto es un ‘callejón sin salida'.

-Por eso la demanda de CC en el Congreso en el Debate de la Nación del pasado año. La creación de un grupo de población que ha venido trabajando en Moncloa con un grupo de Gobierno de Canarias y un grupo del Gobierno de España. Nosotros hemos propuesto una serie de medidas. Yo presenté un documento sobre el crecimiento de la población hace año y medio ya. Me llamaron alarmista, me criticaron en el Parlamento, mandé el informe al Consejo Económico y Social (CES), del propio CES hubo un informe muy tibio aunque algunas de las personas del CES me decían que había que preocuparse pero no hablar. Yo creo que de la inmigración y de la población hay que hablar con claridad, sin llegar a derrotismos o a que la población no duerma por la noche. Pero hay que empezar a hablar con datos, cifras, con la realidad. Hay que encararla de frente, saber que esta tierra no admite un crecimiento poblacional ilimitado. Yo en ese tema discutí mucho con el PP, porque Soria es de los que dice que a él le vale el modelo de Singapur, que tiene cinco millones de habitantes en una isla del tamaño de La Palma. Y yo le digo, pues a nosotros yo creo que no nos vale, porque al final terminaríamos en unas islas totalmente masificadas, el turismo no tendría sentido, no es el turismo de Singapur lo que existe. Singapur tiene después una industria tecnológica muy fuerte basada en los asiáticos...un esquema totalmente diferente al nuestro. Entonces yo creo que en nuestra tierra eso es imposible. Nosotros no tenemos un modelo como el que puede defender el PP, que la inmigración vale la que sea, sí distingue la regular y la irregular, pero que le valen los crecimientos poblacionales. El crecimiento nuestro del año 2000 al 2005 ha significado que de cada seis personas, una es de crecimiento natural y cinco son de inmigración. Eso es muy grande. O sea, que de cada seis, cinco vengan de fuera nos da unos crecimientos poblacionales que no son asumibles por los servicios públicos, que se ven desbordados, ni por la propia capacidad del territorio. Necesitaríamos muchas más carreteras, muchas más agua, muchas más potabilizadoras y ocupar mucho más el territorio. Por eso hay que atemperarlo. No es que no integremos a todos los que están, no es ese el problema, hay que hablar de integrar a toda la población, de que cojan las costumbres de tranquilidad, nuestra cultura, nuestra forma de ser pero por otro lado hay que ir bajando esos ritmos de crecimiento.

-Si, pero la conjunción de toda esa población heterogénea necesita una inversión muy fuerte.

-Hemos luchado mucho. Venía leyendo un artículo en prensa donde se decía que las cosas había que verlas de forma inmediata y no planificarlas. Y yo creo que al final la única forma de resolverlo es pensando en el futuro. Yo creo todo lo contrario. Nosotros lo que hemos hecho es que en este momento con los convenios que tenemos firmados con el Estado en infraestructuras de carreteras, en infraestructura portuaria y aeroportuaria más los puertos canarios más el agua, más los recursos propios que nosotros tenemos, podemos atender al crecimiento de sanidad y educativo (el educativo en este momento está bastante controlado, el de sanidad todavía estamos haciendo un esfuerzo mucho mayor porque entiendo el problema de las personas cuando van a un centro de salud o demandan mayor capacidad de nuestros hospitales), ahora, el ritmo no puede seguir siendo de cada seis personas, una de crecimiento natural y cinco de inmigración. Ese ritmo hay que irlo llevando a que sea de cada seis, tres, cuatro de crecimiento natural y uno o dos de inmigración. Siempre habrá algo de inmigración pero tiene que ser una inmigración contenida. Por ejemplo el crecimiento natural suele ser el 0,6 ó el 0,7% de la población, nosotros estamos creciendo al 3%. Pues tenemos que irnos a crecimientos del 1%, o sea una parte de crecimiento natural y otra pequeña parte de inmigración. Para eso hay que ser mucho más duros con el control de visados en la entrada, sabemos que los comunitarios tienen libre circulación pero no son los comunitarios los que están creciendo en estos momentos y básicamente una buena parte de la población que viene de América, pues la que está integrarla, pero no se puede seguir creciendo a esos ritmos. Eso hay que bajarlo. Para eso hicimos una serie de propuestas muy claras, nos han pedido un mes más en Moncloa, porque aunque dicen que resuelven las cosas muy rápido, también se toman su tiempo y esperamos por lo menos concretar alguna de las medidas para ir deteniendo el crecimiento.

-¿Cómo es la relación con Moncloa? ¿Es fluida?

-En momentos determinados ha sido muy fluida, cuando se apreta mucho como en la inmigración, pues parece que hay un cierto recelo. Pero es que mi obligación es defender Canarias. Yo intento buscar la mayor fluidez y la lealtad y soy leal, ahora la lealtad no quiere decir que te amordacen en un momento determinado. Cuando en las semanas pasadas hubo de decir claramente que el Gobierno no tenía puestas las pilas, que estaba pensando que se le iba a arreglar el problema solo, pues lo dijimos. Que molestó algo en Moncloa, pues lo sentimos mucho pero la realidad es la que es. Insisto, es que está tan claro que lo reconoce el propio secretario de Estado en unas declaraciones a El País hace tres domingos diciendo que España tenía los mismos recursos para toda África subsahariana que para Bolivia y que en el año 2008 lo iban a acrecentar. Después, en el Debate de la Nación, Zapatero aludió a que nosotros teníamos el 0,09 y que tenemos muy poca cooperación en Canarias. Primero no es verdad, tenemos el 0,3 y segundo, nosotros lo hemos multiplicado por dos en esta legislatura y por dos en la legislatura anterior pero nosotros tenemos ocho millones de euros concentrados todos en África subsahariana. España tiene ese 0,3 pero disperso por todo el mundo. En África subsahariana tiene poquísimo dinero. Entonces ahí España tiene que hacer un esfuerzo enorme.

-¿La Comunidad Autónoma de Canarias ha vivido de espaldas a esa África próxima?

-Hasta el año 99, en el año 98 Manolo Hermoso empezó a abrir un poco la política con Cabo Verde. En el año 99 yo fui responsable de las relaciones institucionales y empecé a viajar. Fuimos a Cabo Verde porque sabíamos que Cabo Verde, además de que viene gente de Cabo Verde, tiene un papel principal en las relaciones de esos países que están ahí. Cabo Verde fue la puerta de salida de la inmigración africana hacia América. Entonces empezamos a hacer cooperación con Cabo Verde, Mauritania, Senegal y con Gambia, y con Marruecos. La concentramos ahí. Empezamos a trabajar desde el año 2000 y poquito a poco hemos empezado a tener relaciones. El hospital de Noachdibu

está equipado por canarios, yo he estado en Noackoch inaugurando hace dos o tres años una serie de pozos con una desaladora y unos molinos pequeños de energía eólica hechos por el Gobierno de Canarias para poderles potabilizar el agua. O sea, el Gobierno de Canarias viene haciendo un esfuerzo, lo que pasa que en la medida nuestra.

-¿Qué pasa con Europa?

-Europa no ha tenido puesta la cabeza en África. Puso la cabeza en la expansión por el Este en los últimos diez o quince años. En un momento determinado las regiones ultraperiféricas estuvimos en el centro de la política europea y ahora lo que estamos haciendo es concienciando a la Unión Europea de que tiene que ponerse las pilas. Y eso se hace en base a acudir a todos los foros, en todos los foros empezar a meter enmiendas, el grupo de islas del Comité de regiones ya ha tomado a iniciativa nuestra para que trasladen a la Unión Europea y al Comité de regiones, que tiene peso en la política europea, para que inste a la comisión para que active la política con África. Europa reacciona muy lentamente y entonces hay que estar encima.

-Por otro lado, a pesar de que el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Canarias, José Carlos Mauricio, anunciaba a bombo y platillo que no iban a recurrir la sentencia del TSJC sobre el REF, ahora parece que no va a ser así. ¿Qué pasa con este asunto?

-Esa es una decisión técnica y de la Consejería de Economía y Hacienda, no del presidente. Lo que pasa que yo ese tema lo conozco bien porque fue presidente del Cabildo. Esto obedece a tres cosas que se reclaman. Uno es qué población se toma como referencia. Claro, cuando distribuyes un dinero en función de la población, depende de la población cuando unas islas están creciendo más que otras. A las que crecen más, les interesa tomar la población más joven y a las que crecen menos, la población más vieja. El segundo problema es si la Comunidad Autónoma venía cobrando mucho por la gestión del cobro. Venía cobrando un 5,3%. Y, en tercer lugar, si los descrestes del APIC fueron compensados o no. Pues bien, en el año 2003, después de casi 25 años discutiendo el REF en los tribunales, se aprobó una ley en el Parlamento de Canarias por la que se resuelven todos los problemas citados anteriormente. A partir de esa ley ya los cabildos no han presentado más recursos.

-¿Se olvidaron ustedes de la ampliación del aeropuerto dentro del Plan Canarias?

-Hace tres o cuatro meses que Manolo Fajardo, el consejero de Turismo y Miguel Becerra, el que lleva un poco la coordinación de todas esas cosas, estuvieron en Aena con el director general, planteándole la ampliación del aeropuerto de Lanzarote y entendieron el problema. Manolo Fajardo tenía un informe que me había traído y Aena entendió el problema y quedó en darnos una respuesta.

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